Nueva instancia para acreedores con bonos en default
Arrancan este jueves 90 días clave en la batalla judicial por el gigantesco default de la deuda argentina. Durante este periodo, los acreedores que tengan bonos con legislación en Nueva York podrán sumarse a las demandas colectivas contra el país. Según las primeras estimaciones ello podría duplicar el monto de los juicios iniciados a la Argentina, al pasar de los u$s2.500 millones a más de u$s5.000 millones.
El juez de Nueva York, Thomas Griesa, firmó el viernes pasado la notificación que habilita las acciones de clase (demandas colectivas) contra la Argentina, según informa El Cronista en su edición impresa. Hoy comenzarán a llegar a cada uno de los tenedores de títulos públicos con jurisdicción en los EE.UU. (la medida no corre para acreedores con bonos bajo otra legislación) las respectivas comunicaciones. También arrancará una amplia campaña de difusión de la medida judicial, con solicitadas en diarios de EE.UU, Europa, y también de la Argentina.
Significa que desde hoy y hasta fines de febrero los acreedores puede sumarse a juicios ya iniciados contra el país a través de las acciones colectivas. En rigor, no deberán manifestar su intención de adherirse. El sistema es inverso: sólo los que no quieran sumarse a la iniciativa lo deberán aclarar por escrito. De otra forma, transcurridos los noventa días quedan automáticamente incorporados a las acciones de clase iniciadas, según la serie del bono que posean.
Actualmente hay en marcha en los EEUU 120 juicios contra Argentina por un total de u$s2.500 millones. En Estados Unidos se encuentran poco más del 30% del total de acreedores que no entraron al canje de deuda (denominados holdouts), por un total de u$s 20.000 millones. Es decir, que hay alrededor de u$s 6.000 millones.
Se estima que a partir de esta nueva medida que tomó el juez Griesa el monto de los juicios en curso podría duplicarse, hasta pasar de u$s 2.500 millones a u$s 5.000 millones. La situación de los holdouts será uno de los temas que deberá encarar el próximo ministro de Economía, Martín Lousteau.
"La decisión de Griesa es trascendental en cuanto a la situación de los juicios en los EEUU y las demandas contra la Argentina", afirmó Horacio Vázquez, miembro de la comisión directiva de la Asociación de Damnificados por la Pesificación y el Default (Adapd) al mismo medio.
El fallo de Griesa se logró mediante las presentaciones de los estudios de abogados de Guillermo Gleizer, Sirota & Sirota, y Proskauer Rose. Se espera que el buffet que asesora a la Argentina –Cleary, Gottlieb, Steen, & Hamilton– apele la decisión del juez. Ello podría demorar el proceso, pero difícilmente revertirlo.
Mal escenario
Según el abogado Pablo Giancaterino, "para la Argentina no necesariamente es un mal escenario el hecho de que prosperen las acciones de clase. Esto le permitirá al país identificar más fácilmente a los acreedores si es que quiere realizar una propuesta a los bonistas que aun tienen títulos del país". Para el especialista en cuestiones legales, "es una posibilidad para demostrar públicamente, de manera trasparente, y con costos relativamente bajos, que la Argentina quiere negociar".
En tanto, Giancaterino destacó que "en el caso de los EE.UU. a fines de 2007 vence el plazo de seis años para demandar contra la Argentina por el default". Por ello –agregó– "creo que va a haber una masiva adhesión a las acciones de clase".
Cabe recordar que a principios de 2005 la Argentina reestructuró su deuda en default por u$s 100.000 millones, y el presidente Néstor Kirchner junto al entonces ministro de Economía, Roberto Lavagna, logró una adhesión del 76%.