José Luis Machinea: "Argentina tiene una deuda que es absolutamente pagable, no necesita ir a default"

En un contexto en el que abundan los pronósticos tremendistas, llamó la atención el mensaje de relativa calma de José Luis Machinea, ex ministro de Economía y ex presidente del Banco Central. Con la autoridad que le confiere haber pasado momentos de crisis y alta volatilidad, afirma que el país no está en riesgo de caer en los extremos que el nivel de riesgo país parecería indicar.

"Se debe pensar en el año que viene", sentencia en una charla exclusiva con iProfesional.

Con su frase breve pero muy directa, el reconocido economista afirma que todo el 2019 estará enmarcado por la incertidumbre económica y política, por lo que no se espera que se genere crecimiento, tampoco una mayor credibilidad para el Gobierno.

A su entender, la salida a la crisis sucederá luego que se defina el escenario electoral, pero sobre todo que la nueva gestión presidencial genere confianza en los mercados para que haya un impulso en la actividad.

Para alcanzar este crecimiento, indica que se debe realizar un programa monetario y fiscal "razonable" que no sea "tan duro como el actual".

A continuación el diálogo de Machinea con iProfesional.

-¿Puede salir el país de este marco tan inestable?

-A corto plazo lo veo con mucha incertidumbre. Espero que el año que viene la situación cambie, con un nuevo gobierno y que la certidumbre que pueda dar ese gobierno mejore el panorama. O sea, el potencial argentino está ahí, si logramos generar certidumbre el año que viene la situación tendrá que acomodarse más o menos rápido. Pero los meses que quedan del 2019 serán de incertidumbre y estarán vinculados a las encuestas electorales, factor que es importante para la economía.

-Habla de certidumbre de un nuevo gobierno, ¿piensa que Cambiemos puede volver a tener la suficiente confianza del mercado?

-Pienso que sí, tendría que hacer cosas un poco distintas a las que hizo en los últimos tres años. Hoy día el Gobierno no tiene esa confianza, por lo que tendría que imaginar o proponer cosas diferentes. No digo que todo está mal, ni mucho menos, algunas cosas estuvieron bien pero otras son necesarias corregirlas.

-¿Cuáles son estas cuestiones que el Gobierno debería cambiar?

-Con la macroeconomía tuvo problemas de evaluación sobre cuál era la situación a enfrentar. Este programa económico era indispensable de hacer debido a que el país estaba cerca de una crisis, pero se debe hacer un programa monetario y fiscal razonable, que no sea tan duro como el actual, aunque tampoco ir a lo de antes. Por lo tanto, hay que construir ese programa y, segundo, el Gobierno tiene que poner un poco más de énfasis en las cuestiones de crecimiento y eso tiene que tener una visión de mediano y largo plazo. Todavía no he visto en las autoridades propuestas vinculadas a esto último.

-¿En qué pilares se sustentaría esta visión de crecimiento de la economía?

-En la inserción internacional, algo que el Gobierno está de acuerdo, pero tiene que sumarle a ello un segundo componente que es cómo hacemos para estimular la inversión y el desarrollo tecnológico, y eso requiere incentivos.

-¿Qué puede ocurrir en el mercado por la incertidumbre electoral?

-En los próximos meses tendremos en mayor o menor medida una dosis de dolarización. Cuando los candidatos a Presidente se sienten y expongan sus ideas veremos qué pasa, pueden aclarar u oscurecer el panorama. Pero mientras eso no pase, no está muy claro qué va a plantear la oposición y quién va a ser esa oposición. Hasta que eso no se resuelva, es difícil pensar o definir el futuro.

Insisto, hay un futuro desde el año que viene en adelante, que creo que es razonable. Argentina tiene una deuda que es absolutamente pagable, no necesita ir a default ni nada por el estilo. Si generamos credibilidad habrá una nueva oportunidad.

-¿Puede desestabilizar al Gobierno una posible corrida cambiaria antes de las elecciones?

-No creo que haya una corrida de tal magnitud, dependerá qué es lo que dicen los candidatos y qué perciba la gente, pero no pienso que estemos cerca de una catástrofe, ni mucho menos.

-Usted hablaba de lograr un crecimiento económico, ¿es posible alcanzarlo con tasas de interés cercanas al 70% anual?

-Estas son tasas que tienen que ver con una emergencia. Si se llega a mantenerse esta misma situación el año que viene, ahí tenemos un problema. Pero si hay un gobierno que genera credibilidad, las tasas se van a derrumbar y volverán a entrar los capitales porque la rentabilidad que ganan en la Argentina es muy grande.

-En caso de ganar Cambiemos, ¿cómo podría generar credibilidad si en los últimos tres años no ha podido consolidar una política monetaria?

-Uno aprende, no sólo de los aciertos sino también de los errores. Eso le puede pasar a Cambiemos. También es cierto que el próximo gobierno no va a tener una economía con tantas situaciones complicadas como tuvo éste al comienzo. Digo, había que corregir el tipo de cambio y las tarifas, que desde el punto de vista político y económico implicaba un muy alto costo. Ahora esto está básicamente corregido si se miran los precios relativos. Pero el costo asociado a generar credibilidad creo que es menor que lo que fue en los últimos años.

-En resumen, este año está perdido….

-No se puede hablar en los próximos meses de crecimiento, sino se debe pensar en el año que viene. Durante el 2019 la economía se va a poder recuperar algo, pero no habrá un boom de inversión, ni de crecimiento, para eso habrá que esperar al próximo gobierno.-