iProfesionaliProfesional

Inesperado veranito cambiario: empresarios sin caja venden dólares y presionan a la baja del mercado paralelo

El Banco Central está comprando de hasta u$s100 millones por día y hay un boom de aperturas para operar en "conta con liqui". Pero hay voces de alerta
01/04/2020 - 06:00hs
Inesperado veranito cambiario: empresarios sin caja venden dólares y presionan a la baja del mercado paralelo

Paradójicamente, el "plan canuto" con el que Guido Sandleris creía que iba a tener bajo control al dólar recién ahora, casi un año y medio después, está empezando a surtir efecto. En realidad, no es el duro ajuste monetario que encaró el ex presidente del BCRA lo que explica este desarme de dólares sino el efecto que está causando la cuarentena sobre la economía local.

Con las fábricas paradas y las persianas de los comercios bajas, muchos empresarios tuvieron que recurrir a los dólares que tenían "encanutados", ya sea en bancos locales o en cuentas en el exterior para poder hacer frente a sus necesidades en pesos. Así, tanto pequeñas como grandes empresas son las que hoy alimentan la oferta de dólares y explican este "veranito financiero" que vive el tipo de cambio, tanto en las cotizaciones paralelas como en el mercado oficial.

En el primer punto, donde el precio del dólar se mueve estrictamente por las leyes de la oferta y la demanda, la cotización bajó casi 7% desde que se decretó el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO).

El dólar MEP, que es el precio que surge de comprar bonos en pesos y venderlos en su versión en dólares, cayó de $91,40 a $85,40 en los últimos diez días de marzo. El ‘contado con liqui’, que implica la misma operación pero con la venta del bono o acción en el exterior, pasó de $91,60 a $86,90 en el mismo lapso.

La misma situación se vivió en el mercado oficial, con la diferencia que el efecto no se notó en el precio sino en el saldo de las intervenciones del Banco Central. En concreto, mientras el organismo monetario iba fomentando un leve pero constante reacomodamiento al alza de la divisa -con el objetivo de que el tipo de cambio recupere algo de terreno después del atraso cambiario que acumuló tras las fuertes devaluaciones de las monedas de la región- la mayor oferta de dólares de las empresas revirtió la tendencia previa y el BCRA volvió a comprar reservas.

Los últimos datos oficiales muestran que el 25 de marzo el Central compró 95 millones de dólares en el mercado, en lo que fue su primera intervención con saldo positivo desde el 11 de marzo. Desde ese miércoles, en las mesas de dinero de la City especulan con que todos los días el BCRA compró entre u$s50 y u$s100 millones por día, más allá de que el tipo de cambio cerraba al alza.

En el mercado distintos analistas consultados coinciden en que esta tendencia seguirá, al menos mientras dure la cuarentena, con lo cual esperan que hasta mediado de abril no haya presión sobre el dólar libre y el BCRA aproveche para seguir recuperando reservas.

La explicación del mercado

"Por un lado hay aumento de la demanda real de dinero: el que tiene pesos físicos se paró sobre esos pesos y no los quiere gastar porque no saben cuánto va a durar esto", explica Norberto Sosa, director de Invertir en Bolsa. En ese sentido, agrega, los indicadores que muestran la evolución de la demanda de dinero, como el M2 o el M3, están creciendo por encima de la inflación.

Por otro lado, destaca Sosa, tanto el individuo como la empresa que no tiene ingresos para cubrir su necesidades de pesos y contaba con una reserva de dólares, está acudiendo a ese ahorro para atravesar este momento. "Aquel empresario que no generó facturación y tiene dólares, necesita vender esas divisas. Y los que están en esa situación son los que están presionando al dólar MEP y al ‘contado con liqui’", remarca el ex Raymond James.

Esta tendencia no hace distinción de tamaño. "Lo están haciendo las empresas grandes, que durante el año pasado y el anterior se armaron una buena caja de dólares en el exterior. También algunos dueños de pymes que ya sea en su cuentas personales o de algún ingreso que separaron de la empresa en dólares. Y también todos los argentinos que tienen algún ahorro en el exterior o dólares en el colchón", detalla Sosa.

En la misma línea, Gustavo Neffa, socio y director de Research for Traders, asegura que "desde abril de 2018 que Argentina se viene dolarizando de una manera agigantada, como nunca lo hizo en su historia". Para el especialista hubo diversas razones que explican que este furor de los argentinos por el dólar: "lo hicieron respetando las señales que tenían del mercado de deuda, de la macroeconomía, de la inflación, del PBI".

Neffa explica que todas esas personas que se habían dolarizado son los que están desarmando posiciones para para cubrir gastos en pesos. "Van desarmándose posiciones de inversiones en la Bolsa, en dólares y se van desarmando también dólares que puedan ser traídos al país", comenta el socio y director de Research for Traders.

Desde una reconocida Sociedad de Bolsa -o ALyC, como se denominan actualmente-, aportan un dato que grafica esta necesidad de pesos que hay en el mercado. Según sus registros, en la última semana tuvieron gran demanda de aperturas de cuenta, no para invertir en el mercado financiero sino para vender dólares que tenían en bancos.

