Telefónica sigue los pasos de Prisa y reabre viejos capítulos de la guerra judicial del fútbol contra Mediapro. La compañía de telecomunicaciones, que mantiene su apuesta por el deporte rey para ganar abonados en Movistar TV, ha decidido demandar a la productora de Jaume Roures por la explotación de los derechos audiovisuales del fútbol a través de distintos canales de pago.

La empresa reclama por vía judicial a la compañía catalana el pago de unos 8,62 millones de euros como compensación por haber puesto fin a la licencias de emisión de los canales de pago Canal Abono Fútbol y Canal Abono Fútbol I y haberlos cambiado por BeIn La Liga.

"Al desistir de las licencias de los canales de televisión de pago se les causó un perjuicio económico", recoge la productora de Roures en sus últimas cuentas, citando la demanda presentada por Telefónica.

Aunque los canales Abono Fútbol desaparecieron de la parrilla del pago a finales del año 2015, la "telco" ha presentado la denuncia contra Total Channel (en la actualidad Mediaproducción) en enero de 2018.

La empresa que preside José María Álvarez Pallete se dirigió a los juzgados de Madrid, pero Mediapro solicitó el cambio a Barcelona y se lo concedieron en febrero de 2018. La productora, que prepara el escrito de contestación a la demanda, ha encargado un informe pericial sobre el precio de la oferta mayorista de los canales de fútbol para lograr que se desestime.

Mediapro descarta que este proceso se vaya a traducir en el pago de indemnizaciones. Prisa reabrió en junio de 2016 su conflicto judicial contra Mediapro por la "utilización ilegítima de los derechos audiovisuales de la Liga de aquellos clubes de fútbol que pertenecían a AVS durante las temporadas 2007/ 2008 y 2008/2009".

Prisa le reclama 85 millones. Mediapro contestó a la demanda alegando que el caso ya estaba juzgado (el Supremo había condenado a la productora a pagar 32 millones por incumplimiento de contrato).

El juez desestimó la nueva demanda e impuso las costas a la propietaria de la Ser, pero ésta presentó un recurso de apelación en septiembre de 2017 que todavía no se ha resuelto. En el conflicto inicial abierto en 2007, la dueña de El País reclamaba 105 millones a la productora catalana.

Conflictos judiciales aparte, el nuevo modelo de explotación de los derechos del fútbol (venta conjunta) está impulsado los resultados de la productora de Jaume Roures, que ha dejado muy atrás los números rojos y ha reducido el fondo de maniobra negativo un 83% hasta los -17 millones en 2017. Así, la firma catalana cerró el año pasado con unos ingresos de 1.176 millones de euros, un 7,1% más que en el mismo periodo del año pasado.

En esta línea, el resultado de explotación mejoró un 18% hasta los 106 millones de euros aunque el neto retrocedió un 8,4% hasta los 91,4 millones por el mayor pago de impuestos.

Mediaproducción explica que el alza de los resultados con "la mejora en rentabilidad del área de gestión de derechos deportivos", "la apuesta por el crecimiento de las líneas de negocio de creación de contenido y provisión de servicios audiovisuales" y la "fuerte apuesta por la expansión internacional". La mejora también se explica por la absorción de varias empresas participadas, con lo que ha elevado su plantilla el 52%.

La firma aseugra que tiene previstos seguir creciendo en el extranjero mediante la compra de sociedades. "El objetivo es reforzar la cartera de clientes y de servicios, incluyendo nuevos con alianzas y adquisiciones", asegura.