Los autos 0km pueden bajar de precio por la quita de un impuesto y se paraliza la venta

El sector automotor se mantiene expectante ante la posibilidad de que se elimine la escala vigente del Impuesto Interno que grava a los autos 0km de mayor precio.

Según se confirmó con el proyecto presentado este jueves, el Ejecutivo incluyó, dentro de un paquete de medidas que forman parte de la reforma laboral, la eliminación de este tributo para una serie de sectores, entre el que se encuentra el de los autos.

De concretarse esta iniciativa, implicaría un alivio fiscal para el sector que se trasladaría en una rebaja de precios que podría rondar entre 15% y 20 por ciento.

Las automotrices estaban negociando con el Gobierno la reducción de la carga fiscal para el sector. Uno de los puntos a modificar era el mal denominado impuesto al "lujo".

Autos: cuándo se aplica el impuesto al lujo

Desde el 1° de diciembre se actualizó la base imponible de Internos. El nuevo valor fiscal es de $74.314.009, por un ajuste de 17,65% correspondiente al trimestre entre julio y septiembre, con base en el incremento de precios mayoristas que registraron los 0km en ese período.

Este monto es el precio de fábrica a concesionarias. Con esta modificación, los 0km de alrededor de más de $120.000.000 precio al público quedaron alcanzados con este tributo y deben pagar una alícuota de 18%.

La modificación tiene vigencia hasta fin de febrero, salvo que antes se apruebe su eliminación en el Congreso.

A comienzo de año, el Gobierno había eliminado la primera escala, pero quedó vigente la segunda, que es la que se actualizó a fin de noviembre.

Si bien la eliminación de este tributo era reclamada por las empresas, la información que está trascendiendo ahora está generando preocupación en el sector por el efecto negativo que ya está generando en el mercado. Al hacerse pública la posibilidad de su eliminación y que eso implicaría una baja de precios, muchos compradores empiezan a postergar su decisión de compra a la espera de valores más bajos.

Así lo confirmaron desde concesionarias de marcas como Audi, Mercedes-Benz y BMW. "No sabemos cuándo va a salir, pero ya sentimos el impacto en la demanda. La gente está viniendo a preguntar y, obviamente, prefiere esperar. Nosotros lo que estamos haciendo es tratar de cerrar operaciones con el compromiso de cobrarle al cliente el precio con la rebaja en el caso de que se apruebe el cambio tributario", explicaron desde una concesionaria de Mercedes-Benz.

En el caso de una agencia de Audi reconocieron que la información que circula paró las ventas. "Nunca es bueno que se anuncie una medida como esta, con tanta anticipación, porque frena las ventas. Es lo que está pasando hoy. La gente pregunta por la baja de precios", explicaron.

En tanto, desde una concesionaria de BMW, coincidieron en que en estos días la demanda está expectante a lo que pase con los impuestos: "Se siente el impacto en la gente. Ahora, todos quieren esperar a que baje el precio".

Freno a las ventas de autos 0km

Más allá de lo que sucede en este segmento de autos premium, la noticia está provocando que se frenen ventas en 0km de menor valor, ya que se especula que una baja de precio de los 0km más caros haga que bajen los que están en una escala inferior.

"Hay mucha confusión entre el público porque cree que le quitan un impuesto a todos los autos y que van a bajar todos. Puede haber un efecto cascada, pero va a ser de poca magnitud como para decidir esperar", explicaron en una concesionaria Ford.

Esta situación se produce en un momento en que las ventas, en general, estaban en baja. "Que tomen la medida rápido, porque el mercado está duro como para perder operaciones por especulación", dijo el gerente de una agencia Chevrolet.

Un dato a tener en cuenta es que, si se elimina el impuesto, cómo van a reaccionar los importadores y las concesionarias que tienen en stock unidades que ya lo pagaron.

Una alternativa es que acepten la pérdida económica y trasladen la rebaja impositiva al precio de los 0km. También es cierto que pueden intentar defender el precio de esos vehículos con un descuento menor -dependerá de lo que haga la competencia – y recién aplique la rebaja total a las unidades que se importan ya con el nuevo esquema tributario.

Algo similar pasa con todos los autos que están en el puerto o llegando al país. Esos vehículos todavía no fueron nacionalizados y no pagaron el impuesto. Lo lógico sería que los importadores dejen los 0km en los depósitos a la espera de que rija el beneficio impositivo.

Este gravamen se viene aplicando desde hace años con distintos niveles de intensidad. Comenzó a tener relevancia en el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, fue subido a un nivel récord desde el 2014, solo se atenuó –pese a que había anunciado eliminarlo– durante la presidencia de Mauricio Macri y volvieron a tener un impacto mayor desde la llegada de Alberto Fernández.

De hecho, se modificó la forma de cálculo (antes era por la inflación general, tal como se estableció en el gobierno de Cambiemos) para pasar a un índice mayorista. Ahora, Javier Milei se encamina a eliminarlo, si es que se aprueba en el Congreso el proyecto de reforma laboral tal como lo presentó el Gobierno.