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Llegan dólares de China: gracias al swap, el Central pudo aumentar las reservas en u$s814 millones

Llegan dólares de China: gracias al swap, el Central pudo aumentar las reservas en u$s814 millones
31/10/2014 - 09:00hs
Llegan dólares de China: gracias al swap, el Central pudo aumentar las reservas en u$s814 millones

El Gobierno concretó uno de los objetivos que se había fijado para llevar calma a la plaza financiera: activó el primer tramo del swap -un canje, en la jerga financiera- de monedas para reforzar la posición del Banco Central argentino.

El acuerdo marco firmado entre ambos gobiernos en ocasión de la visita del presidente Xi Jinping establecía la posibilidad de que la Argentina pudiera disponer de un monto en yuanes, equivalente a u$s11.000 millones.

A partir de hoy, se activará el primer tramo, que implica que el Banco Central tiene disponible para su uso el equivalente a u$s814 millones.

Esto no necesariamente implica que ese dinero pueda ser utilizado de inmediato ni que los billetes de dólares estén guardados en las arcas del Central, pero sí se podrá contabilizar este dinero en las reservas.

En un contexto en el cual se teme que, por la escasez estacional de divisas y por la falta de acceso al mercado financiero, las reservas están sufriendo un deterioro cotidiano, este acuerdo implica una bocanada de oxígeno para el Gobierno.

De esta forma, de un plumazo se logrará volver a un nivel por encima de los u$s28.000, que era el límite mínimo que el ex titular del Central, Juan Carlos Fábrega, se había propuesto no perforar.

¿Los yuanes también son reservas?

Ahora empezará la polémica respecto de cuán lícito es que el dinero de este swap sea contabilizado como reservas. El cuestionamiento principal es si puede considerarse que estos fondos son convertibles en dólares y, en consecuencia, estar a disponibilidad ante una emergencia financiera.

El punto de vista del Central es que esto sí es factible.

"El yuan representa una moneda de inversión muy atractiva para los bancos centrales, dado que su valor en relación a las demás monedas viene mejorando sostenidamente en los últimos años, manteniendo a su vez variaciones muy acotadas en sus cotizaciones, lo que genera beneficios de diversificación muy importantes. El yuan, además, puede ser convertido libremente en dólares, euros, o en cualquier otra moneda de reserva, en plazas internacionales como Hong Kong, Londres o Singapur", afirma el comunicado de la autoridad monetaria.

No obstante, en el gremio de los economistas argentinos no hay tanta seguridad al respecto.

"Es una fantasía", afirma, sin eufemismos, el economista Carlos Melconian, cercano al partido de Mauricio Macri.

"El yuan no tiene inserción internacional", argumenta, por su parte, el ex jefe del Banco Central, Aldo Pignaneli.

"La convertibilidad del yuan está limitada. Es decir, sólo algunas plazas financieras, entre las cuales no se cuenta la local, permiten convertir cantidades significativas de yuanes a dólares", sostiene Gabriel Caamaño Gómez, economista jefe de la consultora Ledesma.

Pero, además, hay otro punto significativo. Suponiendo que estos yuanes sí puedan ser cambiados, hay que considerar cuál será el tipo de

cambio

.

Ocurre que en China hay una tasa oficial que marca que un dólar equivale a 6,36 yuanes. Por eso, el monto oficial de 70.000 millones de yuanes es equiparado a u$s11.000 millones.

Pero cuando la Argentina quiera convertir sus yuanes por la moneda estadounidense deberá recurrir al mercado financiero. Y allí, no necesariamente la cotización del yuan será la misma.

Un préstamo a pesar del default oficial

Más allá de la polémica, hay un punto en el cual el Gobierno se anotó una victoria: varios economistas habían pronosticado que China no autorizaría que el swap se efectivizara, dado que el país era oficialmente considerado en default para la agencia de riesgo crediticio más importante de ese país.

Ya desde antes de la crisis con los "buitres", la agencia Gadong -la de mayor cercanía al gobierno chino-, calificaba a la Argentina con el rating más bajo de América latina.

Luego del default, Gadong también se sumó al grupo de agencias que consideraba al país en situación de incumplimiento de sus obligaciones financieras y, por lo tanto, no aceptable como sujeto de crédito.

Esto había llevado a los economistas argentinos a considerar que difícilmente el acuerdo marco para el swap se pudiera llevar a la práctica.

Hubo, al respecto, gestiones de altos funcionarios argentinos, como el ministro Axel Kicillof y el entonces titular del Central, Juan Carlos Fábrega, ante sus colegas orientales.

Y, por lo visto, fueron lo suficientemente persuasivos para lograr su cometido: a partir de hoy, gracias a China el Gobierno podrá ostentar una situación más desahogada en un plano cambiario donde viene sufriendo embates.

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