"En vez de venderlos en el banco, a $58, muchos se abrieron cuenta con nosotros, pasaron esos dólares a la cuenta comitente y lo terminaban vendiendo por dólar MEP a $80. Tuvimos mucha demanda de este tipo de operaciones", cuenta un trader de esa firma.

Quiénes son los que venden

Asimismo, hay que tener en cuenta que hay sectores más afectados que otros con este parate económico. "Claramente hay empresas que no están recibiendo flujo. Uno se puede imaginar que impacta en el sector de entretenimiento, muchísimo en transporte y esos son los que están vendiendo reservas para sobrevivir", detalla Santiago López Alfaro, socio y director de Delphos Investment. "También restoranes, locales de comida, estaciones de servicios. Son todas industrias que reciben flujo diario", agrega.

Según un informe de la consultora Abeceb, que dirige el ex ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, la cuarentena impacta a la producción local por el shock de oferta, por la imposibilidad de producir, y de la demanda, por la caída en el nivel de actividad y el consumo.

En concreto, detalla que con el prolongamiento de la cuarentena habría tres grandes perjudicados: el transporte, que podría sufrir una caída del 10,5% en el año; hoteles y restaurantes, con una contracción del 8,5% y la construcción, con una baja estimada del 8,3%.

Al mismo tiempo, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) advirtió que en marzo, producto de la cuarentena la facturación de las compañías caerá 70% respecto al mismo mes de 2019. Los números surgen de una encuesta que CAME Joven realizó entre el 23 y 25 de marzo entre 400 jóvenes empresarios de 22 distritos del país.

Así, el 49,1% de los consultados respondió que estima que la caída de facturación estará en un rango de 76 a 100%, mientras que otro 19,2% cree que será de entre 51 y 75%.

"Si medimos el impacto negativo en cantidad de meses, se estima que alrededor del 68,1% de los consultados no podría sobrevivir más allá de tres meses. Al día de hoy, el 8,3% afirma no encontrarse en condiciones de afrontar la crisis económica, fruto de la emergencia sanitaria. Y apenas el 1,8% cree que puede atravesar esta situación (la mayor parte de ellos pertenece a rubros esenciales)", destaca CAME Joven en el informe.

¿Cuándo termina esta tendencia? 

Así como los comerciantes esperan un menor ingreso durante la cuarentena, en el mercado calculan que mientras siga este freno en la actividad económica, seguirá este veranito en el mercado de cambios. "Creo que por lo menos hasta después de Semana Santa va a durar esta tendencia, sigue la cuarentena y además las empresas pagan sueldo hasta esa fecha", sostiene Norberto Sosa.

"En la medida que una empresa no facture y quieran mantener viva la compañía va a tener que recurrir a sus ahorros y eso termina presionando a la baja sobre el dólar", acota Sosa.

Lo mismo opina Neffa, quien asegura que la tendencia va a continuar. "Obviamente que puede haber algún rebote, pero mientras no estén abiertos los bancos, las empresas no accedan a las cajas de seguridad, los particulares que tienen negocio a la calle no estén facturando, eso es difícil que se destrabe", comenta. Así, agrega, el dólar va a estar presionado a la baja, artificialmente, lo que al mismo tiempo es una oportunidad para tomar posiciones dolarizadas.

Lo mismo prevén con el mercado de cambios oficial, con el BCRA comprando dólares mientras siga esta situación. "A ese mercado le aplica las generales de la ley. Habrá empresas que estaban demorando liquidar y ahora no les queda otra y salen a vender. Decididamente hoy falta de pesos y el BCRA aprovecha para comprar esos dólares", comenta Sosa.

"El BCRA va a seguir sumando reservas, el FMI se lo está recomendando, y lo que sobra del mercado, que hoy se opera muy poco, se lo lleva el BCRA", comenta el gerente financiero de un banco local.

Los riesgos a futuro

Santiago López Alfaro, por su tanto, pone el foco en el día después. "Se sabe que hoy, con la economía parada, la gente demanda pesos para sobrevivir. Pero cuando la economía se reactive va a haber un sobrante de pesos y ahí vamos a ver cómo actúa el BCRA", analiza el director de Delphos Investment.

En el corto plazo, agrega, "hay un aumento de Adelantos Transitorios porque el Gobierno necesita pesos para capear el temporal y la gente hoy demanda pesos porque los necesita". El economista advierte que en lo que va del año el BCRA emitió $230.000 millones para asistir al Tesoro, una cifra que prácticamente iguala a todos los billetes que se imprimieron el año pasado. 

"Es verdad que la economía venía de una baja monetización, pero esta emisión es grande, y puede traer un riesgo inflacionario y un riesgo de suba del dólar un par de meses después de que la economía se normalice", remarca.

Es cierto que empiezan a asomar esos riesgos, y el BCRA tendrá que ver cómo hace para sacar esos pesos y evitar que vayan a precios. Pero mientras tanto, y si bien hoy tienen el foco en buscar medidas que logren paliar el impacto de este parate económico sobre consumidores y pymes, en el Central no sólo no tienen la preocupación de que aumente la brecha sino que aprovechan para sumar reservas.

Temas relacionados