La disparada de costos a partir de la suba del dólar, sumado a un faltante de insumos por complicaciones para importar y trabas en la logística a partir del escenario de pandemia, aceleró el faltante de electrodomésticos y la perspectiva es de mayor complicación de cara a fin de año. Desde el segmento industrial sendas fuentes consultadas por iProfesional señalaron que el desabastecimiento comprende desde heladeras y lavarropas a televisores, celulares y notebooks.

Las fábricas del rubro, se indicó, operan a menos de la mitad de sus respectivas capacidades a partir de la intensificación de los contagios. Y la escasez de partes y accesorios ya permite anticipar dificultades incluso para la reparación de la tecnología instalada en el hogar, como puede ser en el caso de los equipos de aire acondicionado.

En caso de intentar reponer un dispositivo de línea blanca, industriales y comerciantes son contundentes respecto de la demora: según la marca y la zona donde se concreta la compra del aparato, el tiempo de entrega puede superar cómodamente el mes.

Respecto del incremento en los costos, organizaciones como el grupo Industriales Pymes Argentinos (IPA) expusieron mediante informes recientes que el costo de los materiales trepó hasta un 50 por ciento en lo que va de la pandemia.

Plásticos y acero encabezan la nómina de los compuestos que más elevaron su precio a partir del tipo de cambio, la caída de la producción local de parte de estos insumos y también el menor stock disponible en el mundo.

El peso de estas complicaciones también derivó en un incremento sostenido en los precios finales de los electrodomésticos. Televisores smart, heladeras con freezer, cocinas y caloventores acumulan aumentos que van del 20 al 100 por ciento de acuerdo a la marca.

Por citar algunos ejemplos, una pantalla de 50 pulgadas que hasta hace un año cotizaba a razón de los 45.000 pesos hoy es difícil ubicarla a menos de 55.000. Heladeras que se comercializaban a 27.000 ahora merodean los 43.000 pesos, mientras que cocinas multigas de alrededor de 56 centímetros saltaron de 27.000 a los casi 54.000 pesos.

Televisores, notebooks, heladeras y lavarropas encabezan la nómina de los productos que escasean.

"Eso siempre y cuando contemos con el producto. En el caso de las notebooks, por ejemplo, la oferta se achicó fuertemente. El teletrabajo, las clases a distancia, el recambio generalizado por el uso remoto y desde el hogar, aceleró una demanda imposible de cubrir en tanto las fábricas empezaron a trabajar mucho menos. No hay que olvidarse, también, desde las dificultades para mover la mercadería", dijo a iProfesional el ejecutivo de un comercializador de electrodomésticos.

Logística y desabastecimiento

Respecto de esto último, Fabián Castillo, presidente de FECOBA, la federación que integra a la industria y el comercio en esta parte de la Argentina, expuso a la dificultad en la logística como otro aspecto que hoy opera a favor del desabastecimiento predominante.

"La producción en su mayor medida se mueve por tierra. Y hoy rigen numerosas restricciones para pasar de una provincia a otra. Pensemos que gran parte de la electrónica proviene de Tierra del Fuego y atravesar medio país para proveer a Buenos Aires obliga a cumplir con pautas que profundizan la demora en las entregas", comentó a iProfesional.

"De ahí que el desabastecimiento sea tan notorio en televisores o notebooks. Ya en línea blanca, las trabas vigentes en la circulación afectan el movimiento de partes y componentes. Eso también complica fuerte la fabricación y posterior distribución en el país", añadió.

Comerciantes e industriales anticipan que habrá complicaciones en la oferta de equipos de aire acondicionado. 

A tono con esto, Castillo anticipó dificultades para garantizar la provisión de equipos de aire acondicionado en tiempos de calor intenso.

"Habrá faltantes incluso de repuestos para la reparación. Son siete meses que acumula la industria en general de parálisis o funcionamiento muy reducido. Al mismo tiempo, la ausencia de ventas por el escenario económico también desincentivó el funcionamiento de las fábricas. Ahora hay que recuperar todo ese tiempo y esa producción y no puede ser de un día para otro. La situación en lo que hace a los equipos de aire acondicionado será muy difícil", expresó.