El economista de la Universidad Di Tella, Bernardo Kosacoff, analizó la crisis del país que mantiene una alta inflación, un importante nivel de endeudamiento y una actividad industrial sin crecimiento.

El martes el INDEC difundió el índice oficial de precios de junio que dio 3,7%, el nivel más alto de los últimos dos años.

"Este es el impacto de las turbulencias que tuvimos, en esto influye notablemente la aceleración del dólar", dijo en LN+. "Es una vergüenza que un país que tiene capacidad para producir alimentos para 400 o 500 millones de personas no encontremos algún mecanismo, una producción masiva de alimentos, que esté dirigida a esos sectores de menores ingresos", señaló.

Al señalar que la Argentina es un país exportador de alimentos, opinó que se debería analizar cómo desacoplar los precios internacionales de los precios que tiene que pagar el conjunto más pobre de la población. "En esto hay que hacer políticas específicas", indicó. Y se mostró optimista: "Las crisis pueden ser una buena oportunidad para hacer cosas muy disruptivas".

Y se refrió específicamente sobre la industria de la carne con quienes el presidente Mauricio Macri se reunió el lunes para pedirles que congelen los precios.

"Este es un sector donde se debe aprovechar la oportunidad internacional de un producto en el cual somos notablemente competitivos y hay que avanzar con áreas de mayor valor agregado pero desacoplar el precio que va a recibir el 10% de la población más pobre", explicó el economista.

Según dijo, hacer eso es "sencillo".

"Se deben generar todos los estímulos y las libertades y las potencias del mercado para exportar la carne de alta calidad y generar una retención con los cortes de baja calidad para que no se exporten", explicó. "Le rebajás el IVA y le ponés un IVA alto a los cortes de alta calidad y rompés esa relación de precios relativos que tenés hoy en día. Cuando se compara el precio de la carne en Brasil con la de la Argentina, acá es barato el lomo y los cortes populares son caros".

Ante la pregunta de si se subestimó el impacto del dólar en la economía local, el economista respondió: "Definitivamente. Ahora es un momento como para preocuparse". Siguiendo esa línea, argumentó que el país tiene una oportunidad de ahora en adelante de recomponer lo que es su balanza comercial, esto es, la relación entre exportaciones e importaciones de bienes y servicios.

"Claramente lo que vamos a tener como fuente de recuperación para los próximos meses es el sector agropecuario, que va a generar alrededor de u$s8.000 millones más de exportaciones porque va a tener una cosecha récord", proyectó. Además, señaló que la otra área destinada a generar divisas es el turismo. Sobre ello explicó que, para la mayor parte de la población que tiene ingresos en pesos, hay una indicación muy clara de hacer turismo interno. "Eso es muy bueno porque va a tener efectos positivos muy notables", opinó.

Minutos después, advirtió: "Tenemos por delante meses difíciles". Pero confió en que el país tiene fuentes para recuperarse una vez que se ordene.