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La nafta sube más del 60% en un año, se desploma la venta y hay alerta por cierre de estaciones

La demanda de combustibles experimentó una fuerte caída en el primer bimestre. Se viene una nueva suba en marzo y todo indica que se profundizará la crisis
01/03/2019 - 05:45hs
La nafta sube más del 60% en un año, se desploma la venta y hay alerta por cierre de estaciones

La tendencia negativa se profundiza y nada hace pensar que se pueda revertir la crisis en el corto plazo. En sintonía con lo ocurrido a partir del segundo semestre del 2018, la venta de combustibles arrancó el año en baja y el nuevo aumento en las naftas no solo no es bien recibido por los propietarios de estaciones sino que desde el sector alertan que podría acelerar el cierre de bocas de expendio. 

El precio de los combustibles volvió a subir en este inicio de marzo. Y entre los empresarios del segmento se suman las voces que predicen que este incremento cercano al 3 por ciento golpeará con más fuerza a la demanda. 

Aplicado ese porcentaje de suba, el litro de súper en las estaciones porteñas quedará muy cerca de los 39 pesos.

Según un relevamiento del Ieral, la cotización acumula un salto de más del 60% en los últimos doce meses. La región patagónica es la más afectada, con un avance de más del 68% interanual, seguida por la región del Noroeste y Pampeana, con un incremento de más del 63%. 

En este contexto, la demanda de nafta y gasoil, según confirmaron a iProfesional fuentes de la Federación de Expendedores de Combustibles y Afines (FECAC), acumula en lo que va de 2019 una merma de casi un 8% en comparación con el mismo período pero del 2018.

Y es este indicador negativo el que despierta quejas en la mayoría de los estacioneros en relación con los sucesivos aumentos.

"No conviene que aumente la nafta, es así de concreto. La gente está comprando menos y eso se nota cada vez más. Es una ecuación muy simple: si el combustible vuelve a subir, tendremos una caída todavía mayor en los niveles de ventas. Eso terminará de empujar a la crisis a muchas estaciones de servicio, que hoy hacen esfuerzos enormes para mantenerse operativas", dijo a este medio Guillermo Lego, gerente de la confederación CECHA.

Esta visión por parte del empresario también es compartida por Raúl Castellano, referente de la cordobesa CECC. En diálogo con iProfesional, el directivo coincidió en señalar que en las bocas de expendio prefieren que no sigan las subas, luego de un verano que fue "peor que lo que se esperaba" en términos de ventas.

"Tenemos una caída muy fuerte en el despacho, algo que se agudizó desde septiembre del año pasado. En noviembre y diciembre sufrimos una caída del 10%  en las ventas. En ese sentido, observamos una continuidad de la merma y eso ya genera preocupación en la gente del sector en términos de empleos y supervivencia del negocio", expresó. 

Entre las razones detrás del incremento establecido en el arranque de marzo se mencionan la suba del dólar y el encarecimiento del barril de crudo Brent.

Cabe destacar que en febrero el dólar subió casi 5%, mientras que el crudo escaló desde los 62,6 dólares que estaba a comienzos de mes, hasta los 67 de los últimos días. Esto equivalió a una suba del 7%.

Costos en alza

Si bien en el ámbito de las estaciones de servicio hay coincidencias en que todavía no hubo despidos, los empresarios reconocen que la baja en las ventas de combustibles líquidos obliga a mayores desembolsos para sostener el capital de trabajo.

"Los costos operativos siguen en alza y eso nos obligó a invertir más, lo cual en muchos casos colocó a varias estaciones en situación límite. A medida que el precio de los combustibles se incrementa, debemos poner más dinero para reponer el producto. A eso hay que sumarle otros inconvenientes como los depósitos en efectivos, y los plazos e intereses atados a las operaciones con tarjeta de crédito", sostuvo al respecto Gabriel Bornoroni, titular de FECAC.

