Diego Belbussi, Martín Moresco y Sebastian Sanchez son argentinos y amigos con una extensa carrera en el mundo corporativo de consumo masivo. A su vez, los une una fuerte afición y amor por el deporte, sobre todo por el triatlón. Ahí entra en la historia Ronnie Schildknecht, otro de los fundadores, triatleta profesional durante más de 17 años y a cargo de la gestión de algunos de los mejores triatletas del mundo.

REJOY surgió a fines de 2018 a partir de la experiencia de uno de los fundadores. Sebastián estaba entrenando para un Iron Man y sufrió un accidente grave en bicicleta en el que se fracturó tres vértebras y estuvo muy cerca de quedar parapléjico. Como parte del tratamiento le dieron un cóctel de opioides muy potentes que, si bien le calmaba el dolor, al mismo tiempo implicaba efectos secundarios nocivos.

REJOY está proyectado como una gran oportunidad de negocios en los EE.UU.

"Nos pusimos a investigar posibles opciones para ayudarlo en su recuperación y llegamos al cannabis, que en Estados Unidos ya empezaba a surgir como un ingrediente que usaban los deportistas para calmar los dolores", cuentan a iProfesional.

"Sebastian comenzó a tomar CBD, y el efecto que tuvo en su recuperación fue muy rápido y positivo. A fines de 2018 Estados Unidos legalizó la comercialización del cannabidiol y vimos que los deportistas de todas las disciplinas tomaban CBD", narran. "Ahí entendimos que teníamos una oportunidad entre las manos y empezamos a pensar en desarrollar algo que no existía: una bebida deportiva con CBD. Tres de los cuatro socios venimos del mundo de consumo masivo, en el mercado de bebidas, por lo cual tenemos más de 50 años combinados de experiencia en distintos países del mundo desarrollando bebidas. Y ahí empezó la carrera por el desarrollo de REJOY".

En el comienzo del proyecto, los socios se encontraban en tres países distintos, con distintos horarios y fue un gran ejercicio de coordinación y logística poder desarrollar la marca y probar las muestras con las distintas interacciones en el desarrollo del producto. Según relatan, "fue una carrera de obstáculos. Apasionante, con mucha resiliencia porque cada día nos topábamos con diferentes escollos que fuimos sorteando a pesar de las dificultades".

A eso hay que sumarle que se trata de una industria que, si bien avanzó mucho, aún tiene grises legales. "Era muy importante que investigáramos y que nos rodeáramos de gente con mucha experiencia en el tema", sostienen al respecto. "Esto también significaba una aventura, porque era adentrarse en un mundo nuevo, desconocido. Para nosotros fue clave habernos cruzado en el camino a personas con muy buenos conocimientos técnicos sobre el cannabis y su manipulación. Eso nos permitió desarrollar nuestro producto".

El hecho de tratarse de un mercado muy nuevo, y tener muchas trabas desde el punto de vista regulatorio, hace que por tratarse de una empresa pequeña puedan ir acelerando el proceso y ganando aprendizaje, mientras que las grandes multinacionales son más reticentes a desembarcar de forma contundente. "Este obstáculo, termina siendo casi una ventaja competitiva. Pero no estamos exentos de los obstáculos de todos los emprendedores en todas partes del mundo: la financiación, la búsqueda de inversores, la generación de demanda sostenida", sostienen.

Las bondades del producto

REJOY es una bebida para obtener una recuperación limpia y diaria para deportistas, infusionada con 20 mg de CBD. El producto no sólo se centra en la recuperación muscular, sino en la recuperación total de la mente y el cuerpo. Utiliza una tecnología patentada para permitir una absorción óptima y una mayor biodisponibilidad de los ingredientes, brindando el máximo beneficio.

Su extracto de cáñamo de espectro completo está hecho con cáñamo orgánico, sin OGM ni pesticidas, que se cultiva al aire libre bajo la luz solar natural. Disponible en tres sabores: sandía y agua de coco; lima, agua de coco y ginseng; y agua de coco, jugo de mandarina y yerba mate. Gracias a la base de agua de coco, es baja en calorías, baja en carbohidratos y alta en electrolitos para una mejor hidratación.

La bebida para deportistas se centra en la recuperación muscular, de la mente y el cuerpo en su totalidad

La marca fue recientemente elegida en Estados Unidos por 7-Eleven, la cadena de retail de conveniencia más grande del mundo, como una de las dos únicas bebidas con CBD para su show de Marcas Emergentes 2020.

El mercado en el que se desarrolla REJOY está proyectado como una gran oportunidad y con gran potencial para crear una nueva categoría de productos a base de cannabis de acción rápida en un mercado en crecimiento. Según un informe sobre el mercado de bebidas cannábicas realizado por Trusted Business Insights, se trata de una industria que movió u$s901,8 millones en 2018 y se espera que logre una expansión a una tasa anual del 17,8% entre 2021 y 2026.

Ser rentable y a la vez generar impacto

"La rentabilidad sin impacto no se sostiene a largo plazo, como tampoco el impacto sin rentabilidad", destacan los emprendedores. "En nuestra trayectoria por distintas empresas tuvimos experiencia en trabajar con el doble proyecto: social y económico, y nosotros también tenemos esa filosofía. Desde el punto de vista ecológico, con el reciente cambio de botellas PET a latas de aluminio que son mucho más fáciles de reciclar, y este mismo concepto lo aplicamos a lo financiero".

Actualmente la empresa se encuentra en una ronda de financiación colectiva a través de WeFunder.com/rejoy, una plataforma especializada en crowdfunding en la que se puede invertir desde u$d 100.  "Esto nos permite no sólo financiarnos sino sobre todo crear una gran comunidad de personas que empujen para adelante por el éxito de REJOY. Esto es fundamental para nosotros como compañía: no estamos sólo buscando un producto exitoso", aseguran. "Estamos en la construcción de una comunidad que se retroalimenta y que esté interesada en el deporte, la vida sana, los productos en base a plantas y poder generar impacto a través de ellos".

Para estos tres amigos emprender sólo implica aspectos positivos, incluso en las dificultades. "Después de 20 años de trabajar en multinacionales y viajar todas las semanas a distintas partes del mundo, con toda la experiencia que ello conlleva (viajar en business, buenos hoteles, excelentes restaurantes) nuestra vida cambió drásticamente, pero para bien: tuvimos que salir de nuestra zona de confort y hoy nos sentimos dueños y arquitectos de nuestro presente", manifiestan. "Y también está la adrenalina que te genera, es tu proyecto, tu idea, eso nos genera una pasión y unas ganas que no las cambiamos por nada. Emprender es vivir constantemente fuera del área de confort".