El Bitcoin está viviendo su peor momento: luego de haber cotizado a u$s20.000 a mediados de diciembre, la criptomoneda experimentó un fuerte derrumbe que la ubicó alrededor por debajo de los 7.000 dólares hacia la noche del lunes.

De esta forma, la divisa cifrada alcanzó los valores de principios de noviembre y empujó a casi todas las monedas del panel de CoinMarketCap: de las 100 líderes, apenas dos operaron en terreno positivo este lunes.

La nueva baja de la criptomoneda, de alrededor de 17% en las últimas 24 horas, estuvo signada por la prohibición de bancos de Estados Unidos y del Reino Unido para comprar divisas cifradas mediante tarjetas de crédito.

Es que las entidades temieron que el fuerte desplome de las cotizaciones redundara en que sus clientes no tengan la capacidad de asumir sus obligaciones de deuda.

Lloyds Banking Group Plc, el mayor prestamista británico, dijo el domingo que vetaría las tarjetas de crédito de sus clientes para la compra de monedas digitales, sumándose a medidas similares tomadas por JP Morgan Chase & Co y Citigroup en Estados Unidos.

La decisión busca proteger a los clientes de la acumulación de grandes deudas por las compras de monedas virtuales, en caso de que sus valores se desplomen, dijo una portavoz del Lloyds.

La semana pasada, Mastercard, la segunda mayor red de pagos del mundo, dijo que sus clientes que compran criptomonedas con tarjetas de crédito causaron un alza de 1% en los volúmenes de transacciones en el exterior en el cuarto trimestre.

En otras medidas regulatorias, la India está tomando pasos para declarar ilegal el uso de criptomonedas en su sistema de pagos, al tiempo que designó a un supervisor que vigilará las operaciones no reguladas de "activos digitales", dijo el lunes un funcionario del Ministerio de Finanzas.

El cóctel La decisión de los bancos británicos y estadounidenses no es la única causa que atenta contra el valor del Bitcoin.

En este sentido, se conoció que el gobierno chino desea bloquear el acceso a las transacciones con criptomonedas. El gigante asiático es uno de los principales mercados de Bitcoin, pero allí también se emplaza la mayoría de los mineros.

Según las autoridades, el objetivo es garantizar la "estabilidad financiera", apagar los "últimos fuegos" de las monedas virtuales en China y acabar con la recaudación de fondos en criptomonedas, "que vuelven a crecer", según explicó el domingo la publicación oficial Jinrong Shibao, revista financiera bajo la égida del banco central (PBOC).

A raíz de los múltiples controles del país asiático, los inversores chinos buscaron alternativas, como los sitios especializados en comercio de criptomonedas, las transacciones directas de particular a particular, y los accesos a plataformas en el extranjero, en especial en Hong Kong o Japón, fuera del alcance de los reguladores del régimen comunista.

Pero la primera potencia también puso su foco sobre las criptomonedas. La Comisión de Valores de los Estados Unidos (SEC) y la Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas (CFTC) se reunirán para discutir sobre Bitcoin y divisas similares.

Las dos principales autoridades reguladoras del mercado financiero de Estados Unidos han anunciado que celebrarán una audiencia específica sobre monedas virtuales el 6 de febrero de 2018.

Durante el Foro Económico de Davos se discutió el avance de las criptomonedas y el tema seguramente seguirá en danza durante la Cumbre del G20, que se realizará en Buenos Aires durante marzo. Ya varias potencias globales (como Alemania y Francia) pidieron un esfuerzo global para introducir a estas divisas criptográficas dentro de la agenda parlamentaria.

En este sentido, el presidente de la SEC, Jay Clayton, y su par de la CFTC, J.Christopher Giancarlo, trabajarán en conjunto para sumar "transparencia" a las criptomonedas.

"La CFTC y SEC, junto con otros reguladores federales y estatales y autoridades penales, continuarán trabajando juntos para traer transparencia e integridad a estos mercados y, lo que es más importante, para disuadir y enjuiciar el fraude y el abuso", remarcaron ambos directivos.