El Ministerio de Trabajo negocia con los delegados de la línea 60

El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, se encontraba reunido este mediodía con delegados de la Línea 60, representantes de la empresa y de la Unión Tranviarios Automotor, en un nuevo intento por destrabar el paro que afecta a ese servicio de colectivos.

Los choferes denuncian una incorrecta liquidación de haberes y la persecusión gremial, por lo que se encuentran en huelga desde hace tres días.

Los delegados de la línea 60 mantuvieron el martes por la tarde una reunión con las autoridades de la cartera laboral, mientras los trabajadores se manifestaban frente a la sede del ministerio, en la avenida Alem al 600.

"Estamos esperando que la empresa acate la resolución del ministerio. Las medidas siguen en pie y no se bajarán hasta que haya un acuerdo", afirmó el Perticaro en la puerta de la cartera laboral.

Según Perticaro, el conflicto comenzó hace seis meses cuando "el sector empresario trató de hacer de esta empresa más rentable pero con ajustes al trabajador".

Denunció que la firma "contó como ausentes días que el trabajador no faltó, después no reconoció estos descuentos, da vueltas para no pagarlos y así se llega a una sumatoria de reclamos".

Los choferes calculan que la compañía tiene un ingreso diario de "cuatro millones de pesos" a raíz del funcionamiento de los 17 ramales, que cubre con 348 unidades que unen el barrio porteño de Constitución con los partidos bonaerenses de Tigre y Escobar para trasladar a unos 250 mil pasajeros.

"Con 500 mil pesos ya hubiera solucionado el conflicto, que afecta desde diciembre último a los salarios de 465 de los 1.340 trabajadores", dijo Daniel Farella, uno de los 13 delegados de los trabajadores.

El representante gremial advirtió que "la empresa MONSA va a tener pérdidas millonarias si sigue sin respetar el Convenio Colectivo de Trabajo al resistirse a implementar una correcta liquidación de haberes".