Suba de retenciones complica la venta de Esso y Repsol
La decisión del Gobierno de subir las retenciones a las exportaciones de petróleo crudo y de naftas, sin dudas, fue recibida con agrado por el empresario santacruceño Enrique Eskenazi y los inversores interesados en comprar los activos locales de Esso.
No porque esta medida les permita cargar combustible a precio subsidiado y mucho más barato que en países limítrofes, sino mas bien porque le agrega un condimento favorable a sus aspiraciones de comprar el 25% de Repsol YPF, por un lado, y las estaciones de servicio y la refinería de la petrolera norteamericana, por el otro, en términos diferentes que los negociados hasta el momento.
Así, la medida, dispuesta ayer por las autoridades para aumentar los ingresos fiscales del Estado y contener el precio interno de los combustibles, tendrá también impacto en la valuación final de ambas operaciones.
En el caso de Repsol YPF, venía negociando la venta de un 25% de su capital a Eskenazi por u$s3.500 millones. Ahora, con una parte de su negocio modificada de manera negativa, los dólares podrían ser menos.
Por el lado de Esso, el nuevo esquema de retenciones la obligará a cambiar el núcleo fuerte de su actividad. Y con esto, los u$s200 millones que pide por dejar sus actividades a otro grupo ya no serán tantos.
"Un negocio debilitado supone un activo devaluado", explicaron especialistas. En el caso de Repsol YPF, si bien no exporta crudo, vendió este año al exterior combustible refinado localmente por u$s1.041 millones.
Con la nueva fórmula, el precio local de referencia y el de exportación se equiparan, con lo cual ya no tendrá sentido para la empresa continuar vendiendo sus naftas en otros mercados que no sea el argentino. Esto impactará en una reducción de sus ingresos.
Exportación
Asimismo, Esso también venía exportando naftas por u$s348 millones (FOB), que refina a valores de cabotaje, pero que coloca en el exterior a los mismos costos de referencia que se pagan en el resto del mundo.
La reducción de los saldos exportables como consecuencia directa del aumento de las retenciones le aportará un dato negativo a las negociaciones que el JP Morgan viene encarando con los posibles compradores de las 590 estaciones de servicio y de su refinería de Campana.
"El recupero de las inversiones se hace cada vez más lento con estas medidas y esto hace que las empresas que toman decisiones afuera de la Argentina lo piensen cada vez más", advirtieron en una petrolera.
De acuerdo a El Cronista Comercial, en otra firma recordaron que el Congreso votó la extensión hasta 2011 del esquema de retenciones a las exportaciones petroleras que regía hasta ayer. Pero advirtieron que la nueva resolución termina con la tabla móvil impuesta por Roberto Lavagna en 2004.
"Si el escenario se plantea así, también Shell deberá revisar su intención de permanecer en el país cuando refina petróleo a precios mucho más baratos que lo que vende combustibles en el exterior", agregaron en otra compañía.
En lo que va del año, Shell exportó naftas por u$s282 millones y, al igual que otras petroleras, cerró estaciones de servicio para tener una mayor capacidad exportable.