El Discovery celebrará los 30 años de vida en 2019. 

Es un viejo conocido pero no es uno más, ni para Land Rover ni para la industria en general, ya que es de los pocos vehículos que se definen como familiares, pero con la mayor capacidad off road del mercado.

Con una estética muy particular que lo identifica aún tras el paso del tiempo, el nuevo modelo llega en su quinta generación con una plataforma más liviana, nueva imagen y más tecnología, la cual se aplica tanto para el confort interior como para el manejo y el andar.

La marca realizó el lanzamiento en Arawak, un campo con una pista de pruebas llena de obstáculos, donde se mieden las cualidades del vehículo. Además, en esta ocasión, se presentó al nuevo gerente general del grupo, Federico Rocca, un viejo conocido en la industria ya que viene de las filas de Peugeot.

Junto con esta presentación, la marca también anticipó que será un año de novedades, tanto en Land Rover como en Jaguar y Volvo. Y que a pesar de los cambios del dólar y las recientes variaciones de la Argentina, siguen con sus planes intactos y aprovechan una recuperación en ventas que acompaña a las tres marcas.

Claro que esta recuperación no es gratuita, sino que desde el año pasado, el grupo viene lanzando nuevos modelos y modernizando toda la gama de productos.

Ahora llegó el turno del Discovery, el SUV grande que se caracteriza por portar una estética única, lineal, casi recta desde cualquier mirada, pero que se conjuga con detalles verdaderamente off road, robusto y potente en cualquier terreno.

Sus ambiciones son muchas: competir con jugadores como Porsche Cayenne, BMW X5 y X6 y Mercedes Benz GLE. Cualidades tiene, y en precio son parecidos. El objetivo es vender 20 unidades al año.

En cuanto a su estética, cuenta con espacio para 7 personas, con una plataforma que tiene un 85% de aluminio (43% reciclado) y supone un ahorro de 480 kg en comparación con la versión anterior (de acero).

Se complementa con un diseño exterior que mantiene el ADN de la marca, con líneas bastante rectas que se han actualizado, pero no dejan en el olvido a los primeros Discovery.

Mide 4.9 m de largo, 2.20 de ancho y 1.88 de alto. Todas las versiones tienen faros full led, los cuales resaltan en un frontal con una ancha pero fina parrilla.

Comenzando por su plataforma, gracias al uso de aluminio en gran parte de su carrocería, integra un monocasco de peso ligero que se compone de un 85% de aluminio (43% reciclado) y supone un ahorro de 480 kg en comparación con la versión anterior (de acero).

Se complementa con un diseño exterior que mantiene el ADN de la marca, con líneas bastante rectas que se han actualizado, pero no dejan en el olvido a los primeros Discovery.

Mide 4.9 m de largo, 2.20 de ancho y 1.88 de alto. Todas las versiones tienen faros full led, los cuales resaltan en un frontal con una ancha pero fina parrilla.

De perfil se distingue su línea de techo escalonada, la cual se eleva para otorgarle espacio a las filas traseras, los cuales fueron colocados más arriba que los del frente, asegurando que cada pasajero esté en la mejor posición posible.

En cuanto a la habitabilidad, tiene una capacidad de hasta 2.500 litros de carga. Sus asientos son configurables de forma instantánea desde cualquier Smartphone utilizando la Intelligent Seat Fold Technology.

Es una tecnología que permite abatir electrónicamente los cinco asientos traseros para darle mayor capacidad de carga al baúl proporcionando hasta 2.500 litros de capacidad con las dos filas traseras abatidas o 1.231 con la tercera fila abatida.

En tecnología, su gran pantalla central se complementa con un sinfín de asistentes. Tiene el sistema de infoentretenimiento InControl Touch Pro de Jaguar Land Rover.

La configuración intuitiva cuenta con una gran pantalla táctil de 10 pulgadas colocada en la parte alta de la consola central, lo que permite a los diseñadores de la marca inglesa, reducir el número de interruptores de la parte central del vehículo en un tercio, ofreciendo un aspecto limpio y despejado.

Motor y seguridadEl nuevo modelo se ofrece con dos motores, diésel y naftero. Una es V6 3.0 turbodiesel con 258 cv y la otra es V6 3.0 supercargador nafta con 340 cv. Las dos tienen la misma caja automática de ocho velocidades (con convertidor de par) y tracción permanente a las cuatro ruedas. También ofrece caja reductora en las dos versiones.

En cuanto a sus nuevas tecnologías aplicadas al uso del 4×4, cuenta con diferentes beneficios como la optimización de una amplia gama de ajustes, desde la sensibilidad del acelerador hasta las características del cambio de marchas, para adaptarse a las condiciones de conducción en el giro o incluso para seleccionar el ajuste óptimo automáticamente si los conductores no están seguros de la mejor elección.

Al abordar un terreno con características bien extremas, el All Terrain Progress Control (ATPC) se puede programar para mantener autónomamente una velocidad de arrastre adecuada elegida por el conductor.

Tiene una combinación de ángulos de aproximación, con una profundidad de vadeo (900 mm) y altura de la parte inferior aumentada mediante un conjunto de tecnologías que aseguran el liderazgo a la hora de atravesar cualquier camino.

Tiene una capacidad de remolque de 3500 kg y para reforzar la seguridad incluye el asistente semiautónomo Advanced Tow Assist, el cual es utilizado en maniobras de remolque difíciles en reversa.

En seguridad, cuenta con airbags frontales, frontales de cortina y laterales traseros de cortina. Tiene alarma de cinturón de seguridad y perimétrica, anclajes ISOFIX, Control de Tracción Control Dinámico de Estabilidad y Frenos ABS con sistema de asistencia en frenado de emergencia, entre otros. Para destacar, es que viene de serie con suspensión neumática de altura variable.

Precios y versiones:

Discovery 5 SE V6 Diesel: 149.900 dólares

Discovery 5 HSE V6 Diesel, 164.900 dólares

Dicovery 5 HSE V6 Nafta, 169.900 dólares