"Vi cuerpos triturados, otros volando": los relatos de quienes vivieron el horror en primera persona

Un camión atropelló a una multitud en la ciudad de Niza, en el sur de Francia, una vez concluidos los fuegos artificiales del festejo del feriado nacional.

Dejó numerosas víctimas: 84 muertos, aseguró el ministro del Interior de ese país, Bernard Cazeneuve. Añadió que se registraron decenas de heridos.

En el país se elevó el nivel de alerta terrorista. El diario "Nice Matin" informó que en la famosa calle costera Promenade des Anglais reinaba el pánico y la confusión.

En medio de extremadas medidas de seguridad, Francia celebraba su feriado nacional, que recuerda el 14 de julio de 1789, fecha considerada el inicio de la Revolución Francesa.

Lo cierto es que la nación viene sufriendo una serie de atentados en los últimos tiempos.

El año pasado, 149 personas murieron en ataques islamistas, 130 de ellos producto de ataques perpetrados en París el 13 de noviembre de 2015.

Durante la reciente Eurocopa de fútbol, un hombre, que se definió como miembro de la milicia terrorista Estado Islámico (EI), mató a un policía y a su novia cerca de París.

El presidente francés, François Hollande, había anunciado que el estado de excepción vigente desde noviembre pasado no sería prolongado más allá del 26 de julio.

Bajo ataque terrrorista
El fiscal de Niza, Jean-Michel Pretre, hizo un relato escalofriante mientras aseguraba que los cuerpos quedaron tirados a lo largo del camino.

Sylvie Toffin, funcionaria de prensa de la prefectura local, expresó que el camión "impactó a varias personas durante un largo trayecto" por la acera cerca del Palacio del Mediterráneo de Niza, un edificio que da a la playa.

Wassim Bouhlel, un residente del lugar,  dijo que el vehículo embistió directamente a la multitud. "Hubo una masacre en las calles", detalló, al tiempo que señaló que  "había cuerpos por todos lados".

Bouhlel dijo además que vio a un hombre salir del camión con un arma y comenzar a disparar.

El ministro del Interior de Francia, Bernard Cazeneuve, aseguró que entre las víctimas había niños y que varias personas están en condición crítica.

"Estamos en una guerra con los terroristas que nos quieren atacar a cualquier precio y de una forma muy violenta",  enfatizó.

Aseguró que el camión embistió a la multitud durante una distancia de dos kilómetros.

Según el canal "BFM T", la policía logró verificar la identidad del asesino que provocó la matanza : se llama Mohamed Lahouaiej Bouhlel, que fue abatido por la policía.

El documento de identidad del hombre de 31 años- de doble nacionalidad, francesa y tunecina- que no tenía antecedentes terroristas, fue hallado en el interior del vehículo.

El propietario del carnet había nacido en la misma ciudad de Niza, en 1985. Tenía en su poder un arma corta -de calibre 7.65- que utilizó antes de ser abatido y también otras armas largas y una granada de mano.

En el camión, que había sido alquilado hace unos días, también se descubrió una tarjeta de crédito y un móvil que podrían servir para avanzar en la investigación.

Christian Estrosi dijo a BFM TV que "el conductor le disparó a la multitud, de acuerdo con el policía que lo mató".

Imágenes que se transmitieron en la prensa francesa mostraron a la gente corriendo para preservar sus vidas a lo largo de la Promenade des Anglais (Paseo de los Ingleses), que data del siglo XIX.

Hollande dijo en un mensaje a la nación transmitido por televisión que Francia estaba bajo "amenaza terrorista islámica".

Además, prorrogó por tres meses el estado de emergencia que había sido implementado desde los ataques de noviembre, que dejaron 130 muertos en París

En primera persona
El periodista de Nice Matin, Damien Allemand -quien estaba cerca del lugar- expresó que la exhibición de fuegos artificiales había terminado y la multitud se puso de pie para retirarse cuando escucharon el ruido y los gritos.

"Una fracción de segundo después, un enorme camión blanco conducía a gran velocidad, girando el volante para atropellar al mayor número de gente posible", relató.

"Vi cuerpos volar como bolos de bowling a lo largo del trayecto. Escuché ruidos, gritos que jamás olvidaré", señaló conmocionado.

Había cuerpos despedazados por todo el asfalto, incluyendo los apilados sobre otros, mientras que las personas se desangraban por las calles o quedaban tendidas.

"¡Por favor! ¡Ayuden a mi madre!" gritó alguien en medio del escenario de pánico y llanto.

