Desde 1952, todos los 13 de diciembre se festeja el Día del Óptico en la Argentina debido a que coincide con la festividad de la virgen y mártir Santa Lucía, protectora de la vista

En este día en el que se felicita a todos quienes trabajan en el sector y se agradece por la bendición que significa tener salud para ver, es bueno saber algunas virtudes y capacidades del ojo humano, muchas de las cuales seguramente no se conocen.

Por ejemplo, hasta dónde podemos ver. Se cree que podemos ver hasta 10 kilómetros, por esto no es más que un mito forjado por el término frecuentemente empleado en meteorología de "visibilidad óptima".

Lo cierto es que no hay un límite. De hecho, desde lo alto de una montaña, podría verse hasta 100 kilómetros de distancia o más.

Y de noche algunos aseguran que, en una noche oscura y despejada es posible ver la llama de una vela hasta una distancia de 48 km.

Durante las primeras décadas del siglo XX, se decía que quien encendía un segundo cigarrillo con el mismo fósforo, moría en ese mismo segundo.

La razón residía en que, durante la primera Guerra Mundial (1914-1919) la llama del fósforo podía verse claramente a cientos de metros, del lado del bando enemigo.

Cuando un fósforo se encendía por las noches, el francotirador rival apuntaba hacia la llama y, cuando disparaba, era el tiempo en el que el soldado encendía el segundo cigarrillo.

Por qué vemos las estrellas

La visión de larga distancia parece ilimitada, pero el límite siempre lo ponen los fotones o partículas de luz, como es el ejemplo de por qué se ven las estrellas.

Aun cuando se encuentren a millones de kilómetros de distancia se pueden ver porque sus fotones impactan con nuestras retinas, sobre todo en noches sin luna ni iluminación artificial.

De acuerdo con un informe de la BBC, el objeto más lejano que se puede ver sin ningún instrumento para ampliar el rango de visión es Andrómeda, una galaxia ubicada a 2,5 millones de años luz.

Mide seis veces el ancho de la Luna y se ve solamente como una mancha.