Eran jóvenes e idealistas, y probablemente no pensaban que el futuro los ubicaría a ambos muy cerca del poder pero en espacios diametralmente opuestos. Axel Kicillof, exministro de Economía de Cristina Kirchner, y Guido Sandleris, flamante titular del Banco Central del gobierno de Mauricio Macri, tuvieron una relación fluida en los '90 y su alianza llegó a tal punto que hasta compartieron la lista para competir por el centro de estudiantes de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA).

Con humor, buscaban darle pelea a Franja Morada y la Manuel Belgrano a través de su agrupación con el original nombre de TNT (la fórmula de la dinamita y las iniciales de "Tontos pero No Tanto) acompañado por el dibujo del Coyote, aquel personaje animado que perseguía -sin éxito- al Correcaminos.

 

Más que una ideología partidaria definida, compartían la militancia por el eterno tema del precio de las fotocopias y, sobre todo, por desbancar a la juventud radical y otras agrupaciones tradicionales en la Facultad de Económicas.

El hoy diputado nacional Kicillof fue en esa lista candidato a presidente del centro de estudiantes, mientras que Sandleris se postulaba a secretario general suplente.

Junto a ellos estaban, entre otros, Leonardo Piccioli, autor del libro Soy solo, y los periodistas Lucas Bergman, Andrés Borenstein y Sebastián Campanario.

Integrantes de aquella agrupación reconocen que tenía un tinte "progre", pero que los unía, sobre todo, el deseo de destronar a Franja Morada, la agrupación radical que una y otra vez ganaba las elecciones de los centros de estudiantes de esa concurrida universidad pública.