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Se viene la nueva Copa Davis: millonarios premios ahora atraen a grandes figuras del tenis

Este lunes comienza la primera edición del histórico torneo bajo un formato renovado. Una promesa de u$s3.000 millones impulsó el cambio
15/11/2019 - 17:34hs
Se viene la nueva Copa Davis: millonarios premios ahora atraen a grandes figuras del tenis

Cuando la noticia se anunció, el mundo del tenis se convulsionó. Un jugador de fútbol impulsaba una modificación en la legendaria Copa Davis. Aquella que empezó a disputarse entre estadounidenses e ingleses en el 1900 y que, desde hace casi cien años, se realizaba bajo los mismos preceptos que la rigieron hasta la edición 2018.

Sin embargo, fue Gerard Piqué, el defensor del Barcelona, cabeza del poderoso grupo inversor Kosmos, quien alteró el orden histórico para darle al torneo otra potencia económica.

El proyecto de Kosmos, apoyado desde su raíz por la ITF (International Tennis Federation), debía someterse a votación y su aprobación debía superar el 66% para que pudiera prosperar.

Finalmente, bajo la promesa de invertir u$s3.000 millones en veinticinco años, la reestructuración de la copa fue aprobada con más del 70% de los votos, por las federaciones ligadas a la ITF.

La multimillonaria suma de dinero tiene por objetivo aumentar los premios para las asociaciones nacionales y los jugadores, cuestión que se hará visible desde la edición de este año. Otra de las metas es expandir al deporte por países en los que no es tan popular, a partir de planes de desarrollo e inversión en infraestructura.

Este lunes, 18 de noviembre, comenzará a disputarse la fase final, en la Caja Mágica de Madrid, lugar donde también se lleva a cabo el Abierto de Madrid todos los años.

Esto ya es, por varios motivos, una novedad. En primer lugar, porque se disputará en una sede única para todos los equipos participantes. Históricamente, alguno de los dos equipos que se enfrentaban oficiaba de local y elegía, entre otras cosas, la superficie sobre la cual se disputarían los partidos. Ahora, en el caso de Madrid, todos se jugarán sobre superficie dura.

Por otro lado, no existía una fase final como esta, en la cual habrá seis grupos integrados por 3 naciones cada uno, de las cuales la mejor de cada grupo, junto con los dos mejores segundos en general, avanzarán de ronda. En cambio, siempre se jugaban cruces directos entre dos países, desde los octavos de final hasta la final.

Otra diferencia importante es la duración. Mientras que hasta el año pasado las series se jugaban cada dos o tres meses, en un fin de semana, pero distribuidos desde febrero hasta noviembre, hoy todo se concentra en seis días. Para ello fue necesario reducir la extensión de los choques.

Anteriormente, se jugaban cuatro partidos de singles más uno de dobles, a cinco sets y en caso de haber quinto set, no podía definirse por tie break, sino que duraba hasta que alguno de los jugadores, una vez alcanzados los seis juegos ganados, le sacara dos de ventaja al rival.

A partir de este año, solo se jugarán dos partidos de singles y uno de dobles, al mejor de tres sets y todos definibles a partir de tie break.

Las chances de Argentina

Argentina compartirá grupo con Chile y Alemania, y ante la baja de Alexander Zverev por el lado germano, el equipo nacional parece ser favorito a liderar la zona. El martes, a las 7:00, el equipo capitaneado por Guillermo Coria y Gastón Gaudio debutará ante el país trasandino.

El equipo argentino está compuesto por Diego Schwartzman, Guido Pella y Leonardo Mayer, pensados principalmente para los partidos de singles y Horacio Zeballos y Máximo González, especialistas en dobles, que hasta ahora han conseguido buenos resultados juntos.

El sistema de clasificación para este año fue por el ranking de la Copa Davis. Ingresaron los dieciséis mejores ubicado, que integraban el grupo mundial, más dos invitados: Argentina y Gran Bretaña.

En el caso británico, la figura de Andy Murray en el que, en teoría, sería su último año profesional, motivó a los organizadores a realizar la invitación. El caso argentino es más complejo, ya que si bien ocupa el tercer puesto del mencionado ranking, cuando se decidió el cambio de formato, había perdido su plaza en el grupo mundial y había bajado a la zona americana.

Sin embargo, por sus buenos antecedentes, Argentina fue invitada a participar de este nuevo torneo. Más allá de eso, con la tranquilidad de tener su participación asegurada, disputó, después, una serie frente a Colombia para regresar a la zona mundial y la ganó.

Para las próximas ediciones, no habrá ranking para clasificar. Sólo los cuatro mejores países de este año tendrán su lugar asegurado en 2020, mientras que quienes finalicen entre el puesto 5° y el 16° se enfrentarán en una eliminatoria clasificatoria contra doce naciones del grupo mundial 1. Los últimos dos de esta competencia no participarán el año que viene. Por todo eso, sería fundamental para Argentina lograr entrar a las semifinales este año y asegurar su plaza para el que viene.

Los premios movilizan a las estrellas

Una de las cuestiones que ha incentivado a los jugadores más importantes del mundo a participar en este campeonato renovado, son los millones que se ofrecen en concepto de premios. En total, se repartirán para todas las federaciones participantes unos u$s8,5 millones y entre los tenistas u$s17 millones, aproximadamente.

Sólo por participar en la fase de grupos, la asociación de cada país se embolsará más de u$s280.000 y los jugadores se repartirán más de u$s566.000. La federación campeona habrá recaudado un total de más de u$s3,5 millones y sus tenistas habrán sumado más de u$s7.100.000. Si bien hay que considerar que los premios deben ser divididos entre cinco, el total que se lleva el equipo ganador de la Davis es mayor que el total que le entregaron a sus campeones tres de los cuatro torneos grandes este año: el Abierto de Australia, Roland Garros y Wimbledon.

Por último, si desde el punto de vista económico el grupo Kosmos sigue jugando fuerte, siempre podrá tener a disposición a las grandes estrellas, dado que la ITF lo autorizó a negociar directamente con los tenistas y por lo tanto, establecer garantías para los mejores jugadores.

Esto implica abonarles un monto fijo, independientemente de lo que puedan recaudar en concepto de premios, para asegurarse su participación. Esta costumbre, que se lleva a cabo en algunos torneos ATP de menos importancia, está muchísimo más arraigada en otros deportes como el golf. En ese caso, diversos torneos del PGA o del Tour de Europa, se aseguran la presencia de los jugadores de más importancia, que, sin una suma asegurada, quizás no viajarían a ciertos destinos.

En este caso, Novak Djokovic y Rafael Nadal serán las principales figuras. No así Roger Federer, quien, a partir de su faceta empresaria, se ha mostrado en contra del nuevo formato, dado que intenta darle popularidad a la Laver Cup, un torneo que en algún punto podría asemejársele y que él mismo impulsa. Además, si bien, finalmente, tampoco participará, se mostró a favor de la ATP Cup, que se disputará a partir de enero y se erige como la posible competencia a esta Copa Davis remodelada.

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