En diálogo con iProfesional, expuso que los empresarios de la comercialización mantuvieron reuniones con el secretario de Energía, Gustavo Lopetegui, en las cuales el funcionario reconoció que las petroleras ya alcanzaron un punto de equilibrio financiero. Por ende, este año no debería repetirse la escalada de subas que atravesó todo 2018.

Sin embargo, las fluctuaciones del Brent y la divisa estadounidense podrían complicar el escenario de estabilidad que la cartera de Energía pretende para este período.

"Lo óptimo para las estaciones de servicio es que este año no tengamos el nivel de aumentos que vivimos en 2018. Lamentablemente, se viene extendiendo la baja de la última parte de 2018 a nivel demanda y no notamos que se esté dando un arranque en el consumo. Necesitamos previsibilidad para adaptarnos a la situación", expresó el empresario.

Desde CECHA, Lego señaló que el déficit de los puntos de venta sigue incrementándose con el correr de los meses y el parate que muestra el consumo. Destacó, además, que a diferencia del año pasado, instancia en que la caída de la demanda de naftas premium en cierta forma se compensó con una mayor venta de los combustibles más baratos, durante enero y febrero el bajón afectó a todos los productos

"El despacho de súper ya no cubre la contracción de las alternativas más costosas. Confiamos en que el diálogo con Lopetegui y la posibilidad de sumarnos a una mesa de comercialización junto a las petroleras nos permitan dejar en claro nuestra posición. La suba de marzo nos va a complicar a todos y la realidad es que no queremos más aumentos", enfatizó.

Raúl Castellano, de CECC, alertó que, de avanzarse con más incrementos, las suspensiones de personal e incluso los cierres de puntos de venta comenzarán a volverse un tema común.

"Ya venían cerrando algunas estaciones de servicio, pero si el freno en la comercialización no termina, entonces habrá muchos jugadores chicos y medianos que no podrán resistir", dijo.

Según un informe realizado por la consultora FGC, el año pasado cerraron 96 bocas de expendio. En otros términos, dejó de operar una expendedora cada cuatro días.

Se trata de la mayor contracción desde 2013, quedando menos de 4.000 bocas en todo el país. 

Cuadro de precios

Hasta el jueves de esta semana, el litro de nafta súper se vendía a $37,62 en las estaciones de servicios de YPF de la Ciudad de Buenos Aires. El valor se ubicaba por debajo del precio de Axion, que comercializaba la misma unidad a $38,20 y del de Raizen, que ofrecía su producto a $38,52. Esta última opera la marca Shell.

En el caso de los combustibles premium, el litro de Infinia YPF en el Área Metropolitana de Buenos Aires costaba $43,40 pesos, mientras que la variedad V-Power de Shell alcanzaba los $44,43.

Con el incremento establecido para este arranque de marzo, la súper de YPF pasó a costar $38,72 el litro, mientras que la misma unidad en Axion ahora se ubica en los $39,31.

Por el lado de Shell, la cotización de la súper alcanza hoy los $39,64 pesos. Los valores para la premium, en tanto, ascendieron a $44,57 en el caso de la Infinia de YPF y $47,65 para la alternativa V-Power de Shell.

En el caso del gasoil, en YPF su opción más barata subió de $35,18 el litro a $36,23. El Infinia Diesel, en tanto, pasó de $41,18 a $42,20. En lo que respecta a Raizen, su gasoil más económico aumentó de $36,79 el litro a $39,72, mientras que el V-Power Diesel trepó de $42,82 a $43,96.

A raíz de este incremento vigente desde las primeras horas de este viernes, llenar un tanque de 50 litros con nafta súper desde hoy cuesta más de $1.930 en lugar de los $1.881 –ajustado al precio de la estatal YPF– vigentes hasta febrero último.

El año pasado, por variables como la devaluación, el incremento en los costos operativos y las distintas oscilaciones del crudo internacional, el Gobierno aplicó 14 incrementos al precio de los combustibles líquidos.