Robin Williams dejó una herencia millonaria y definió como entregarla a sus hijos
El recientemente fallecido actor Robin Williams ya tenía arreglada a sus 63 años, y dividida en forma salomónica, su herencia desde hace algunos años para dejar protegidos a sus tres hijos.
Para ello creó un fondo en 2009 para evitar que malgastaran su dinero y, según difundó el portal de noticias del espectáculo TMZ, la idea es que los hijos recibieran la parte que le correspondía, pero en tres entregas.
Sus herederos Cody, de 22 años, Zelda, de 25, y Zachary, de 31 años, recibieron un tercio del dinero al cumplir los 21, la otra parte a los 25 y la última porción al alcanzar los 30 años, por lo cual sólo uno de ellos ya cuenta con todo el dinero que le dejó su papá.
No se sabe cuál era la fortuna total del actor estadunidense antes de su muerte, pero se especula que también dejó en el testamento una importante suma a su actual esposa, Susan Schneider, con quien estaba casado desde 2009.
En 2012, la fortuna de Robin Williams oscilaba los 130 millones de dólares, pero al año siguiente, el actor reveló en una entrevista que estaba casi en bancarrota a consecuencia de sus dos divorcios (Valerie Velardi, de 1978 a 1988, y de Marsha Garces Williams, de 1989 a 2008).
Por ese entonces puso en venta su mansión a unos 35 millones de dólares "para estar solvente de nuevo".