Jeff Bezos se convirtió en los últimos días en el hombre más rico del mundo, según el ranking de la revista Forbes, y además es la primera persona en la historia de registrar una fortuna de doce cifras (u$s112.000 millones). 

Este monto impide llamarlo millonario o multimillonario. El término para describir a alguien que acumula esa cantidad de dinero aún no existe en el diccionario. La cadena BBC aseguró que sería algo así como "cienmilmillonario".

En 1994, Bezos dejó su trabajo como ingeniero de software financiero en Wall Street para fundar su primera compañía, Cadabra.com, con un capital de u$s300.000 y trabajando en un garage.

Luego la rebautizó como Amazon y ahora vale u$s280.000 millones. La compañía brinda servicio técnico y almacenamiento a empresas como Facebook, Spotify y Netflix.

Por otra parte, este pionero del e-commerce cree que los hombres deben mudarse al espacio para salvar el planeta. Por eso creó Blue Origin en el 2000, empresa desde la cual desarrolla cohetes reutilizables capaces de transportar pasajeros.

También invirtió en 2013 en el diario norteamericano, The Washington Post, firma que compró por u$s250 millones. Y el año pasado adquirió también la cadena de venta de productos orgánicos Whole Foods, por u$s14.000 millones.

Según Diario Gestión, el emprendedor aprendió las más grandes lecciones con su abuelo durante los veranos que pasaba en su granja de Texas. Según mencionó Bezos en una entrevista con su hermano, Mark, el abuelo  creaba sus herramientas y de forma autodidacta suturaba a sus animales.

Fue así que el millonario y su esposa, Mackenzie Bezos, permitieron que sus hijos usaran cuchillos y herramientas eléctricas desde que tenían 4 años para que aprendan de sus errores si se lastimaban. "Preferiría tener un niño con nueve dedos que un niño sin recursos", confesó Bezos sobre sus extremos métodos de crianza.

Desde el momento en que Bezos abrió su tienda digital de libros, optó por vivir y tomar decisiones minimizando sus remordimientos para alcanzar la proyección que tenía de sí mismo a sus 80 años.

Bajo esa filosofía, compró una casa de u$s23 millones en Washington donde tiene como vecinos al expresidente Barack Obama y a la hija de Donald Trump, Ivanka. Su hogar es la combinación de dos propiedades que solían ser el Museo Textil de la ciudad.

Parece imposible encontrar un sueño que el millonario no pueda cumplir. Sin embargo, su mayor fantasía, según él mismo confesó, es ser camarero. "Me enorgullezco de mis cocteles artesanales", reveló Bezos, quien también se considera muy lento para trabajar en la barra.

No obstante, Bezos pasa la mayor parte de la semana en la torre de 37 pisos en Seattle, desde donde dirige Amazon. Los miércoles visita el parque industrial de Kent, donde se ensamblan cohetes para Blue Origin.

Cada dos semanas, asiste a conferencias telefónicas con el equipo del periódico y dos veces al año los directivos lo visitan en su casa. "No parecía la casa de un multimillonario. Bezos estaba tratando de sacar al perro del sofá", contó Shailesh Prakash, director del periódico al New York Times.

Sin embargo, es reconocida su fama de "mal jefe". Sus empleados comentaron varias veces sobre el mal carácter de Bezos en el trabajo. "¿Sos vago o solo incompetente?", es una de las frases hirientes que sus empleados recuerdan que ha dicho.

"Es más fácil ser amable que ser inteligente. La inteligencia es un don, la amabilidad es una elección", señaló Bezos luego de haber sido elegido como el peor jefe del mundo por la Confederación Internacional de Sindicatos.