Qué se puede traer del exterior sin declarar ni pagar aranceles en la Aduana argentina
Con la llegada de las vacaciones de invierno y el auge de las compras en el extranjero, muchos argentinos se preguntan qué productos están autorizados a ingresar al país sin tener que pagar impuestos y cuáles están prohibidos. Las autoridades aduaneras -entre ellas, la Agencia de Recaudación de Control Aduanero (ARCA)- establecen límites, excepciones y procedimientos que es importante conocer para evitar demoras o sanciones.
Objetos permitidos sin pagar aranceles
Cada persona que regresa a la Argentina puede ingresar sin pagar impuestos un teléfono celular y una notebook o tablet. Estos dispositivos se consideran de uso personal y están exentos de tributos, independientemente de su valor.
También están permitidas las prendas de vestir, accesorios y objetos personales siempre que no tengan fines comerciales. En caso de que el viajero haya salido del país con ciertos bienes, como cámaras fotográficas o equipos electrónicos, puede reingresarlos si fueron debidamente declarados al momento de la salida.
Si se trata de un grupo familiar -matrimonios, uniones convivenciales o adultos con hijos menores de 16 años no emancipados-, las franquicias individuales se pueden combinar. Es decir, se puede sumar el total permitido para distribuirlo entre todos los integrantes del grupo.
Franquicias según el medio de transporte
El valor máximo permitido para ingresar productos sin pagar impuestos varía de acuerdo con el medio de transporte utilizado. Quienes ingresan al país por vía aérea o marítima cuentan con una franquicia de 500 dólares por persona, a la que se suma otra de 500 dólares exclusiva para compras realizadas en los free shops de llegada.
En cambio, quienes ingresan por tierra o por vía fluvial tienen una franquicia de 300 dólares, sin acceso al beneficio del free shop, excepto en Puerto Iguazú, donde sí se permite una franquicia adicional de 500 dólares.
En el caso de los menores de 16 años, los valores autorizados se reducen a la mitad: 250 dólares si viajan por vía aérea o marítima, y 150 dólares si lo hacen por tierra o río. Cabe aclarar que estas franquicias pueden utilizarse una sola vez por mes, sin importar la cantidad de viajes realizados.
Qué sucede si se supera el límite permitido
Cuando los bienes adquiridos en el exterior superan la franquicia, el viajero debe pagar un arancel del 50% sobre el monto excedido. Por ejemplo, si se regresa por vía aérea y se compró un artículo de 600 dólares, se deberá abonar un impuesto de 50 dólares, ya que el excedente sobre la franquicia de 500 es de 100 dólares.
Para declarar estos bienes, es necesario completar una declaración jurada digital. El formulario puede descargarse desde el sitio web de ARCA, a través de la app oficial o en las terminales de autogestión ubicadas en aeropuertos y pasos fronterizos. Si no es posible completar la declaración de manera digital, se puede hacer en papel, solicitando el formulario al personal de aduana.
También es obligatorio declarar por esa misma vía otros ítems regulados, como productos alcanzados por SENASA (alimentos, vegetales o animales), o dinero en efectivo o instrumentos monetarios que superen los 10.000 dólares en el caso de adultos o los 5.000 dólares para menores de 16 años.
Vías de ingreso y controles aduaneros
Al llegar al país, los pasajeros deben elegir entre dos vías: "No tiene para declarar", si no se superó la franquicia ni se ingresan productos especiales, y "Tiene para declarar", si se traen bienes cuyo valor excede el monto permitido o si se deben declarar elementos específicos. En ambos casos, el personal de aduana puede inspeccionar el equipaje.
Si un pasajero omite declarar artículos que superan la franquicia, puede enfrentar el secuestro de esos bienes y una denuncia formal.
Productos que no se pueden ingresar
Además de los límites económicos, existen restricciones estrictas sobre ciertos productos cuyo ingreso está directamente prohibido. Según la normativa vigente, está vedado traer al país armas y explosivos sin autorización previa de la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMAC), sustancias estupefacientes, objetos de valor arqueológico o cultural, mercadería destinada a actividades comerciales o industriales, y electrodomésticos de línea blanca, como heladeras, cocinas o lavarropas.
El objetivo de estas prohibiciones es proteger la seguridad, la salud pública y el patrimonio cultural, así como evitar el ingreso de productos que puedan afectar la industria nacional.