Al plan oficial para financiar la compra de camiones le cuesta mucho poner primera
Desde fines del año pasado, el Gobierno quiso anticiparse al golpe de la crisis internacional y así comenzó con una catarata de planes para estimular el consumo.
La estrategia de otorgar financiamiento a través de los fondos que quedaron en manos de la ANSES, tras el fin de las AFJP, involucraron a todo tipo de bienes: heladeras, lavarropas, cocinas, calefones, termotanques, bicicletas y vehículos.
Hasta el momento, todos avanzan sin pena ni gloria: en ninguno de estos rubros el nivel de ventas pudo superar el 10% de los volúmenes que el gobierno quería colocar.
El propio presidente de la Confederación de la Mediana Empresa (CAME), Osvaldo Cornide, destacó hace pocos días el "fracaso" de la iniciativa: "Lamentablemente los planes de estímulo para las compras de productos nacionales fallaron porque veo las caídas de dos dígitos que vienen sufriendo las ventas de electrodomésticos y otros artículos de consumo minorista".
Esto mismo parece estar ocurriendo en uno de los últimos y más ambiciosos planes lanzados por el Gobierno: el que otorga financiamiento para la compra de camiones y utilitarios y que busca incentivar la demanda, promover la producción y mejorar la calidad y eficiencia energética del servicio de transporte.
Si bien el anuncio tuvo lugar hace más de dos meses en la residencia presidencial de Olivos, hasta el momento se realizaron operaciones aisladas, ya que las trabas burocráticas demoraron mucho más de la cuenta su implementación, sumado a un contexto donde la demanda de unidades se desplomó.
En diálogo con iProfesional.com, Marcos Ferrario, aseguró que "este plan tenía un problema formal de papeleo entre las terminales, las concesionarias y la ANSES" y que "recién se terminó de cerrar hace dos semanas".
Esto generó que por el momento se hayan registrado muy pocos patentamientos bajo esta modalidad porque durante semanas las concesionarias no disponían de los papeles necesarios", sostuvo, para luego ratificar que "es muy incipiente, todavía no hay mucho movimiento".
Por su parte, fuentes de la Asociación de Concesionarias de la República Argentina (ACARA) confirmaron que "el plan está implementado" pero reconocieron que "está sufriendo un cierto grado de demora por cuestiones burocráticas".
En diálogo con este medio, un alto directivo de la empresa Scania Argentina, que participa del plan con tres modelos de camiones y uno de chasis para ómnibus, aseguró que "su puesta en marcha en las concesionarias no se llevó a cabo" y que "todavía no se realizó ninguna venta bajo esta modalidad".
Sin embargo, destacó que "todo lo que ayude a acercar el 0 Km al usuario es importante. Como acción es positiva".
Información poco clara para clientes
Tras realizar un amplio relevamiento en puntos de venta, quedó en claro que, en gran medida, reina la confusión.
Desde el departamento de ventas de una de las principales concesionarias oficiales de Mercedes Benz, que ofrece dos camiones un chasis y dos utilitarios, confirmaron que "aún no hicimos ninguna venta con este sistema".
Además, se quejaron de que "durante semanas la ANSES no tuvo las instrucciones y como, además, prácticamente ningún cliente vino a averiguar por este plan, realmente no sabemos si el sistema está aceitado o no".
Sin embargo, esto no es todo. Cuando un potencial comprador consulta por una de estas líneas, rápidamente es desalentado por los vendedores sobre las contras que tiene el plan oficial.
Esto fue lo que sucedió cuando iProfesional.com realizó una averiguación en una importante agencia que comercializa unidades importadas: "Parecía ser un sistema bueno, pero los gastos son enormes por el seguro que te imponen. Por eso lo que hacemos es ofrecer planes propios de la terminal que son muy convenientes y no el oficial", explicaron.
Desde otra concesionaria Mercedes ratificaron que hace dos semanas que lo tienen disponible pero que todavía no muestra señales de éxito porque "el Gobierno impone un seguro que determina que la cuota termine siendo muy cara".
Como evidencia de que la implementación es bastante desordenada, desde el departamento de ventas de Forcam, perteneciente a la red oficial de comercialización de Ford, explicaron que "esto fue anunciado a fines de febrero pero recién en estos días se puso en marcha, por lo tanto no hay mucho para contar".
Cómo funciona
El plan de camiones y utilitarios, también denominado "70/30", funciona de la siguiente manera:
- Se debe integrar un pago previo de 12 cuota partes, cada una de ellas equivalentes a 2,5% del valor de la unidad, de modo que las 12 primeras cuota-partes suman un 30% del precio.
- Este pago previo se realizará con un mínimo de 1 cuota mensual, quedando habilitado el interesado a aportar la totalidad del 30 % en un solo pago.
- Con el cumplimiento del pago previo, se financia el 70 % remanente en 36 cuota-partes equivalentes y el beneficiario recibe la unidad para su usufructo.
- El beneficiario debe pagar sucesivamente las cuota-partes restantes incluyendo comisiones. El Administrador gestiona el cobro del préstamo manteniendo los derechos de ejecución sobre el bien en cabeza del financiador.
- Las cuotas serán proporciones del precio actualizado de la unidad sin tasa de interés.
- Se cobran los seguros de vida y por accidente correspondientes.
- El Administrador cobra una comisión para sí más la comisión que se fije para el financiador
El negocio es importante y sensible, dado que, en el caso de los camiones –con precios que van de los $128 mil a los $386 mil-, cada unidad aporta hasta 10 veces más margen que un vehículo chico.
La demanda, caída
Más allá del intento del Gobierno de alentar la comercialización de vehículos pesados, la realidad es que las empresas no están en una buena posición como para traccionar la demanda.
Durante el primer trimestre del año los patentamientos de vehículos pesados para carga apenas superaron las 3.000 unidades, lo que implicó un desplome del 40% en relación al mismo período de 2008.
Una de las terminales más perjudicada fue Volkswagen, que pasó de colocar 166 unidades del modelo 13180 a apenas 66. Lo mismo sucedió con el 17220, del cual comenzaron a rodar por las calles 253 unidades en los primeros tres meses de 2008 pero cuya cifra cayó un 52% hasta las 122 en 2009.

En diálogo con iProfesional.com, Luis Morales, presidente de la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac), aseguró que "para nosotros todo lo que sea planes de estímulo en un contexto de crisis es positivo". Sin embargo, reconoció que "el interés en general, más allá de esta iniciativa oficial, es muy reducida. Solamente hay operaciones en aquellos casos donde sea obligatorio por ley renovar el camión. Son casos muy específicos, porque en general ninguna empresa está incorporando o renovando flota".
"Desde septiembre del año pasado le estamos aconsejando a los asociados prudencia, cautela, no agregar más camiones al mercado y no trabajar por debajo de los costos, ya es una sentencia de muerte a corto plazo", disparó Morales, quien agregó que "el único plan que necesitamos es que haya más producción y trabajo".
El sector del transporte de cargas, por la baja del consumo, la menor cosecha y la resistencia de comercializar granos, sufre en lo que va del año, una caída en su nivel de actividad de entre el 30 y el 50 por ciento.
Según Morales, "la rentabilidad está muy complicada porque a las empresas se les está haciendo muy difícil subir las tarifas, mientras que otras variables como el precio del combustible, las cubiertas y el mantenimiento ha subido. Por eso es que, en promedio, estamos trabajando al costo y encima tenemos que enfrentar un gran problema en la cadena de pagos, que pasó de un período de entre 20 y 30 días a entre 60 y 90. La situación es crítica".
Juan Diego Wasilevsky
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