Día del Psicólogo: ¿por qué se celebra cada 13 de octubre en la Argentina?
En la Argentina y en muchas partes del mundo se celebra cada 13 de octubre el Día del Psicólogo.
En la Argentina esta fecha especial para los profesionales de la salud mental se instituyó en 1974, cuando la Confederación de Psicólogos de la República Argentina (CoPRA), entidad antecesora de la actual FePRA, convocó al Primer Encuentro Nacional de Psicólogos y Estudiantes de Psicología en la ciudad de Córdoba.
Según recuerda la Federación de Psicólogos de la República Argentina (FePRA), en 1974 un grupo de psicólogos argentinos constituyó un día específico para fortalecer la disciplina y establecer una identidad profesional: el Día del Psicólogo.
Este encuentro se erigió como un espacio para pensar y trabajar por los derechos de los psicólogos, por la construcción de una identidad profesional y donde miles de psicólogos y estudiantes de todo el país unieron sus fuerzas en defensa de la psicología.
"Han pasado muchos años desde aquel 13 de Octubre de 1974, tiempos de logros y dificultades, tiempos en que los psicólogos logramos jerarquizarnos como profesionales independientes y autónomos y en que la Psicología continuó fortaleciéndose, respondiendo a las demandas actuales de nuestra sociedad y que constituyen un desafío permanente para nuestra ciencia", se lee en la página web de la Federación.
"Pero hoy mas que nunca, nos encontramos como trabajadores de la salud mental, con nuevos obstáculos que sortear, como los embates a la implementación de la Ley Nacional de Salud Mental y su decreto reglamentario. Reivindicamos la construcción colectiva, el debate y la defensa por los derechos de todos y todas los Psicólogos y Psicólogas de nuestro país y de los derechos de los usuarios de salud mental", dijeron en su saludo a los profesionales.
También Alberto Barbieri, rector de la Universidad de Buenos Aires (UBA) decidió saludar a los profesionales de la salud en su día. En un mensaje enviado a los medios de comunicación, declaró: Saludamos en su día a las psicólogas y psicólogos de todo el país por su fundamental tarea en estos tiempos de angustia e incertidumbre generadas por la pandemia del COVID-19."
"Es además un orgullo para la UBA felicitar a las autoridades de nuestra Facultad de Psicología, a las y los alumnos, graduadas y graduados, a las y los investigadores, al personal no docente, a las profesoras y profesores por el esfuerzo de adaptación realizado, y a las y los voluntarios por la contención solidaria que brindan a la sociedad que padece las consecuencias psicológicas de estos tiempos tan difíciles que atravesamos", cerró el rector.
Psicólogos y pandemia

Desde el primer momento en que la pandemia de COVID-19 llegó a la Argentina las distintas entidades y organizaciones que nuclean a los psicólogos lucharon porque se considerara a la atención psicológica como actividad "esencial".
Midieron, desde el Observatorio de Psicología Social Aplicada (OPSA) el avance de distintos problemas de salud mental que se complicaron con las medidas de aislamiento social, como los síntomas de ansiedad y estrés.
Encontraron que más del 75% de los consultados en la Argentina declaraban tener algún tipo de malestar psicológico, y afirmaban que urgía tomar medidas para asistir a la salud mental y no solo a la física durante la etapa de pandemia.
De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió a mediados de mayo del 2020 que la crisis del coronavirus y sus consecuencias afectarían la salud mental de muchas personas. La organización explicó que se podría registrar un aumento de los suicidios y de los trastornos, y pidió a los gobiernos que no dejasen de lado la atención psicológica.
La OMS detectó un incremento de la angustia de un 35% en China, un 60% en Irán o un 40% en Estados Unidos, tres de los países más afectados por la pandemia.
Entre los colectivos más afectados se encuentran los profesionales que han estado más expuestos al virus, tanto aquellos vinculados al ámbito sanitario como aquellos que han llevado a cabo otras tareas esenciales. Algunos de ellos tienen mucho miedo de llevar el virus a casa.