Apple reveló nuevas inversiones en Estados Unidos como parte del compromiso que realizó a principios de año para crear 20.000 nuevos puestos de trabajo en cinco años.

La empresa desembolsará 1.000 millones de dólares en la construcción de un segundo campus en North Austin (Texas) y destinará durante los próximos cinco años 10.000 millones de dólares en nuevos centros de datos.

La compañía había adelantado en enero que invertiría 30.000 millones de dólares en Estados Unidos en los próximos cinco años con el objetivo de crear 20.000 nuevos puestos de trabajo.

Apple, como otras empresas estadounidenses que fabrican fuera del país, ha recibido una fuerte presión del gobierno del presidente Donald Trump para aumentar sus inversiones locales.

El nuevo campus de Austin, donde Apple tiene ya dos grandes oficinas, dará empleo a 5.000 personas, aunque el fabricante del iPhone apunta a que esta cifra podrá triplicarse en los próximos años.

La compañía de Silicon Valley también abrirá nuevas oficinas en tres ciudades: Seattle, San Diego y Culver City (California), con más de 1.000 empleados en cada una de ellas.

Creará "cientos de puestos de trabajo" en los próximos años en otras ciudades estadounidenses como New York, Boston y Portland. Este año, Apple ha incrementado en 6.000 personas su plantilla en Estados Unidos, donde emplea a 90.000 personas.

Una tercera parte de las inversiones prometidas por Apple se destinará a centros de datos. La compañía ha triplicado la superficie de terreno que posee en los dos últimos años, ya que la compañía está comprando suelo para construir centros de datos y parques solares por todo Estados Unidos. Apple Park, la sede de la compañía en Cupertino (California), es un campus de 5.000 millones de dólares en el que trabajan 12.000 empleados.