Tras el "faltazo" de Alberto Fernández y de sus ministros al acto del Día de la Industria en la sede de la Unión Industrial Argentina (UIA) que se llevó a cabo el pasado 2 de septiembre, la conducción de la mayor central fabril de la Argentina busca tender puentes con el Gobierno.

Lejos de las críticas, reclamos y cuestionamientos con los que asumió la actual conducción hace tres meses, ahora intentan bajar el tono a la tensión con las autoridades nacionales.

El objetivo es evitar una profundización de las medidas intervencionistas establecidas hasta ahora y que podrían sumar nuevos capítulos si el sector más kirchnerista del Frente de Todos impone su mirada a partir de los cambios de caras en el gabinete del Gobierno que fueron impulsados por la dura derrota electoral de las PASO.

Con Daniel Funes de Rioja a la cabeza, los principales referentes del consejo directivo de la UIA resaltan la necesidad de no tener una grieta en la política industrial dejando de lado el debate ideológico o partidista y resaltando la necesidad de plantear soluciones en materia de infraestructura, inversión, generación de empleo y competitividad, entre otros.

Con esta premisa se suceden las reuniones entre industriales y funcionarios a quienes le acercan iniciativas para el desarrollo industrial que bautizaron como el "plan de las tres C": certidumbre; confianza y concertación.

El primer acercamiento ocurrió pocos días después de la paliza electoral que recibió el oficialismo el domingo 12 de septiembre pasado. Fue durante una convocatoria del presidente Alberto Fernández para lanzar la ley de incentivo a las inversiones hidrocarburíferas.

Daniel Funes de Rioja, titular de la UIA

Funes de Rioja estuvo entre los invitados y no perdió la ocasión para dialogar brevemente con el Jefe de Estado durante el cual logró acordar una agenda de encuentros con el Gobierno como los llevados a cabo el martes pasado con el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, y el secretario de Industria, Economía del Conocimiento y Gestión Comercial Externa, Ariel Schale.

Ese día escucharon la propuesta de Kulfas para establecer una agenda constructiva para seguir fortaleciendo el desarrollo industrial y para trabajar en el sendero de crecimiento pos pandemia, que genere nuevas oportunidades para el desarrollo de diferentes sectores industriales.

El debate incluyó además un repaso por algunos de los temas que forman parte del bautizado "plan de las tres C" de la UIA como la promoción de inversiones productivas; el fomento a las exportaciones con valor agregado; el impacto del incremento en los costos logísticos a nivel global y las estrategias para fortalecer al Mercosur.

Al cierre del encuentro, las autoridades de UIA, el ministro Kulfas y el secretario Schale coincidieron en la necesidad de que los equipos técnicos de la institución y del Ministerio de Desarrollo Productivo continúen trabajando sobre la agenda de temas que se abordaron durante la reunión.

Incertidumbre electoral

Una agenda que también será el eje de la 27° Conferencia Industrial de la UIA que se desarrollará entre el 1 y 2 de diciembre próximos para analizar estrategias que posibiliten potenciar las cadenas de valor y poner en perspectiva el desafío de exportar y los consensos necesarios para encontrar una salida que involucre a todos los actores económicos del país.

Un conjunto de iniciativas que serán incluidas por Funes de Rioja en una carpeta que le entregará al jefe de Gabinete, Juan Manzur durante el encuentro pactado para el mediodía de este jueves 30 de septiembre en el despacho que el ex gobernador de Tucumán ocupa desde hace pocos días en la Casa Rosada.

Si bien los industriales reconocen que hay cifras que muestran una recuperación y que "lo peor ya pasó", advierten sobre las asignaturas pendientes que atentan contra la recuperación y la marcha de mediano plazo.

La primera es la inflación y el futuro del dólar, a la cuales le siguen el gran peso del Estado como regulador de la actividad privada; la falta de seguridad jurídica y previsibilidad y la incertidumbre sobre si las elecciones de medio término alterarán o no la economía y ciertos temas que los industriales consideran fundamentales de despejar como el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

A esto le suman el control del gasto público; el ordenamiento de las cuentas fiscales, el reconocimiento del rol del sector privado y la austeridad fiscal como premisas que, sin embargo, no coinciden con la mirada oficial que usará una mayor emisión para apuntalar su plan de incentivo al consumo con el que pretenden dar vuelta el resultado de las PASO en los comicios de noviembre.

Lejos está hoy Alberto Fernández de compartir la mirada de los industriales para reformular las políticas fiscales .

Lejos está hoy el Gobierno de compartir la mirada de los industriales para reformular las políticas fiscales en un país donde sólo el 30% de la población paga impuestos; donde la cantidad de tributos que se acumulan son enormes y con una legislación fiscal desordenada, burocrática y de gravámenes desorbitantes como los que se aplican, por ejemplo, a los alimentos con un 38%; las bebidas con un 47%; las naftas con otro 80%.

En este tema, la UIA viene trabajando en una propuesta de nueva moratoria que incluya a las empresas afectadas por la pandemia del Covid-19 y que por deudas no pudieron ingresar en la anterior dispensa tributaria.

Los industriales siguen muy de cerca un proyecto de ley recientemente presentado en el Parlamento para aportar sugerencias que se incluyan las deudas hasta este año, que se aumente la cantidad de cuotas y que no se exija repatriación.

Este tema también se analizará durante el encuentro con Manzur así como la evolución de la actividad industrial y las perspectivas que tiene el país para desplegar el potencial de las inversiones productivas, las exportaciones con valor agregado y la generación de empleo formal.

El Mercosur también forma parte de ese plan de las tres C por el impacto que los problemas que hoy sufre el bloque regional tienen en la agenda global de integración.

La UIA pondera la relevancia de tener un Mercosur productivo en función de los desafíos que se presentarán en materia de comercio internacional y producción, y reclaman que se fortalezca la cooperación regional.