Por no tocar las escalas, AFIP se queda con parte de la suba salarial

Hasta casi 10 puntos de los aumentos de salarios que se pacten en las paritarias no va a ir al bolsillo de los trabajadores alcanzados por Ganancias sino van a ser absorbidos por ese impuesto.

Se calcula que si los gremios acuerdan un alza salarial del 29,5%, al bolsillo de buena parte de los trabajadores, que ganan hoy entre $20.000 y $50.000, el aumento efectivo será de entre el 20 y 23%. La diferencia quedará retenida por Ganancias.

También trabajadores o jubilados que hoy no pagan ese impuesto pasarán a estar alcanzados y la retención será mayor si reciben algún aumento salarial, resignando una porción del incremento del ingreso.

Por eso, algunos gremios adelantaron que los pedidos salariales deberán ser mayores a los previstos porque los cambios parciales de Ganancias generan nuevas distorsiones e inequidades. Y se produce fundamentalmente por la decisión de no modificar las escalas salariales, congeladas desde el 000, sobre las que se aplican las alícuotas del impuesto, y también porque los mínimos no imponibles fueron menores a los esperados.

Por ejemplo, un trabajador soltero que gana de bolsillo $22.000, sin hijos menores o casado sin que el cónyuge esté a su cargo ni hijos menores, con el nuevo mínimo no imponible, le descontarán por Ganancias $552 mensuales. En mano cobrará 21.448 pesos.

Pero si recibe un aumento anual de 29,5%, el sueldo neto subirá a $28.500, pero en ese caso le descontarán $2.522 de Ganancias, y en mano cobrará $25.978. En este caso, el aumento salarial del 29,5%, para el trabajador se reducirá a 21,1 por ciento.

El especialista en impuestos Marcelo D. Domínguez elaboró un cuadro que muestra que con un aumento salarial de 29,5%, los trabajadores que perciben entre $20.000 y $50.000 mensuales, van a recibir en mano entre un 6,5 y 9,5% menos. Y esta pérdida de ingreso del trabajador se debe a que, si bien subió el mínimo no imponible, no se ajustaron las escalas sobre las que se calculan las alícuotas.

Para que esos trabajadores tengan una mejora efectiva del 29,5%, Domínguez asegura que deberían recibir un incremento salarial de entre el 35 y el 38% para que después de la retención de Ganancias, cobren en mano ese 29,5% de aumento salarial.

Con esa franja de ingresos hay un porcentaje elevado de empleados bancarios, camioneros, siderúrgicos, petroleros, quienes perderán de recibir la mejora parcial por la reciente suba del mínimo no imponible.

En otros casos, trabajadores o jubilados que hasta ahora no tributaban el Impuesto a las Ganancias pasarán a estar gravados. Por ejemplo, jubilados anteriores a agosto de 2013 que por la movilidad ahora ganan hasta casi $30.000 no tienen descuentos del Impuesto a las Ganancias. Ahora, pagarán Ganancias los que cobren más de $18.880. Y en marzo en lugar de la suba del 15,35%, cobrarían apenas un 10% más.

Domínguez aclaró a Clarín que para el Impuesto a las Ganancias, el casado con hijos es “soltero” si el cónyuge tiene ingresos superiores a los $3.255 mensuales y los hijos son mayores de 24 años o menores con ingresos también de más de $3.255 por mes.