La Escuela de Derecho de la Universidad Torcuato Di Tella, en conjunto con el Foro de Estudios sobre la Administración de Justicia (Fores) y la Fundación Libertad, presentaron los resultados del índice de Confianza en la Justicia 2005.

Los efectos del sondeo llevaron a determinar que la confianza en la justicia alcanzó un crecimiento del 4,5% respecto de los indicadores generados en noviembre pasado, y de un 4,75%, si la comparación se establece con julio de 2004.

En tales condiciones, en todas las regiones geográficas –fueron testeadas la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Gran Buenos Aires, Gran Córdoba, Rosario, Gran Mendoza y Gran Tucumán- se percibe un aumento de la confianza en la Justicia, aunque el í­ndice más notorio se disparó en el interior con un 12% de evolución. Respecto del Gran Buenos Aires y la Ciudad de Buenos Aires, el incremento fue de 2% y 3%, respectivamente.

Según explican los responsables del ICJ, "las encuestas de opinión se han convertido en una suerte de radiografí­a del apoyo ciudadano a la gestión de las instituciones públicas". Así­ es que, el ICJ se presenta como una herramienta que contribuye a que el propio Poder Judicial monitoree el impacto que su gestión y sus polí­ticas tienen en la opinión pública.

Lo cierto es que los resultados de estos sondeos, difundidos a través de informes cuatrimestrales, permiten observar la distancia existente entre la Justicia y la posición de cada individuo como posible usuario de los servicios judiciales, interpretada en función de la posible conducta de los ciudadanos ante conflictos puntuales.

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Motivos del incremento

El director general de Fores, Héctor Chayer, considera que "desde mediados del año pasado hemos comenzado a salir de la crisis de seguridad que se viví­a en la provincia de Buenos Aires. Esto fue un considerable paso adelante en la confianza ciudadana". Otro factor de suma importancia en lo que hace a la imagen de la justicia ante los ojos de los argentinos, opina Chayer, se relaciona con el hecho de haber completado las bancas de la Corte Suprema; tema que tení­a muy pendiente a una considerable porción de la sociedad.

Para ir más allá en la inspección de la opinión pública, el sondeo marca que los hombres, con un valor de 43,3%, confí­an menos en la Justicia que las mujeres, con un 52,5%. Así­, el sexo femenino aumentó en el último año un 7% su í­ndice de confianza. Por último, se puede ver en mediciones en función al nivel de escolaridad, que cuanto mayor es la instrucción de las personas, mayor es su confianza en la Justicia.Un análisis detalladoEl ICJ arroja dos subí­ndices de análisis (con una amplitud que varí­a del cero como menor valor, al 100 como el punto máximo). El conductual  –que permite conocer el comportamiento que los encuestados manifiestan respecto de conflictos jurí­dicos-  marca que en caso de tener un problema de í­ndole patrimonial, un 72% recurrirí­a a la Justicia; en materia familiar, un 64% y en lo que respecta a conflictos laborales, un 75% acudirí­a a las instancias judiciales.

Mientras que, en lo que refiere al subí­ndice perceptual  –donde se sondea la opinión que se tiene en términos de imparcialidad, eficiencia y honestidad-  los puntajes son menos alentadores: cerca del 60% considera que la imparcialidad de la Justicia resulta poco confiable, y el 76% ve con falta de confianza a la eficiencia. Por otra parte, el 15% considera que el sistema argentino es confiable en cuanto a honestidad.

Sin embargo, sobre 800 personas encuestadas, los valores reflejan un incremento respecto de los sondeos realizados durante el año pasado: el subí­ndice conductual ascendió de un valor de 64,3% registrado en noviembre de 2004, a un 67,7% en marzo del 2005. En cuanto al í­ndice perceptual, también se reflejó un ascenso que va de un 28,6% a un 29,3%.

Sabrina Santopinto - [email protected]