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Luego de Prat Gay, los banqueros dicen que el blanqueo será un éxito

Adeba se defendió y especificó que deben pedir información para saber si el dinero que se quiere blanquear es capital no declarado o es sospechoso
03/10/2016 - 17:11hs
Luego de Prat Gay, los banqueros dicen que el blanqueo será un éxito

Pocas horas después de que el ministro de Hacienda y Finanzas Alfonso Prat Gay culpara a los bancos de atentar contra el blanqueo, el presidente del Banco Nación, Carlos Melconián, buscó bajarle un tono a las críticas y se mostró optimista sobre el régimen de sincera miento fiscal.

"Vamos bien", aseguró Melconian en la apertura del evento del 10° aniversario de la revista Bank Magazine, que se organizó en el edificio de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires en el centro porteño bajo el nombre de "Los desafíos en la próxima década.

"Hay muchas cuentas abiertas por el blanqueo. Lo que más se ve es exteriorización desde afuera, donde lo único que se paga es la penalidad. Se está armando", dijo, refiriéndose específicamente a lo que está sucediendo en el Nación.

Melconián no fue el único banquero en el evento que buscó dar señales positivas sobre el blanqueo. Gabriel Martino, presidente del HSBC Argentina, consideró que el monto más importante se empezará a ver a partir del 31 de octubre en adelante, cuando comience el blanqueo de activos.

"El blanqueo va a generar capital que entre en la Argentina, y se va a quedar. Como todo argentino, se va a jugar todo en el último momento. Se empezará a ver más movimiento a partir de diciembre", dijo en el panel "La Argentina de regreso al mundo".

Julio Figueroa, presidente del Citi Argentina, también habló de señales positivas sobre el sinceramiento lanzado por él gobierno de Macri. "Somos muy optimistas por el blanqueo, las empresas se van a beneficiar. Esperaría que (la adhesión) siga creciendo", coincidió con Martino, en un encuentro del que también participó Marcelo Mindlin (Pampa Energía) y Eduardo Tapia (Raymond James).

En un comunicado oficial, la Asociación de Bancos Argentinos (Adeba) se defendió al especificar que deben pedir información para saber si el dinero que se quiere blanquear es sólo capital no declarado o puede estar ligado a una actividad sospechosa.

Por lo bajo, la principal crítica de las entidades es que no hubo un manual específico de toma de decisiones a la hora de operaciones sospechosas, o cuando no se puede justificar el origen de los fondos. Es por eso que tuvieron múltiples reuniones con la AFIP y la Unidad de Información Financiera (UIF) para descartar dudas.

El mercado asistió a un "deja vu" de las peleas entre Cristina Kirchner y los bancos, aquellas que ocurrían cada vez que ante un movimiento del tipo de cambio la ex mandataria acusaba de conspiración y sabotaje a las a las entidades financieras. Parecía que eso no iba a repetirse en un gobierno que se jacta de ser "market friendly", pero cuando el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay, abandonó las insinuaciones y acusó explícitamente a los bancos de trabajar para el fracaso del blanqueo de capitales, todos en la City entendieron que el clima había cambiado abruptamente. 

Tras el cierre de la suscripción del bono de menor plazo del blanqueo de capitales con una muy baja performance, el Gobierno salió a ajustar el engranaje y cruzó con dureza a los bancos, a quienes acusó de atentar contra el éxito de la gran empresa en la que se embarcó la gestión de Cambiemos.

El título era una de las alternativas que podían elegir quienes buscaban evitar el pago del impuesto del 10% que rige para declarar una cuenta bancaria o dinero en efectivo. Si bien en el Palacio de Hacienda esperaban este resultado -la apuesta del equipo económico esta puesta en el ingreso de dinero en efectivo mediante el desembolso del tributo o a través del bono de largo plazo-buscan ajustar todos los mecanismos para garantizar que los próximos cierres sí sean exitosos

Si bien los expertos financieros habían señalado al bono que cerró, orientado a quienes deseaban evitar el pago del impuesto especial del 5%, 10% o 15% del monto a blanquear, como la peor opción, lo cierto es que el Gobierno esperaba mejores resultados

La semana pasada ya había trascendido el clima de malestar del Gobierno con los bancos. En el marco de una entrevista, el secretario de Finanzas, Luis Caputo, había deslizado que recibieron "quejas" de los clientes por supuestas trabas. "Es raro porque los bancos dicen que hacen todo, pero la gente dice que va a los bancos y por poco no los expulsan. Así que no sé... pero quejas hay", manifestó con cierta ironía el funcionario.

Tras el primer cierre, el Gobierno salió a reforzar el "pedido de cooperación". No hubo, esta vez, mensajes encubiertos o solapados. Las definiciones fueron claras y el emisor fue Prat Gay.

Ocurre que el costo político del fracaso del blanqueo sería altísimo: el régimen, que se extenderá hasta el 31 de marzo, va de la mano del proyecto para pagarles la "reparación histórica" por los juicios que los jubilados ganaron contra el Estado.

En el marco de una entrevista coyuntural por los primeros resultados, el máximo responsable del equipo económico acusó a las entidades bancarias de no cooperar, de dificultar el proceso, de aumentar el papelerío y los requerimientos e incluso de atentar contra sus propios intereses como entidades financieras. 

Los bancos advierten que los requisitos que les piden a sus clientes y que enlentecen el procedimientos son los mínimos necesarios para garantizar que no se blanquee dinero del narcotráfico o del terrorismo

En todo caso, si algo quedó claro después del intercambio es que en el equipo económico del Gobierno hay nerviosismo. Ya no se respira la euforia que reinaba hace algunas semanas, cuando se filtraban estimaciones extraoficiales en el sentido de que el volumen de dinero a blanquear podría llegar a u$s60.000 millones. Ahora, está en duda si el dinero que se pueda recaudar será suficiente para pagar la reparación histórica para los jubilados y otras urgencias financieras. 

