La Iglesia aceptó colaborar en la búsqueda de hijos de desaparecidos en la Dictadura
La titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, contó este martes que tuvo una reunión el lunes con el presidente de la Conferencia Episcopal, José María Arancedo, y le informó que en noviembre firmaron un documento donde exhortaban a la Iglesia a "dar noticias de niños robados o adultos sepultados" durante la dictadura militar.
En el encuentro se conversó sobre un plan de seguimiento a los pedidos realizados por la institución en la audiencia con el papa Francisco, el 24 de abril en la plaza San Pedro, en la que el Sumo Pontífice profesó: "Cuenten conmigo".
Como ya lo habían hecho con su Santidad, las Abuelas entregaron a Arancedo un listado de posibles acciones "para que la promesa se convierta en acción" y se solicitó que faciliten copias de los libros donde obran las fe de bautismo de los niños bautizados entre los años 1976 y 1983 en las capillas de la zona de San Miguel y Bella Vista, donde se presume podrían haber sido entregados algunos de los nietos buscados.
"La sorpresa fue que nos comunica de un documento de obispos de noviembre donde hablan de los Derechos Humanos y de la dictadura que asoló el país. Exhortan a dar noticias de niños robados o adultos sepultados", detalló esta mañana en diálogo con radio Vorterix.
También se sugirió que solicite al Movimiento Familiar Cristiano toda la información que obre en su poder sobre los niños entregados en adopción durante la última dictadura, teniendo en cuenta que dos nietas restituidas fueron entregadas a través de esta institución de laicos, con estrecha vinculación con la Iglesia.
"Arancedo se mostró permeable y dispuesto a colaborar con los pedidos de las Abuelas y aseguró que la Iglesia ya está trabajando en el tema", destacó.
El Arzobispo entregó a las tres integrantes de la institución una copia del documento de la 104° Asamblea Plenaria de los Obispos de la República Argentina, en la que los Prelados de Argentina unidos promueven "un estudio más completo de esos acontecimientos, en fin de buscar verdad".
En este sentido, el documento hace un pedido explícito a sus parroquianos: "Exhortamos a quienes tengan datos sobre el paradero de niños robados, o conozcan lugares de sepultura clandestina, que se reconozcan moralmente obligados a acudir a las autoridades pertinentes".
"En la misma sintonía fue el pedido que las Abuelas hicieron en abril a Francisco. Seis meses antes la Conferencia Episcopal Argentina había emitido este documento que llamativamente no tuvo difusión en los medios nacionales", señalaron. "Las Abuelas abrigamos una vez más la esperanza de que la Iglesia colabore con nuestra búsqueda", finalizaron.