Kayla Repan, de Boca Ratón, Florida, que estaba entre los cientos de personas reunidas para ver los fuegos artificiales, dijo: "Toda la ciudad corría. Me asusté muchísimo e hice lo mismo.

"Era un caos. Nos ocultamos en un restaurante", expresó. 

El conductor del camión disparó varias veces antes de ser abatido por la policía. El diputado francés Eric Ciotti describió "imágenes terroríficas en el lugar, una escena de horror absoluto, con muchos niños entre los muertos".

"Familias que compartían un momento de ocio fueron tomadas como blancos. Era un día simbólico en un lugar simbólico. La suma de estos dos símbolos fue lo que motivó el atentado", agregó el diputado.

El periodista Damien Allemand coincidió en los sucedido tras la exhibición de fuegos artificiales: "Vi cuerpos volar a lo largo del trayecto. Escuché ruidos, gritos que jamás olvidaré''.

Apuntó que el lugar era una escena de terror, con cuerpos despedazados en el asfalto y personas que agonizaban.

"Era una carnicería en la calle, con cadáveres por todas partes", contó una de las personas allí presentes.

El pánico y la confusión se apoderaron del paseo, mientras la policía y el alcalde de Niza le pedían a la población que no saliera a la calle.

Un hombre que se hallaba a pocos metros y se salvó de milagro, y que aún no se reponía de la terrible escena, recordó: "He visto gente triturada, cabezas ensangrentadas, pedazos de cuerpos separados".

Según los testimonios, el terrorista condujo el camión a 80 km por hora, zigzagueando para matar a la mayor cantidad de gente.

Michael Amar, gerente de una playa de estacionamiento de la avenida, hizo otro relato estremecedor a la cadena BFM TV:  "El camión se montó sobre la vereda y comenzó a aplastar a la gente. La mayor parte de las personas estaba de espaldas mirando los fuegos artificiales. Fue indescriptible"

"Había muchos chicos que estaban encantados con el espectáculo cuando se desató el horror. Había gente tirada, aplastada, fue un caos de sangre y de gritos".

Thomas Russo, propietario italiano de un restaurante ubicado en el paseo, contó que ante el pánico que produjo el ataque "en menos de 30 segundos decenas y decenas de personas ingresaron presas del pánico en mi local". "Permanecían agachadas en el interior, fue espeluznante".

Germán Carbonell, un ciudadano español que trabaja en Niza, se preguntaba cómo ese camión llegó hasta ahí sin que nadie pueda evitarlo.

"Estábamos justo enfrente. Empiezo a ver la llegada del camión y hasta que se detiene transcurren unos 30 metros. Escucho a la gente gritar tras los atropellos. Luego el vehículo se para y el conductor saca el brazo. Llega la policía y comienza a disparar. Ahí empezamos a correr todos", dice.

Sandra, otra testigo, dio un relato espeluznante: "Vi cuerpos volando. Oí gritos que nunca voy a olvidar. Estaba paralizada. No me moví. A mi alrededor, había pánico, la gente corría, gritando, llorando".

Un argentino allí presente contó: "Había muchas personas circulando, que se estaba desconcentrando del lugar. De repente la gente empezó a correr porque se escuchaban los disparos y ahí no miden si hay niños, no miden nada, pasaban por encima de todo el mundo (...) Era como una estampida. Empezaban a volar las mesas".

"Mis chicos me preguntaban: 'papá, ¿nos van a matar? Fue terrorífico, continuó.

Me preguntaban '¿quiénes son? ¿Son ladrones? ¿Nos van a robar?'. En un momento, uno de mis hijos se me perdió; estaba dentro del restaurante. El momento de desesperación es tremendo".

Sin argentinos
"Ante el cruento atentado terrorista, la Argentina expresa su total condena a esa injusta manifestación de violencia", dice un comunicado divulgado esta noche por la Cancillería.

A través de la nota, el Gobierno transmitió "sus condolencias y solidaridad al gobierno y al pueblo francés. Especialmente a los heridos y a los familiares de las víctimas".

"La Argentina reafirma su voluntad de profundizar la lucha contra el terrorismo y de asegurar la paz y la seguridad internacional, en el marco del derecho internacional y del respeto a los derechos humanos", subraya el documento.

Asimismo, reportó que "hasta el momento, según la información disponible, no se registran víctimas de nacionalidad argentina".

No obstante, informó a los argentinos residentes en Francia que habilitó el número telefónico de emergencia +33 625082579 para atender solicitudes de información y asistencia.