El ajuste llegó al mercado de seguros: qué aseguradoras dejaron de operar y por qué
Cuando una aseguradora quiebra, es común que los productores y sus clientes busquen trasladar sus pólizas a otras empresas. Sin embargo, en el sector automotor, especialmente en vehículos vinculados a servicios de taxis o plataformas como UBER, este proceso no suele ser inmediato. De hecho, la reciente caída de compañías como Orbis y La Nueva genera dudas sobre la cantidad de vehículos que realmente circulan con sus seguros vigentes.
El ajuste de la Superintendencia de Seguros: fin de operaciones para varias aseguradoras
Bajo la gestión de Guillermo Plate, la Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN) emprendió un proceso de ordenamiento del sector, dejando fuera del mercado a aseguradoras con juicios impagos, balances irregulares y reaseguros incumplidos. Ya se cerraron Boston Seguros, Caledonia y Escudo, y avanza la liquidación de Orbis, entre otras.
La reciente suspensión de La Nueva Seguros sorprendió, aunque no era inesperada tras las advertencias de la SSN. Funcionando como una cooperativa donde los asociados son los asegurados, tiene un consejo similar al de una empresa tradicional. Según fuentes de la SSN, "avanzamos con los controles de manera gradual".
Controles estrictos para garantizar solvencia y liquidez
Desde la SSN explicaron que la prioridad es verificar los balances y asegurar que las aseguradoras cuenten con liquidez y solvencia para afrontar el pago de juicios:
- Si no hay fondos, se procede a una inhibición para restringir la disposición libre de bienes hasta resolver la situación financiera.
- Si los números rojos persisten, se prohíbe emitir nuevas pólizas, tal como se hizo con La Nueva.
La Superintendencia de Seguros de la Nación sancionó a La Nueva el 19 de mayo con una inhibición general de bienes, mediante una resolución oficial que resaltó la seriedad de no haber presentado los estados contables, lo que dificulta evaluar la solvencia financiera de la aseguradora.
La semana pasada, se sumó la prohibición de emitir nuevos contratos, medida que marca un posible fin inminente para la compañía, que apelará, pero necesita una fuerte inversión para revertir la situación.
La percepción del sector: "La Nueva está en la recta final"
Entre productores de seguros circulan mensajes que aseguran que "La Nueva Seguros acaba de recibir la extremaunción". La restricción para celebrar nuevos contratos es vista como la señal definitiva.
Diversos especialistas coinciden en que es muy probable que la empresa presente una apelación, como ocurre en la mayoría de los casos sancionados, pero advierten que, sin la llegada de un inversor, la compañía está prácticamente condenada a desaparecer.
Orbis y La Nueva: crisis que refleja el mercado automotor
Las sanciones a Orbis fueron anteriores y se esperaba que La Nueva captara parte de su cartera, pero eso no sucedió, evidenciando la crisis profunda que atraviesa el seguro automotor.
Directivos de empresas líderes, que prefieren mantener su anonimato, atribuyen las dificultades a varios factores. La caída económica impacta en clientes que no pueden afrontar aumentos de pólizas que llegaron a duplicarse, especialmente para vehículos vinculados a servicios públicos como taxis, muchos asegurados a través de AMCA, la mutual de taxistas relacionada con Orbis.
Desde el sector indican que el valor de un auto asegurado que hace un año estaba estimado en $4 millones, hoy se ubica en torno a $8millones, pero el conductor sigue teniendo el mismo vehículo. Además, los costos suben por el aumento en los precios de repuestos y una mayor frecuencia de siniestros, lo que genera más judicializaciones.
"Peritos locos" y sentencias millonarias que complican a las aseguradoras
Uno de los problemas más graves son los llamados "peritos locos": profesionales que persuaden a jueces para dictar sentencias con indemnizaciones elevadas, cerca de los $80 millones, lo que eleva la carga financiera de las compañías y puede llevar a su liquidación forzosa.
La SSN incrementó recientemente los valores de indemnización por responsabilidad civil, duplicándolos de $40 millones a $80 millones en casos de muerte o lesiones.
Varios analistas señalan que las nuevas regulaciones impulsadas por Guillermo Plate, con supervisión de Juan Pazo y Luis Caputo, buscan "limpiar" el mercado, que podría quedar dominado por pocas grandes aseguradoras exentas de sanciones, lo que genera sospechas.
Además, el sector enfrenta una crisis económica, caída del consumo y un aumento de fraudes como siniestros falsos y autorrobos, que afectan la viabilidad de las aseguradoras de vehículos en las grandes ciudades.