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Telefónica ajusta a la baja sus ingresos y beneficios en Argentina por la alta inflación

Debido a la inflación en el país, la telco española ya prevé un impacto negativo de 625 millones de euros para las ventas netas
09/10/2018 - 16:52hs
Telefónica ajusta a la baja sus ingresos y beneficios en Argentina por la alta inflación

La crisis argentina complicando las cuentas de la multinacional Telefónica, que se ha visto obligada a ajustar a la baja los resultados del primer semestre como consecuencia de la inflación que vive el país, que ha registrado un crecimiento acumulado de los precios del 100% en los últimos tres años, según recoge la compañía en su Folleto Continuado.

En el documento publicado por la compañía en la CNMV de España refleja que este factor ha llevado a un incremento del patrimonio neto de alrededor de 1.300 millones de euros, mientras que ha restado 625 millones de euros a las ventas netas, 215 millones de euros al resultado bruto de explotación (oibda) y 265 millones de euros al resultado operativo. Además, el gasto de explotación (capex) se redujo en unos 115 millones de euros.

El grupo de telecomunicaciones ibérico señala que se espera que las medidas anunciadas por el Gobierno de Macri tras el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) tengan "impacto positivo en el medio plazo", pero en el corto los riesgos macroeconómicos y cambiarios se mantienen "elevados".

Respecto a Brasil, otro de los grandes mercados de Telefónica en América Latina, la operadora afirma que la situación política sigue siendo "inestable", pero el Gobierno ha conseguido aprobar reformas "relevantes". Sin embargo, añade que quedan piezas legislativas "clave" como la Seguridad Social, que es "imprescindible" para asegurar la sostenibilidad fiscal del país y dependerá en gran medida del resultado de las elecciones de noviembre, señala Expansión.

Respecto al resto de América Latina, Telefónica destaca el riesgo cambiario derivado tanto de factores externos (la normalización de la política monetaria en Estados Unidos, los precios de las materias primas y las dudas sobre China) como internos (los elevados déficits fiscales y de cuenta corriente en algunos países, un crecimiento bajo de productividad y el reequilibrio de ajustes existentes).

Otros riesgos a los que se enfrenta la operadora

Al margen de la situación en América Latina, entre los otros riesgos a los que se enfrenta la compañía figuran una posible intensificación de las tensiones políticas en Cataluña o la incertidumbre en torno a la salida de Reino Unido de la Unión Europea.

El documento recoge que la situación política en Cataluña y su impacto en la economía española es "un posible foco de incertidumbre" para el negocio de Telefónica debido a su exposición al país, que en el primer semestre supuso el 25,7% de sus ingresos.

Así, remarca que, aunque acontecimientos recientes están contribuyendo a reducir la inestabilidad, si las tensiones políticas resurgieran o se intensifican "ello podría tener un impacto negativo tanto en las condiciones financieras como en el escenario español macroeconómico actual".

Respecto al Brexit, señala que supondrá un "ajuste económico" independientemente de cual sea la nueva relación económica-comercial entre Reino Unido y el resto de Europa en el futuro, pero añade que en el caso de las operaciones de su filial O2 y el resto del grupo no va a ser "significativo", porque hay "escasa relación comercial entre ambas".

Sin embargo, advierte de que la incertidumbre durante las negociaciones puede afectar a la inversión, la actividad económica, el empleo y la volatilidad en los mercados financieros, "lo cual podría limitar o condicionar el acceso a los mercados de capitales", indica Expansión.

Sobre el conjunto de Europa, destaca una mejora de las perspectivas en la primera mitad de 2018, aunque reconoce que las "crecientes tensiones comerciales" pueden ser un riesgo para el crecimiento y la estabilidad global. Además, agrega que la incertidumbre ha disminuido tras los resultados electorales de varios países, excepto en Italia debido a la "falta de compromiso político con la agenda reformista".