Mientras se mantienen las dudas sobre el futuro de dos predios que Cencosud opera en la provincia de Buenos Aires y en la Capital Federal, el grupo chileno acaba de perder un importante terreno en Mendoza.

Se trata de un inmueble ubicado en la localidad de Godoy Cruz, que fue declarado de utilidad pública y sujeto a expropiación por las autoridades provinciales en el marco de un litigio contra el holding trasandino que ya lleva más de dos décadas.

Ubicado en la avenida San Martín N° 1515 de esa localidad de la capital mendocina que ahora será reconvertido para instalar un polo cultural y un museo del vino que incluirá actividades culturales, educativas, artísticas, turísticas e históricas relacionadas de algún modo con la industria vitivinícola argentina.

El predio de 50.000 m2 fue adquirido por Horst Paulmann, dueño de Cencosud, en 1998 a la ex bodega Arizu, una de las más tradicionales de la industria bodeguera mendocina.

El objetivo del empresario era construir un hipermercado y centro comercial, pero sus planes quedaron truncos cuando, en 1999, las instalaciones fueron declaradas como Monumento Nacional por el Congreso de Mendoza y se estableció que el núcleo original de la bodega debía conservarse.

Precisamente, el inmueble ubicado sobre la Avenida San Martín, ya que también fueron expropiados otros dos terrenos que también pertenecieron a la bodega en las calles Manuel Belgrano 1285 y Presidente Alvear 130.

Ya en noviembre del año pasado, las autoridades municipales de Godoy Cruz habían declarado al predio de utilidad pública y un grupo de senadores provinciales presentaron un proyecto de ley para expropiarlos.

Con estos antecedentes, el pasado jueves se terminó de cerrar el cerco sobre los terrenos con la orden de expropiación emitida por el gobernador Alfredo Cornejo en el que también se declara al municipio de Godoy Cruz como "sujeto expropiante", de conformidad con lo dispuesto por el Decreto Ley 1447/75.

La decisión marca un cambio en la opinión del propio Cornejo quien en el 2011, cuando ocupaba el cargo de intendente de Godoy Cruz, había firmado un acuerdo con Cencosud para permitir al grupo chileno la construcción del centro comercial.

En ese momento, había firmado un convenio para que, además del shopping, el predio incluyera un gran predio en el ala central que sería considerado como monumento histórico nacional.

Sin embargo, este convenio no funcionó y ahora, además del polo cultural y el museo del vino, también se destinará parte del predio a la construcción de viviendas, locales comerciales y un centro audiovisual y fílmico, y también se podrán abrir y prolongar calles y desarrollar un espacio verde y recreativo.

Antes de eso, la comuna de Godoy Cruz debe depositar $19 millones como avalúo fiscal para tomar posesión de la ex Bodega Arizu y comenzar las primeras obras de recuperación mejorando la iluminación, reparando veredas y reforzando algunos muros que corren peligro de colapsar en el inmueble de más de un siglo de actividad.

Es que el inmueble lleva más de 20 años sin uso ni mantenimiento, por lo que ha ido acumulando deterioro y algunas paredes exteriores están en riesgo de desplomarse.

En el 2017, las autoridades provinciales intentaron negociar con Cencosud la compra de los terrenos pero no tuvieron éxito por lo cual se avanzó en el operativo de expropiación de la ex bodega.

De hecho, el año pasado el Concejo Deliberante de Godoy Cruz aprobó una ordenanza que declaró de interés municipal la expropiación de los inmuebles, decisión que fue reforzada por el proyecto de ley presentado por los senadores Armando Camerucci, Jorge Teves, Mariana Caroglio y Jorge Palero para declarar de utilidad pública y sujeto a expropiación los tres terrenos.

La propuesta recibió el aval de ambas cámaras y ahora el municipio tendrá que acordar el precio de compra con Cencosud.  En el caso de que esta negociación fracase nuevamente, será la justicia la que fije el monto final para resolver la expropiación.

En cuanto a los planes para los terrenos, el museo del vino será instalado en la Avenida San Martín, en el área de la bodega que ha sido declarada intangible por la Comisión Nacional de Monumentos, Lugares y Bienes Históricos.

En lo que respecta al polo audiovisual y de industrias creativas, el objetivo es levantarlo en otro de los dos terrenos restantes con un crédito del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), mientras que en el tercero se levantarán las viviendas.

El área original de la ex bodega Arizu fue construida en 1890, en el terreno comprendido por la avenida San Martín y las calles Lisandro de la Torre, Belgrano y Minuzzi.

Durante muchos años, la empresa fue considerada como el principal establecimiento vitivinícola de la zona. De hecho, hasta contaba con su propio desvío del ferrocarril para llevar las uvas y sacar el vino que se distribuía desde Buenos Aires a todo el país.

Luego, en la década del 70 fue vendida al Grupo Greco que fue intervenido por el último gobierno militar por medio de las leyes 22.229 y 22.334, en el marco de un escandaloso proceso que llevó a la bodega a la decadencia.

En 1998, Cencosud compró las instalaciones para demolerlas y construir un supermercado. Pero los vecinos de la zona se opusieron en virtud del gran impacto ambiental que traería este desarrollo.

En forma paralela se fueron dando las intervenciones oficiales para declarar al predio Monumento Histórico Nacional, dándose inicio a un largo conflicto con el grupo chileno a lo largo de más de una década que ahora parece tener punto final con la decisión de expropiar el terreno.