Audi vive una travesía china en la presentación del Q3
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Pocos hubiesen imaginado, hace algunos años atrás, que una marca premium podría elegir China para presentar un nuevo producto.
Sin embargo, Audi lanzó el nuevo Q3 y para hacerlo eligió, nada menos, que el país asiático.
En un tour de 160 expertos, la marca alemana recorrió algunas de las ciudades más importantes de China poniendo a prueba el SUV de alta gama.
La aventura incluyó Pekín, Shanghai, Shenzhen, Guilin y Hong Kong, donde se descubrió que lo peor del país no son sus caminos, sino el caos circulatorio reinante, tal como relata El Mundo.
En pocos años China ha pasado de ser un país subdesarrollado a convertirse en una de las grandes potencias mundiales, con tasas de crecimiento en torno al 10%, que le han valido para colocarse como la segunda economía del mundo, por delante de Japón, y como primer exportador del planeta.
Por eso la mayoría de las grandes automotrices ya se han establecido allí a través de acuerdos de colaboración con empresas locales, la única forma de entrar que permite el Régimen.
Las cifras no dejan lugar a dudas. Los patentamientos llegaron a 12,5 millones de unidades en 2010, mientras que el segmento de los vehículos todocamino (SUV) premium, en el que se encuadra el pequeño Audi, crece de una forma aún más increíble.
Entre 2008 y 2010 se han multiplicado por cuatro las ventas de ese tipo de autos, un dato que invita a los directivos de Ingolstadt a soñar con un escenario de rotundo éxito, en el que ya triunfan con el Q5 y el Q7.
Travesía
Coincidiendo con el inicio de la comercialización del Audi Q3, la marca alemana ha organizado el Trans China Tour 2011, un recorrido de norte a sur de su continente, en el que han tomado parte 160 periodistas de todo el mundo, a bordo de veinte unidades del nuevo modelo.
La aventura comenzaba en Pekín, continuaba hacia Shanghai, Shenzhen y Guilin, para finalizar en la imponente ciudad de Hong Kong, después de 5.700 kilómetros de contrastes permanentes entre la vida rural donde parece haberse detenido el tiempo y la pujanza económica.
La firma de los cuatro aros cuenta desde 1988 con una fábrica en Changchun, a través de una joint venture con el constructor local FAW, y en ella producirá, probablemente en 2013, el nuevo Q3.
Mientras tanto, a partir de julio del año próximo, este modelo se importará de España, ya que por el momento se hace en exclusiva en las instalaciones de Seat en Martorell, y la previsión es que el 7% del volumen total que salga de esa fábrica vaya al país del lejano Oriente, lo que podría representar alrededor de 7.000 unidades en doce meses.