iProfesionaliProfesional

A pesar de la crisis en el sector lechero, instalan el primer tambo-fábrica robotizado

Una empresa familiar consultó con productores de Canadá y Californa antes de embarcarse en un proyecto cuyo monto de inversión alcanza los u$s400.000 
25/05/2018 - 11:52hs
A pesar de la crisis en el sector lechero, instalan el primer tambo-fábrica robotizado

Si bien el sector lácteo no está pasando un buen momento en la Argentina, hay productores que creen en el potencial de la lechería argentina.

Tanto es así, que al sur de Córdoba, en un campo de cinco hectáreas en Coronel Moldes, una empresa familiar llamada "La Inesita" que hace diez años comenzó a escribir su historia láctea, apuesta a la innovación en el tambo y al agregado de valor, señala Infobae.

Se trata de la incorporación de robots de ordeñe. Cada uno admite un número teórico de 65 vacas y entre los dos producirán 6.000 litros de leche. Entre robots, accesorios, instalación, el proyecto implica una inversión que alcanza los u$s400.000 y estiman que a fin de año, ya estarían produciendo. Como concepto de producir leche robótica, darle valor agregado en el mismo lugar con la elaboración de quesos y tener el punto de venta in situ, sería la primera fábrica-tambo robotizada en Argentina. Cabe aclarar que el primer tambo robotizado en Argentina se instaló en el INTA Rafaela.

Impacto de la robotizaciónMartín Brito, uno de los integrantes de la empresa familiar protagonista de la iniciativa, dio detalles sobre esta iniciativa.

Si bien en el mundo hace mucho que existen los robots para la lechería, Martín, junto a su hermano y padre comenzaron a pensar la idea hace un año y medio, y para eso, consultaron a productores de Canadá y de California que ya lo habían experimentado. En este sentido, Brito reconoció que no es un sistema perfecto, tiene sus ventajas y desventajas, sin embargo tomaron la decisión de hacerlo.

A ser consultado sobre los beneficios de un robot en un tambo, Brito, en primer lugar, respondió: "Básicamente ordeñan. Poner y sacar una pezonera era un acto tan rutinario que no tenía ninguna ventaja que lo hiciera un ser humano. El robot le saca tiempo al ser humano, el hombre es más valioso usando el sentido común y el criterio en otra actividad y el robot, ordeñando".

Por otra parte, Brito destacó que el robot tiene un humor neutro, en cambio, en la persona influye tener un día mejor o peor, y eso puede afectar su trabajo respecto a la calidad de leche ya que el robot hace un análisis instantáneo de la calidad de la leche.

En cuanto a este último punto, no menor, aclaró: "La gente que hoy está ordeñando va a pasar a otros puestos más elevados y más cómodos dentro de la empresa". Por ejemplo: en el manejo del robot, de la quesería y en el salón de ventas. "Esto implica una mejora de calidad de vida para el personal que trabaja en La Inesita", aseguró.

Una apuesta en medio de la crisis

Al ser consultado sobre cómo se animaron a incorporar tecnología en el marco de la situación crítica que atraviesa la lechería, Brito, señaló: "Tomamos la lechería como una forma de vida, sin haber nacido en el campo y sin haber sido del campo. Creemos que el problema de la lechería argentina es análogo al problema del país"

"Mientras tanto, se habla mucho de que hay desnutrición y pareciera que no importara que un tambo se cierre, cuando el tambo forma parte del principal eslabón de nutrición de un chico", agregó en diálogo con Infobae.

A modo de reflexión y de análisis, Brito comentó: "La leche es lucha, es esfuerzo, es compromiso, es honestidad y es esperanza. Si le ponemos lo que tenemos que poner, trabajamos y tenemos un producto a un buen precio, podemos manejar nuestra cadena de costo y salir a vender nuestro producto al precio que consideremos, porque somos formadores de toda la cadena que hoy está complicada".

Temas relacionados