La embestida oficialEn una catarata de definiciones cargadas de calificativos algo exótica en el estilo medido y "buena onda" con el que el Gobierno lleva adelante la agenda pública, Prat Gay aceptó que "no hay cooperación de parte de los bancos" para llevar adelante el régimen de exteriorización de capitales lanzado por el gobierno nacional.

El enojo del funcionario pareció mayor al señalar una contradicción: "quien más dificulta este proceso de sinceramiento son los mismos bancos que debieran beneficiarse".

También indicó que "los bancos piden papeles que nadie les pide a los bancos", en referencia a ciertos requerimientos que se les hizo a los clientes en los últimos días y consideró que "tienen aparentemente el temor de que algún día alguien vaya a investigar más allá".

Al respecto, el ministro reiteró la línea que baja desde hace meses el Gobierno: que el blanqueo será un "punto final" para la investigación de los delitos fiscales. "Lo que hay que hacer es leer la ley y lo que dice es que mientras no haya un delito diferente del de evasión, la deuda con el fisco está totalmente saldada, hay secreto fiscal y bancario".

Astuto, Prat Gay acusó a los bancos de atentar contra sus propios intereses: "A los bancos les conviene que ingresen al sistema, porque con ellos después pueden prestar y sacar una renta".

A su criterio, lo que sucede con los bancos y el blanqueo "es un ejemplo de lo que cuesta avanzar en una Argentina tan atravesada en el último tiempo".

Ante la insistencia periodística para saber si la queja era genérica contra el sistema financiero o si había alguna sospecha centrada en un banco particular, desde el Ministerio de Hacienda prefirieron no enrarecer más el ambiente y evitaron precisiones al respecto.

La estrategia, mientras tanto, es intensificar el mensaje a los contribuyentes: "A los que quieran adherir, que insistan más allá de los bancos. Es mucho más barato pagar ahora la multa de 10% que el año que viene, que puede ser de 65%", de total de activos que tengan sin declarar".

Volvió a advertirles que a partir de enero del año que viene, aquellos que no tengan su dinero declarado "no van a tener dónde esconderlo" y reiteró la estrategia del "miedo": "Argentina tiene un acuerdo automático de información con 100 AFIP de todo el mundo, de las cuales 50 comienzan a funcionar en 2017".

Además, subrayó que por afuera de eso, se están haciendo acuerdos con Uruguay, Suiza y los Estados Unidos.

En este sentido, la semana pasada, durante la visita de responsable del Tesoro de los Estados Unidos, Jacob J. Lew, la administración argentina logró que el funcionario norteamericano diera un voto de confianza explícito al blanqueo e incluso dejó en claro que Estados Unidos podría colaborar con información para reforzar el éxito del proceso.  

"El mensaje nuestro es que aprovechen esta oportunidad, porque a partir de enero del año que viene, la AFIP puede encontrar todo lo que esté escondido, y es mucho más caro si te lo encuentran y no aprovechaste el blanqueo", amenazó Prat Gay. 

La defensa y la negociación que abrieron los bancos

No fue suficiente con las cartas que las entidades le enviaron a sus clientes en las últimas semanas ni con los banners que se activaron en las web de los distintos homebankings. En el Gobierno creen que más allá de invitar y hacer conocer la oferta, los bancos tienen que mejorar la parte operativa para que la adhesión sea exitosa.

Los bancos se defienden: "Tenemos que tomar precauciones". Sostienen que la legislación que controla el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo implica el cumplimiento de muchos requisitos que sí, llevan tiempo y papelerío. "¿Qué pasa si en tres años vienen a preguntarnos por el origen de estos fondos? Todo tiene que estar justificado?", argumentó un ejecutivo de una de las entidades, muy familiarizado con el blanqueo, ante la consulta de iProfesional.

Por el momento, están esperando que la UIF derogue o modifique ciertas normas antilavado para evitar recibir sanciones cuando realicen operaciones vinculadas al blanqueo. En esta línea, el Gobierno aclaró esta semana que el Central ya sacó una resolución que aclara que no hay que cerrar una cuenta si le hacen un reporte de operación sospechosa (ROS).

Y son precisos en la defensa. Citan, entre otras reglamentaciones oficiales, el segundo párrafo de la comunicación 6.022 del Banco Central. Allí puede leerse el alto nivel de responsabilidad que tienen las entidades en todo el proceso: "La cuenta se abrirá a nombre y a la orden exclusivamente del declarante y se mantendrá en la moneda (nacional o extranjera) en la que éste efectivice la exteriorización de sus tenencias de efectivo en el país, debiéndose aplicar las obligaciones impuestas por la legislación y reglamentaciones vigentes en materia de prevención del lavado de activos y del financiamiento del terrorismo".

Sorprendidos con el tono del reclamo del ministro, algunos responsables de entidades financieras creen que, en verdad, el funcionario quiso enviarle un mensaje a "algunos bancos" que estarían demorando la difusión del blanqueo entre sus clientes y "corriéndole el cuerpo" al proyecto económico más ambicioso de la gestión Macri. 

Mientras tanto, las entidades insisten en desmarcarse de las acusaciones del Gobierno y remarcan que, a diferencia de lo que ocurría durante los blanqueos del kirchnerismo, se pusieron "el equipo al hombreo": invirtieron en desarrollos web, en optimizar los call centers y en capacitar al personal para que el resultado del blanqueo sea exitoso. 

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