Tras las elecciones primarias del 11 de agosto, la economía del país sufrió una fuerte turbulencia.

El peso se devaluó casi un 30%, la inflación se aceleró y el riesgo país se triplicó.

Ante esto, el nuevo Ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, anunció la decisión del Gobierno de posponer el pago de 7000 millones de dólares, y de buscar el "reperfilamiento voluntario" de otros 50.000 millones. Entonces, la calificadora Standard & Poor’s habló de un "default selectivo", bajándole la calificación a Argentina, aunque este viernes dio marcha atrás con esta decisión.

Ahora bien, ¿qué significa "default selectivo" y cuál es la diferencia con un default tradicional?

Según explicó el economista Rodolfo Santangelo, en diálogo con TN: "La Argentina tomó una decisión sobre uno de sus tipos de deuda: las letras de tesorería. Y de las tres cláusulas que tiene una deuda, que son la tasa de interés, el monto del capital y la fecha de vencimiento, sobre esta última se eligió de manera unilateral no pagar en el plazo estipulado sino 90 días más tarde".

En tanto que su colega Matías Carugati agregó: "Cuando un país deja de pagar su deuda se dice que entra en default. Pero, aunque parezca raro, hay distintos tipos. El más común es un default general: el país no paga todos (o casi todos) los títulos públicos, sin distinción. Quiere decir que la Argentina dejó de pagar uno o más títulos públicos (Letes, Lecaps, Lecer y Lelink), pero continúa pagando la mayoría de ellos".

En este contexto cabe preguntarse cuáles podrían ser las eventuales consecuencias de que Argentina no pudiera cumplir con estos pagos. Santangelo contó que, en ese caso, "El riesgo es que se contagie al mercado cambiario y que se afecte a los depósitos en dólares, con la gente retirando de los bancos sus ahorros en esa moneda".