La india Tata Motors compra una automotriz que fabrica en Argentina
Tata Motors oficializó su ingreso a Argentina tras la compra de Iveco, empresa que fabrica utilitarios pesados en el país.
El monto de la operación es de u$s4.400 millones, y forma parte de un acuerdo global que llevará un año de transición.
Este anuncio redefine el mapa automotor regional y posiciona a la india como jugador clave en el mercado de camiones y buses, ya que Iveco tiene una presencia consolidada en América Latina.
Por otro lado, también involucra activos en Europa, Asia y América Latina, y marca la inversión más importante de la india en casi 20 años, cuando adquirió Corus en 2007 y Land Rover en 2008.
Desembarco de Tata en Argentina
Con esta adquisición, la firma india suma a su portafolio marcas y plantas industriales clave en el segmento de vehículos comerciales, incluidos camiones, buses, motores y servicios posventa.
En Argentina, donde Iveco mantiene operaciones desde hace décadas, Tata hereda una base de operaciones activa y una red comercial, lo que le permite ingresar al país con infraestructura operativa lista para consolidar su presencia.
La operación será completada en el primer trimestre de 2026, marcando la entrada de un jugador clave en un segmento donde los vehículos comerciales tienen peso económico por su impacto en la logística.
Tata, dueña de Jaguar Land Rover
La compra de Iveco representa el mayor movimiento estratégico de Tata Motors desde que adquirió Jaguar Land Rover en 2008 y la siderúrgica Corus en 2007.
Para Tata, los objetivos son:
- Acceder a tecnologías de punta en vehículos eléctricos, motores híbridos y plataformas comerciales pesadas.
- Aumentar su participación en mercados donde aún tenía presencia limitada, como América Latina.
- Incorporar marcas con reconocimiento internacional y consolidar una red industrial eficiente.
Por su parte, Iveco (hasta ahora parte del holding Exor) libera recursos que le permitirán redirigir inversiones hacia otras áreas de negocio.
Ganancias de Tata en baja
Tata Motors reportó una ganancia neta de 446 millones de dólares para el trimestre abril-junio del año fiscal 26, lo que marca una caída interanual del 30% comparado con el mismo período del año pasado.
Esta fue una caída menor de lo que habían proyectado las corredurías.
La compañía atribuyó el desempeño más débil a la disminución del volumen en todos los segmentos comerciales y una caída de la rentabilidad en Jaguar Land Rover (JLR).
Tata Motors dijo que los aranceles del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tuvieron un efecto adverso en las ventas del fabricante de automóviles de lujo.
Los ingresos de JLR cayeron más del 9% a 6.600 millones de libras esterlinas, mientras que su margen EBIT se contrajo en 490 puntos básicos hasta el 4%.
En el segmento de vehículos comerciales, los ingresos cayeron un 4,7% hasta los 17.000 millones de rupias.
Perspectiva de Tata Motors
Tata Motors dijo que es probable que las condiciones de la demanda sigan siendo desafiantes.
La compañía declaró que se centraría en fortalecer los fundamentos del negocio, mitigar los impactos arancelarios aprovechando la fortaleza de la marca para mejorar su combinación de productos e implementar acciones específicas para aumentar los márgenes de contribución.
El director financiero del grupo, PB Balaji, dijo que, a pesar de los vientos en contra macroeconómicos, la compañía entregó un trimestre rentable respaldado por sólidos fundamentos.
Agregó que a medida que surge la claridad de las tarifas y la demanda festiva se recupera, Tata Motors tiene como objetivo acelerar el desempeño y reconstruir el impulso en toda su cartera.