El déficit en la cuenta corriente fue el más alto desde la salida de la convertibilidad
La cuenta corriente registró un déficit de u$s2.380 millones, el doble del rojo que se registró en el mismo período de 2012, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
La cuenta corriente es la medición más amplia del comercio de un país con el resto del mundo, e incluye el intercambio de bienes y servicios y los flujos de inversión.
En tanto, la cuenta financiera tuvo un superávit de u$s1.261 millones, un 20% más que en igual trimestre de 2012, debido a que están suspendidos los giros por utilidades al exterior.
A su vez, el INDEC precisó que entre enero y marzo de 2013, las reservas cayeron u$s2.583 millones, según informó DyN.
"El déficit en la cuenta corriente en el primer trimestre del año fue el mayor desde la salida de la convertibilidad", dijo al diario La Nación el economista jefe de la consultora Ecolatina, Lorenzo Sigaut Gravina. Y añadió que también en la cuenta de servicios (uno de los principales componentes de la cuenta corriente, junto con la cuenta de mercancías y la de rentas de la inversión) el déficit alcanzó niveles récord.
De hecho, el deterioro de la cuenta corriente responde a diversos motivos. Uno de ellos es la fuerte caída en el superávit de mercancías, que pasó de US$ 3143 millones en el primer trimestre de 2012 a 2006 millones en igual período de este año. Esta baja es resultado, principalmente, del aumento en las importaciones de combustibles (57% interanual en el acumulado hasta marzo), pero también, como explicó Sigaut Gravina, de la baja en algunas exportaciones, como las de trigo.
En el segundo trimestre se liquida la mayor parte de las exportaciones de la cosecha gruesa del agro y eso permitiría que la cuenta corriente muestre mejores resultados en el próximo informe (de hecho, en mayo la baja en el superávit comercial fue mucho menor que en los meses previos). Sin embargo, para Soledad Pérez Duhalde, coordinadora de Análisis Económico de abeceb.com, se trataría de una recuperación "estacional".
La analista también destacó al citado matutino que el deterioro en la cuenta de servicios, cuyo déficit pasó de u$s1.084 millones a u$s1575 millones. En esa cuenta, según Pérez Duhalde, tiene un fuerte impacto el desempeño del sector turístico.
Es decir, esa cuenta refleja la mayor salida de dólares por los viajes de los argentinos al exterior (donde gastan dinero o extraen dólares en cajeros automáticos) y la menor entrada de divisas por la caída en el turismo receptivo, según muestra el propio INDEC.
El cepo cambiario y la consecuente brecha entre la cotización del dólar en el mercado oficial y en el paralelo también juegan en contra de las cuentas externas de la Argentina, ya que, como mencionó Sigaut Gravina, las divisas que los turistas extranjeros cambian en el mercado informal no ingresan en el sistema financiero y, por tanto, no se contabilizan en el balance de pagos.
Los analistas consultados por el matutino La Nación también resaltaron un dato de la cuenta de capital y financiera (cuyo superávit pasó de u$s1.075 millones a 1.263 millones): en el primer trimestre del año el endeudamiento externo neto de los gobiernos locales (es decir, la diferencia entre nuevos desembolsos y amortizaciones) fue de apenas u$s28 millones, 94% menos que en el mismo período del año anterior.
"Eso muestra que los gobiernos locales tienen dificultades para endeudarse en el exterior", dijo Sigaut Gravina. Pérez Duhalde, en tanto, señaló que el cepo cambiario consiguió detener la fuga de capitales y limitar el giro de utilidades al exterior, pero, a la vez, paró la entrada de divisas por otras vías, como endeudamiento externo o turismo.