iProfesional

Jornada clave para Sturzenegger: la tasa de interés quedó en 27,24% y logró renovar el 90% de las Lebac
17/01/2018 - 02:05hs

Sturzenegger pasó airoso una nueva prueba del mercado. Si bien los resultados de la licitación mensual de las Lebac no fueron para grandes festejos, ya que no logró renovar 11% de los vencimientos, tampoco ese nivel sin colocar fue considerado como negativo para el mercado, ya que estaba dentro de los resultados esperados.

A su vez, dejó las tasas de interés de estas Letras en un nivel similar al negociado en la jornada previa en la plaza secundaria, es decir, una baja de alrededor de 150 puntos básicos respecto a la licitación primaria de diciembre.

En consecuencia, las tasas de más corto plazo (35 días) quedaron en 27,24% anual, una rentabilidad que no sorprendió a los inversores.

Más allá de la atractiva ganancia ofrecida, este retroceso respecto al mes pasado generó que se adjudiquen $352.804 millones, monto que no logró cubrir el total de vencimientos de Lebac de esta semana, cercano a los $398.500 millones.

En conclusión, el BCRA debió volcar a la calle para cubrir estos compromisos unos $45.633 millones. Ese es el 11% que le "faltó" para completar todos los vencimientos.

Igualmente, en la venta en el mercado secundario, la entidad monetaria puede recuperar esta semana esta cifra "alcanzable" aun sin renovar.

En la previa, por este esperado descenso en la rentabilidad de estos instrumentos en pesos, y su consecuente menor atractivo para los ahorristas, el precio del dólar mayorista subió 16 centavos hasta los $18,90.

El presidente del Banco Central no estaba pasando su mejor momento político, y debía "pasar" de la forma más desapercibida la licitación de Lebac de este mes.Semanas agitadas

La atención estaba fijada en lo que ocurriera este martes, tras el revuelo de la City de la semana pasada con la leve baja de las tasas de referencia de la economía que realizó el BCRA.

Con el recorte de apenas 75 puntos básicos hasta el 28%, el organismo monetario dirigido por Federico Sturzenegger dio señales claras, no sólo al mercado, sino también al propio Gobierno, que su estrategia para bajar la rentabilidad en pesos será gradualista.

Es decir, acomodó esta decisión de bajar las tasas de referencia al mismo nivel que ya se estaban negociando las Lebac de corto plazo en el mercado secundario.

Así, dejó un nivel de ganancia muy por encima a lo que se pensaba en el mercado, ya que entre los inversores y bancos se aguardaba una caída en los intereses de entre 200 a 400 puntos básicos.

¿Por qué allí se "quedó corto" Sturzenegger con la baja de tasas? El factor principal lo marca una variable que hoy es clave para el Gobierno: la inflación.

La suba de precios se mantiene en un nivel elevado, sobre todo por el dato de diciembre, donde el incremento fue del 3,1%, según datos oficiales del INDEC. Alza que fue ayudada por los aumentos de los servicios regulados y las naftas.

Con una inflación que terminó para todo el año pasado en 24,8%, casi ocho puntos porcentuales por encima de la meta máxima del Banco Central, desde el oficialismo no hay margen para que este nivel se mantenga este año, sobre todo si su principal objetivo es atacar este problema.

Cabe recordar que desde el 7 de noviembre pasado que se mantenía de forma inamovible la tasa de interés de referencia en el 28,75% anual.

El mismo Banco Central afirmó el martes 9 de enero, en su comunicado oficial, que será "cauteloso en la adecuación de la política monetaria al nuevo sendero de desinflación".

Y justificó que si, naturalmente, "se busca una menor velocidad de desinflación que la planeada originalmente, corresponde un sendero de política monetaria menos contractivo que el que antes se preveía".

Esto se lee como que el BCRA bajará la tasa, ya que no tiene la presión de aplicar una política tan dura, pero que el descenso no será abrupto y también estará centrado en el comportamiento de los precios, para lograr llegar a la nueva meta inflacionaria del 15%.

De hecho, en el mercado secundario de Lebac ya se está convalidando una menor tasa para el más largo plazo, que ronda el 25% para los 270 días.

Al respecto, el economista Federico Furiase, director de Eco-Go, resumió la situación de la entidad monetaria: "La decisión de tasa pone al BCRA entre ‘la espada y la pared': difícil justificar una baja de la tasa con expectativas de inflación subiendo por arriba de la meta, con el dólar recalentado y la suba de tarifas en la previa de paritarias, pero la presión está".

Por su parte, según la consultora Ecolatina, el estreno del gradualismo del Central -aplicado ahora a la reducción de tasas- "liberará algo de presión al alza a la que estuvo sometida el tipo de cambio las últimas semanas. Pero menos presión no implica ausencia de ella".

