El diputado Daniel Arroyo -coordinador del programa 'Argentina contra el hambre', a pedido de Alberto Fernández- se reunió con la cúpula de la cámara industrial alimentaria Copal, cuyo titular es Daniel Funes de Rioja. Tras una reunión de dos horas, ambos manifestaron coincidencias y abrieron el canal para futuros diálogos.

Arroyo suena como candidato a ministro dentro del esquema de Alberto Fernández, el candidato a presidente del Frente de Todos que ganó en las primarias. Funes de Rioja representa a más de 500 firmas dedicadas a la alimentación, desde Pymes hasta las grandes.

Sindicatos, universidades, representantes de las iglesias, de movimientos sociales y organismos de derechos humanos ya forman parte de esta idea de Fernández para luchar contra el hambre. Arroyo invitó a Copal a sumarse a esa mesa.

"Creemos en el diálogo y este plan de Argentina sin hambre debe ser una política de Estado. Por eso, intercambiamos puntos de vista sobre modalidades en las que tenemos coincidencias y desacuerdos. Es el comienzo de un diálogo que seguirá", explicó Funes de Rioja.

"Si les toca a ellos la responsabilidad de gobernar el país -tras las elecciones-, saben que Copal va a estar abiertamente comprometida en la lucha contra el hambre", marcó.

"Fue muy buena la reunión. Tratamos ejes centrales, sobre la canasta básica de alimentos, una tarjeta alimentaria, la baja del consumo. Fue una charla de dos horas donde se abordaron muchas cuestiones, que iremos trabajando puntualmente", dijo Arroyo.

La eliminación del IVA para los sectores de menores ingresos es una propuesta que la Copal viene planteando desde 2015. La supresión que realizó la actual administración no les parece la más adecuada. "Proponemos que se haga hacia los sectores de menores ingresos, a través de un proceso de bancarización para que ese beneficio no se quede atascado en la cadena y llegue a los beneficiarios", detalló Funes de Rioja.

Arroyo quiere una "tarjeta de alimentos". 

"No solo comprendería el IVA, sino también que permita promociones para lácteos, frescos y otros productos que puedan mejorar la calidad nutricional", apuntó Arroyo, que fue funcionario de Néstor Kirchner y Daniel Scioli, además de ser candidato a vicegobernador de Buenos Aires por el Frente Renovador en 2015.

Una empresa -Syngenta- propuso aportar un 1% de sus ganancias en políticas contra el hambre. Funes de Rioja descartó que esa misma modalidad aplique a los integrantes de su cámara. También negó que haya sido una exigencia de Arroyo.

"Fue una propuesta de una empresa. No le vamos a pedir algo así a alguien", aclaró el referente en temas sociales de Fernández.

"Hay una idea de algunos sectores sobre una ley de Góndolas (para mejorar la pobreza). Creemos que no serviría y podría provocar quiebres de stocks. Hubo una experiencia internacional y fracasó", detalló Funes de Rioja, quien le planteó sus objeciones en la materia a Arroyo. "El eje central estuvo en lo social. El diagnóstico es absolutamente compartido. Escuchamos las ideas sobre lo que puede funcionar", según contó Arroyo.

La necesidad de una reactivación del consumo interno fue compartida por los interlocutores. Funes de Rioja cree que ese camino se alcanzará con una "baja de impuestos" y "una formalización de la economía".

Arroyo recalcó la importancia de una tarjeta de alimentos, pero también resaltó una "política de alimentos federal, con cadenas regionales, porque en cada región hay diferencias sobre lo que necesitan las madres para alimentar a sus hijos".

"El sector está con una contracción muy importante. Hay una utilización del 50% de la capacidad instalada. Las Pymes no tienen acceso al crédito, al capital de trabajo y sus volúmenes caen. La caída de ventas es una situación preocupante", retrató Funes de Rioja ante Arroyo.

"Nuestro eje central está en lo social. En especial, para las madres. Copal entiende plenamente la situación y por eso habrá mas reuniones. Los invitamos a incorporarse al consejo (de Argentina frente al hambre) y habrá nuevas reuniones. La idea es poder avanzar desde el 10 de diciembre", aseguró Arroyo, de cara al mandato que arrancaría Alberto Fernández.