Femicidio de Cecilia Strzyzowski: el papel de cada uno de los condenados según la fiscalía

El juicio por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, que mantuvo en vilo a la provincia de Chaco y a todo el país, concluyó con un veredicto de culpabilidad para seis de los siete imputados. Tras una extensa deliberación, el jurado popular declaró culpables a César Mario Alejandro Sena, ex pareja de la víctima y principal acusado, y a sus padres, Marcela Verónica Acuña y Emerenciano Sena, líderes piqueteros de la región. El veredicto unánime se anunció este sábado, sentando las bases para las penas que se definirán en los próximos días durante la audiencia de cesura.

César Sena fue hallado culpable del delito de homicidio doblemente agravado por el vínculo y por haberse cometido en contexto de violencia de género, en carácter de autor. Por su parte, Marcela Acuña y Emerenciano Sena fueron considerados partícipes primarios del mismo crimen. Además, el jurado dictaminó condenas para tres colaboradores del clan: Gustavo Obregón, Fabiana Cecilia González y Gustavo Melgarejo, por diferentes grados de encubrimiento. La única absuelta fue Griselda Lucía Reynoso.

La fiscalía, representada por Juan Martín Bogado, centró sus alegatos en la existencia de una maniobra deliberada y planificada para asesinar a Cecilia, quien fue engañada bajo la promesa de comenzar una nueva vida junto a César en Ushuaia. Para los investigadores judiciales, el crimen, que se produjo el 2 de junio de 2023 en la vivienda familiar de Resistencia, no habría sido posible sin la participación activa y esencial de los padres de César, quienes, motivados por el rechazo a la relación y la necesidad de mantener el control financiero y personal sobre su hijo, aseguraron un entorno de impunidad.

Caso Cecilia: el rol de los autores y partícipes primarios en el femicidio

La acusación reconstruyó el plan de acción de la familia Sena, que culminó con el asesinato de Cecilia en la casa ubicada en la calle Santa María de Oro 1460, y la posterior tentativa de hacer desaparecer el cuerpo en un predio rural.

• César Sena: Fue señalado por la fiscalía como el autor material del femicidio. La reconstrucción indica que la mañana del 2 de junio, César y Cecilia llegaron a la casa bajo el falso pretexto de que iniciarían el viaje. Una vez dentro de una de las habitaciones, César mató a la víctima. Aunque el modo exacto no se pudo determinar, la presencia de rasguños en su cuello sugiere que Cecilia pudo haber sido estrangulada o sometida a una maniobra de ahorcamiento. Tras el crimen, César envolvió el cuerpo y participó activamente en su traslado fuera de la propiedad para su incineración.
• Marcela Acuña: La madre de César fue considerada partícipe primario del delito. Según la acusación, Acuña tuvo un rol esencial tanto en la planificación como en las maniobras de encubrimiento. Si bien salió de la vivienda antes de que se produjera el asesinato, reingresó al poco tiempo y tuvo contacto con la escena del crimen, percibiendo el cuerpo envuelto en una frazada. La fiscalía sostiene que, inmediatamente, Acuña convocó a sus colaboradores de confianza, Fabiana González y Gustavo Obregón, para que la asistieran en las tareas de limpieza, borrado de pruebas y coordinación para la desaparición del cuerpo, asegurando el silencio familiar.
• Emerenciano Sena: El padre de César fue declarado partícipe primario por haber brindado el apoyo logístico y el entorno de protección necesario para que el crimen se llevara a cabo con la promesa de impunidad. Aunque Emerenciano se ausentó de la vivienda antes del hecho, la fiscalía argumentó que su influencia decisiva como líder familiar y político, sumada a su notoria negativa a la relación de César con Cecilia, lo convirtió en una pieza fundamental en la preparación del escenario y en la autorización para proceder con el plan criminal.

Los colaboradores y el encubrimiento de los restos

El cuerpo de la víctima fue trasladado a un campo rural de la familia en Puerto Tirol, donde se intentó incinerarlo. Los investigadores judiciales lograron determinar que la tarea de ocultamiento del femicidio y la destrucción de la evidencia fue facilitada por tres personas de la máxima confianza del clan Sena.

• Gustavo Obregón: Chofer y asistente privado de la familia durante años. Obregón fue hallado culpable de encubrimiento agravado. La fiscalía consideró que su intervención fue clave en el ocultamiento del cuerpo: acudió a la vivienda tras el llamado de Acuña y colaboró con César en el traslado del cuerpo en la cajuela de la camioneta Hilux. Además, participó en la remoción de muebles y objetos de la habitación donde ocurrió el crimen, los cuales luego fueron hallados con rastros de sangre de Cecilia.
• Fabiana González: Secretaria y persona de extrema confianza de los Sena, González fue condenada por encubrimiento agravado. Convocada por Marcela Acuña, llegó a la vivienda poco después de Obregón y colaboró en la limpieza de la escena del crimen. Su rol fue garantizar que no quedaran rastros que comprometieran a los autores del femicidio, facilitando las maniobras de ocultamiento y el traslado de objetos vinculados al hecho.
• Gustavo Melgarejo: Casero del campo donde fue trasladado el cuerpo. Melgarejo fue declarado culpable de encubrimiento simple. Su participación se centró en la colaboración para la destrucción de los restos, al encargarse de mantener encendido el fuego para la incineración. Su accionar, según la acusación, entorpeció la investigación al dificultar el hallazgo de evidencia fundamental para el caso.

El veredicto, que incluye una absolución para Griselda Reinoso, cuidadora del predio rural, cierra la etapa de juicio. En los próximos días, la jueza técnica Dolly Fernández convocará a la audiencia de cesura, donde se determinarán las penas definitivas para cada uno de los seis condenados.