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Para anticipar los vinos cosecha 2020 que en el corto, mediano y largo plazo podrán disfrutarse, iProfesional avanza con el ciclo "Reporte de vendimia".

Ahora, este medio dialogó con Santiago Mayorga y Ricardo Carretero, enólogos de las bodegas Cadus Wines y Nieto Senetiner, para que anticipen qué estilo de vinos cosecha 2020 se disfrutarán en el corto, mediano y largo plazo.

"La cosecha 2020 va a ser recordada por su temprana madurez. En 21 cosechas que hemos participado, nunca vimos algo igual. Es muy buena en cuanto a sanidad y calidad. En general hubo un menor rendimiento, lo que ayudó a anticipar las cosechas", explicaron.

Lo interesante es que la bodega cuenta con viñedos en diferentes terroirs, los cuales mostraron el siguiente comportamiento climático: Agrelo: hubo una maduración muy temprana, con muy buen color y mucha concentración aromática y de fenoles, pero con mucha untuosidad en boca.Tupungato: registraron una muy buena concentración aromática, sobre todo de frutas negras, con un color violáceo muy intenso y muy buena sucrosidad en boca.Chacayes: se destacó por ser una vendimia con mucha fruta roja en la parte aromática y, como siempre, su tipicidad de hierbas aromáticas como el aguaribay y poleo. En general, los vinos tintos presentan mayor tensión de taninos.Vista Flores: al tener suelos más arenosos con piedra incrustada de calcáreo en esta zona, adelantaron a cosecha para lograr mayor frescura.

"Ha sido una cosecha de calidad, donde cada región marca muy fuertemente su tipicidad", dijeron a modo de conclusión.

¿Y cómo se comportó el clima a diferencia de la vendimia anterior? "Con respecto a la vendimia anterior, podemos destacar varios fenómenos: tuvimos una primavera fresca con algunas heladas tardías que si bien no produjeron daños severos, afectaron el cuaje generando racimos más pequeños y con menor cantidad de granos. Ello se tradujo en mermas de entre 20 y 30%", detallaron.

"Luego en enero las temperaturas promedio fueron más altas que la media, con escasez de agua lo que adelantó la cosecha de las tintas sobre todo entre 2 y 3 semanas, con respecto a los blancos que sólo se adelantaron dos semanas como máximo", agregaron.

VINOS | Santiago Mayorga 

En cuanto a los trabajos agronómicos en los viñedos, explicaron que realizaron una buena poda, dejando las posiciones para tener brotes espaciados y verticales. Luego se hizo un desbrote temprano, privilegiando los que se encontraban bien ubicados y con racimos bien formados.

"Como todos los años y en este en particular, al ser un año seco con pocas precipitaciones, hicimos un seguimiento muy fino a la aplicación de agua en las plantas, esto se puede ver en la calidad de uvas que obtuvimos", detallaron.

"Por último y siendo que se nos adelantó la cosecha, redoblamos los muestreos y degustaciones de uvas para dar con el momento óptimo y así poder mantener un buen balance", agregaron.

Los vinos que vienen

A la hora de destacar la calidad lograda en las variedades tintas y cómo creen que impactará esto en el estilo de los vinos, Mayorga y Carretero señalaron que la combinación de sanidad, menores rendimientos y adelanto de la cosecha generaron vinos con mayores colores violáceos, de muy buena concentración de boca pero manteniendo frescura aromática y tipicidad de terroir y varietal.

"Creemos que será una cosecha de calidad para todos los vinos. Si bien aún es pronto, podemos compararla con la del 2018 que fue muy concentrada y más madura; y con la del 2016 que fue más liviana y fresca. Este año se combinan las bondades de ambas: es decir la frescura y la tensión de acidez con buena sucrosidad y concentración de boca", plantearon.

VINOS | Ricardo Carretero

Al momento de enumerar las cepas tintas más destacadas en esta vendimia 2020, no dudaron: "El Malbec con sus versiones y estilos, y también sumamos el Cabernet Sauvignon y el Cabernet Franc".

¿Y cómo le fue a las variedades blancas? "Fue un año con pocas uvas blancas. Siguieron la misma tendencia del menor rendimiento", señalaron.

"Actualmente los blancos de calidad están dispersos en muchas microrregiones de diferentes condiciones microclimáticas, pero en general sufrieron el calor de enero y para mantener la frescura y las notas cítricas que las caracterizan hubo que vendimiar antes. Si estilísticamente se buscaba un blanco potente era un buen año para lograrlo", coincidieron.

Y, respecto de las variedades que más se destacaron, se mostraron muy satisfechos con el Semillón de Tupungato de Nieto Senetiner, y el Chardonnay de Vistaflores, de Cadus.

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