En resumen, considera que la trayectoria alcista para el dólar no se modifica.

Con el resultado del martes, se está observando que el BCRA está alineando todas las tasas, es decir, algo que ya se observó la semana pasada con la de referencia, la que se paga en el mercado secundario de Lebac y la de Pases.

Para el analista económico Salvador Di Stefano, los vencimientos correspondientes a esta semana, de $398.000 millones, no son "una suma relevante, ya que representan apenas el 38% del stock de Lebac que hay en el mercado".

En consecuencia, opina que la tasa actual convalidada "no generaría retiro de fondos del sistema, ya que la gente seguirá en pesos, porque la mayoría de las casas de Bolsa recomiendan carteras con una participación del 40% al 60% en Lebac".

Al mismo tiempo, mantener la tasa alta también le facilita a Sturzenegger mantener controlado el precio del dólar.

"De haberse producido un recorte mayor en la tasa -considerando que el BCRA tenía vencimientos de Lebac por $400.000 millones-, lo hubiera puesto frente al riesgo de enfrentar graves problemas para renovar esa deuda, lo que hubiera resultado en un disparador inmediato de una mayor presión sobre el billete verde", resume Hugo Scopetani, director de Sudamericana de Finanzas Sociedad de Bolsa.

"De esta forma, logró descomprimir esa expectativa", recalcó el experto.

La apuesta por el crecimientoLa licitación de este martes se hizo en medio de la puja entre "tasa" y crecimiento de la economía, que llevó al Gobierno a relajar la meta de inflación desde un nivel inicial de entre 8% y 12% al 15% para 2018

En el Palacio de Hacienda no andan con vueltas. Admiten que, en medio de los ajustes tarifarios y del envión inflacionario, toda la atención está puesta en el crecimiento 2018.

En voz baja, y por ahora sólo off the record, en los despachos oficiales aceptan que será muy complicado cumplir con la meta de expansión del 3,5% consignada en el Presupuesto.

Varias de las principales consultoras de la City ya comenzaron a ajustar para abajo esa previsión. Una de ellas es Eco Go (ex Estudio Bein), que da cuenta de un alza del PBI de apenas 2,1% para este año. Esta revisión bajista se generalizará en las próximas semanas.

¿Qué dicen en el Palacio de Hacienda ante esas demostraciones de escepticismo en el mercado? El siguiente punteo sintetiza la visión oficial:

1. "La nueva pauta inflacionaria y el reciente repunte del dólar le darán más oxígeno a la economía. Quitan del medio la sensación de atraso cambiario creciente y la idea de que nos encaminábamos hacia una burbuja"

2. "Después de un primer trimestre áspero por las subas tarifarias, de ahí en más comenzaremos a recorrer una senda de crecimiento parecida a la del último semestre de 2017"

3. "El contexto internacional juega a favor: Brasil y Europa muestran una recuperación interesante y esto quedará reflejado en nuestras cuentas externas"

4. "Sin embargo, eso no significa que el déficit de cuenta corriente se revertirá fácilmente. Tardaremos varios años en lograr un superávit pero iremos camino a ello"

5. "Mientras tanto, veremos una expansión de las inversiones locales y extranjeras: en el tercer trimestre crecieron al 13% anual y cerraron el año en torno al 17%/20%"

6. "Los sectores que captarán más desembolsos serán los de energía,telecomunicaciones, combustibles y real estate"

7. "Las decisiones de inversión no dependen de la tasa de las Lebac. Más bien, son sensibles a los tipos de interés de más largo plazo. Al riesgo país, que viene disminuyendo y se ubica en los niveles mínimos de los últimosdiez años. Este es el proceso que apuntamos a consolidar"

8. "Debemos ser pacientes. Sabemos que se necesita que lleguen dólares para inversiones en la economía real. Precisamente, todos estos cambios que ayudan al crecimiento del país, harán que sea más fácil recorrer el camino hacia una economía más sustentable"

El Gobierno sabe que el talón de Aquiles del modelo económico es la restricción externa. Concretamente, la acumulación del déficit de cuenta corriente, por el rojo comercial y la cada vez más pesada cuenta de los intereses de la deuda.

Por ese motivo, se focaliza en sostener el repunte del PBI. Es la única manera de tener convencidos a inversores extranjeros de que no es "mal negocio" financiar a la Argentina.

Ese es el partido que se juega en los despachos oficiales: el del crecimiento. Por eso en Casa Rosada se aceptó extender la filosofía del gradualismo a las metas inflacionarias.

La creencia de que un peso más devaluado y una política monetaria más expansiva contribuirán a ese escenario fue la que finalmente se impuso.

Temas relacionados