iProfesionaliProfesional

Los pronósticos de las fábricas y concesionarios, todos inactivos por el coronavirus

Las terminales cerraron sus plantas hasta el 1 de abril. Lo mismo pasó con las ventas de 0km y los usados, quienes anticipan un agravamiento de la crisis
23/03/2020 - 10:20hs
Los pronósticos de las fábricas y concesionarios, todos inactivos por el coronavirus

La cuarentena responsable y obligatoria que se está viviendo desde hace algunos días en la Argentina llevó a muchos sectores a replantearse el negocio para "sobrevivir", por lo menos, hasta que pase este situación de riesgo que afecta a todo el mundo por la propagación del coronavirus. Esta realidad no escapa al sector automotor, donde se pararon las fábricas y se cerraron concesionarios.

Tras el anuncio del Presidente Alberto Fernández, y consideradas como un bien que no es de primera necesidad, las terminales locales tuvieron que bajar las persianas. Horas antes del anuncio, Ford había decidido hacerlo siguiendo con una orden global, que abarca a todo Sudamérica. Pocas horas después, las 12 marcas que producen en el país siguieron los mismos pasos.

La primera medida que se había tomado fue en las áreas administrativas, donde casi todo el personal  ya estaba haciendo home office y con mayores cuidados y  seguridad en las plantas. Una vez con el decreto en mano, se paró la producción.

En los concesionarios pasó lo mismo y se vieron obligados a cerrar sus puertas, lo que llevó, rápidamente, a advertir sobre una dura crisis que está por venir. Tienen que pagar sueldos, mantener estructuras y sostener el stock parado sin ingresos, todo esto, en un mercado donde las ventas ya venían cayendo.

Pero el riesgo no está solo para las ventas oficiales de 0km, sino que, en todo el país, hay ciento de vendedores de usados que también se ven duramente golpeados. La situación en este caso más compleja.

Así lo advirtió Alberto Príncipe, presidente de la Cámara de Comercio Automotor. "Los concesionarios están paralizados y asustados por su economía, hay interrogantes sobre la continuidad del negocio, como se van a proveer y qué pasará con los impuestos y obligaciones", dijo.

"Todavía no sabemos qué forma de pago habrá, estamos hablando como funcionarán los bancos, pero nada seguro", agregó Príncipe.

Por otro lado, los concesionarios de usados están todos conectados a través de la cámara para evacuar dudas legales e impositivas.

"Venimos perdiendo muchos jugadores por el sistema económico anterior. Se habla del cierre de 200 concesionarios que son muchos más, porque tienen sucursales. El usado se sostiene por el volumen, no por rentabilidad, y estamos complicados", comentó.

Ahora, admite que sucedió esta catástrofe que perjudicará al sector, pondrá en riesgo los empleos, pero igual se buscarán soluciones.

Ventas en caída libre

En este contexto, y con el cierre del registro automotor, se vendieron en marzo 18.000 unidades, una caída de 54% contra el mismo mes del año anterior, el cual, a su vez, había caído casi 60% contra marzo de 2018.

En cuanto a la producción, los cálculos preliminares es que hasta la semana pasada las diez terminales que producen vehículos habían fabricado entre 17.000 y 20.000 unidades, muy por debajo de las 29.000 (con más días hábiles, desde ya) de marzo del año pasado.

"Estamos navegando aguas desconocidas y tormentosas. Nada fácil", fue la conclusión del director de una de las principales automotrices agrupadas en la Asociación de Fabricantes de Automotores (ADEFA). En aquella empresa tuvieron que cerrar de golpe la producción, apenas horas más tarde de haber anunciado a sus operarios que se iba a continuar la actividad hasta este miércoles.La estadística de ADEFA podría arrojar, si se toma el período acumulado enero-marzo, una caída de alrededor de 10% contra la muy mala producción del año pasado: la industria ya venía trabajando a menos de un tercio de su capacidad instalada al cierre de 2019. Y había arrancado el año con una caída acumulada del 1,4% entre enero y febrero.

En todas las terminales dan por descontado que, ya sea por el coronavirus o por cuestiones logísticas, es muy difícil que el 1º de abril se vuelva a producir, al menos de manera automática.

Estrategias

Mientras se reorganizan y esperan medidas para superar esta crisis, algunas marcas usan sus plataformas de venta online o atienden consultas telefónicas para hacer gestiones de reservas y atención al cliente.

Toyota y Peugeot son alguna de las que tienen plataformas difitales para vender. En otras, el contacto llenando un formulario es el medio para mantenerse cerca del cliente.

"Estamos atravesando una situación de extrema preocupación, porque también tenemos sueldos que pagar y una rentabilidad muy baja, que ya había dejado al negocio contra las cuerdas", explicaron desde una automotriz.