En un mundo cada vez más interconectado y dinámico, la intersección entre el deporte y la empresa se presenta como un espacio de oportunidades y sinergias que no podemos pasar por alto. Tanto en el deporte como en la empresa convergen valores fundamentales como el trabajo en equipo, el liderazgo, la disciplina, la tecnología y la búsqueda constante de la excelencia, lo que hace de esta relación una asociación natural y fructífera.

Desde el Comité Olímpico Argentino, cuyo objetivo es promover y fomentar el deporte en todas sus dimensiones y LIDE Argentina, grupo que reúne a líderes empresariales comprometidos con el desarrollo económico y social del país, queremos destacar la importancia de fortalecer y expandir esta relación, para aprovechar al máximo los beneficios mutuos que puede brindar.

Ambas instituciones desde hace siete años llevamos adelante el Fórum Nacional del Deporte. Algunas personas se preguntan qué hace la institución del deporte amateur por excelencia junto con un grupo de empresarios organizando un evento. No entienden el inmenso y maravilloso campo de cooperación y colaboración que existe entre ambos sectores.

En primer lugar, es crucial reconocer el papel del deporte como agente de inclusión social. El acceso al deporte y la actividad física no solo promueve la salud y el bienestar de las personas, sino que también contribuye a la integración social, la cohesión comunitaria y la prevención de conductas nocivas.

Por otro lado, el deporte de alto rendimiento y la competencia profesional ofrecen lecciones valiosas para el mundo empresarial. La preparación rigurosa, la gestión del talento, la resiliencia ante la adversidad y la capacidad de innovación son aspectos que tanto deportistas como empresarios deben cultivar para alcanzar el éxito en sus respectivos campos. La colaboración entre deportistas de élite y líderes empresariales puede enriquecer ambas disciplinas, compartiendo experiencias, conocimientos y mejores prácticas que impulsen el crecimiento y la excelencia.

Además, no podemos pasar por alto el impacto económico y comercial que genera la industria del deporte. Desde la organización de eventos deportivos hasta la comercialización de productos y servicios relacionados, el deporte representa un importante motor económico que impulsa el crecimiento y la generación de empleo. Las empresas tienen la oportunidad de asociarse con el deporte a través de patrocinios, alianzas estratégicas y proyectos de responsabilidad social empresarial, fortaleciendo su imagen de marca y su conexión con la comunidad.

Mario Moccia, presidente del Comité Olímpico Argentino y presidente de LIDE Deporte

El potencial transformador de la colaboración entre deporte y empresa

En Argentina, la relación entre el deporte y la empresa ha dado lugar a exitosas iniciativas que demuestran el potencial transformador de esta colaboración. Pero no hace falta ir muy lejos, porque hay ejemplos en cada ciudad, en cada pueblo, en cada barrio de la Argentina de un empresario apoyando al deporte.

Capítulo aparte merece lo relativo al desarrollo de lo que se denomina la "Industria del Deporte": miles de empresarios y emprendedores argentinos han encontrado oportunidades de negocio, creando empresas y startups innovadoras en áreas como la tecnología deportiva, el turismo deportivo o la gestión de eventos. Estas iniciativas no solo generan empleo y crecimiento económico, sino que también contribuyen al desarrollo y profesionalización del sector deportivo en el país.

Ambas instituciones estamos trabajando juntas para lograr para la Argentina, al igual que lo tiene ya hace varios años Brasil, una "Ley de Incentivo al Deporte y Para-deporte". Es uno de los objetivos para los que nos reunimos en el Fórum Nacional del Deporte.

Nuestro vecino país ofrece un ejemplo regional relevante de cómo la legislación puede fomentar la colaboración entre el deporte y la empresa. La "Lei de Incentivo ao Esporte", también conocida como "Ley Pelé" en honor al legendario futbolista brasileño, es un marco legal que permite a las empresas brasileras destinar parte de su impuesto a las ganancias a proyectos deportivos aprobados por el gobierno.

Este mecanismo de incentivos fiscales ha sido fundamental para impulsar la inversión privada en el deporte en Brasil, beneficiando a la comunidad deportiva y a las empresas que la apoyan.

Gracias a esta ley, Brasil ha logrado desarrollar una robusta industria del deporte, aumentar la participación en actividades deportivas y mejorar la infraestructura deportiva en todo el país. Además, ha permitido que empresas de diferentes sectores y tamaños se involucren en iniciativas deportivas, fortaleciendo así su compromiso con la comunidad y su imagen de responsabilidad social corporativa.

Rodolfo de Felipe, presidente de LIDE Argentina

Este ejemplo demuestra cómo una legislación proactiva y orientada al fomento del deporte puede generar beneficios significativos para la sociedad en su conjunto, promoviendo la actividad física, la inclusión social y el desarrollo económico. Argentina podría tomar nota de este ejemplo exitoso y considerar la implementación de medidas similares que impulsen la colaboración entre el deporte y la empresa en nuestro país.

Desde el Comité Olímpico Argentino y LIDE Argentina invitamos a empresarios, deportistas y líderes de la comunidad a unirse en esta misión compartida, aprovechando el poder transformador del deporte y la empresa para generar un cambio positivo en nuestra sociedad. Juntos, podemos alcanzar nuevas alturas y superar cualquier desafío que se nos presente.

Los ejemplos mencionados demuestran el potencial transformador de la relación entre el deporte y la empresa; que no es una relación de "suma cero". Es de "suma positiva"… todos ganamos!!

*Mario Moccia, presidente del Comité Olímpico Argentino y presidente de LIDE Deporte

*Rodolfo de Felipe, presidente de LIDE Argentina