Los funcionarios cercanos a Alberto Fernández repetían hasta esta mañana que no habría cambios en el gabinete, mientras la agenda presidencial comenzaba con un acto acompañado de empresarios, ministros y gobernadores, para la presentación del proyecto de Ley de Promoción de Inversiones Hidrocarburíferas.

Nada hacía prever que el momento en el que el Presidente se sentía apoyado políticamente, terminó por esfumarse cuando comenzó la catarata de cartas de medio gabinete poniendo a disposición sus renuncias.

En su la última presentación pública en el Museo del Bicentenario, el jefe de Estado estuvo casualmente acompañado por uno de sus socios políticos, el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, quien ayer también compartió escenario en otro acto en la provincia de Buenos Aires junto al jefe de Gabinete, Santiago Cafiero.

En el mismo salón, apoyaron con aplausos los gobernadores de Buenos Aires, Axel Kicillof, y de Santa Cruz, Alicia Kirchner, dos de los mandatarios que reaccionaron con pedidos de renuncias de sus ministros ante la derrota electoral del domingo.

Otras provincias patagónicas fueron invitadas pero solo asistieron de manera presencial los gobernadores de Río Negro, Arabela Carreras; de Chubut, Mariano Arcioni; de Neuquén, Omar Gutiérrez, y Gustavo Melella, de Tierra del Fuego. Mendoza y La Pampa enviaron otros funcionarios y el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, se conectó de manera virtual.

La derrota en las PASO blanqueó las críticas internas de quienes pedían un cambio de timón

En paralelo se gestaba una rebelión interna en el kirchnerismo reclamando cambios urgentes. "Hay que barajar y dar de nuevo", reclaman desde el sector duro que busca darle un mensaje al Presidente tras las renuncias de los ministros que responden a Cristina Kirchner.

La derrota en las PASO blanqueó las críticas internas de quienes pedían un cambio de timón ante los "errores cometidos en la gestión". "Los ministros del gabinete saben que ninguno es imprescindible y que de considerarlo necesario, se harán los cambios consecuentes", afirman desde el territorio bonaerense al conocerse que la totalidad del gabinete de Kicillof puso su renuncia de disposición.

Desde La Plata, hay una postura firme de que los cambios no pasan por los nombres. Referentes de Frente de Todos en este territorio estrenaron los reclamos al presidente Fernández.

"Ningún funcionario está atornillado o encaprichado con quedarse en un lugar", aseguran en el entorno del gobernador bonaerense. El sector que apoya a Cristina sostiene que debe "profundizarse en este momento la gestión" y que "los hechos, no pasa por los nombres". El kirchnerismo duro reclama "distintas acciones", pero aclaran que debe definirlas el Presidente, lo que lo fuerza a tomar una decisión en las próximas horas.

De la vereda de enfrente, los funcionarios que responden a Alberto se quejan por lo bajo de los ministros que pusieron a disposición su renuncia. "Lo hubieran hecho el domingo, y no tres días después", se queja un ministro que expresó verbalmente su dimisión.

El Ejecutivo debería estar planificando a esta hora del día cerrar las medidas económicas planificadas para lanzar mañana. El gabinete económico no pudo reunirse. Tampoco fueron definidos los anuncios para aliviar la crisis económica y social. Una rebelión interna hackeó la intenciones del Presidente.