La fábrica de MWM International Engines ubicada en la ciudad cordobesa de Jesús María cerró definitivamente sus operaciones. Un baldazo de agua fría para unos cien empleados de la empresa que es subsidiaria de la norteamericana Navistar, quienes se enteraron este viernes de la noticia.

Con un breve comunicado, la empresa explicó los motivos del cierre: "A pesar de varias iniciativas para impulsar la producción local de motores y componentes y, recientemente, los grupos electrógenos, la continuidad de las operaciones de la compañía se ha vuelto inviable debido a los bajos volúmenes para satisfacer la demanda del mercado local".

El dirigente de Smata José Campellone, presente en el lugar, se mostró contrariado por la decisión y hasta lagrimeó junto a los operarios que permanecían fuera de la planta.

"Lamentablemente, cada vez que esta fábrica envió a un nuevo dirigente de Brasil no fue para generar buenas noticias, sino para manejar el cierre de una línea. No nos olvidamos que eso ocurrió en 2003, cuando la fábrica dejó de fabricar motores después de haber sido proveedora de Land Rover, Ford, y Mercedes Benz", dijo.

Según el diario La Voz, en las puertas de la fábrica, la desazón de los empleados era evidente. Cabezas gachas, ojos humedecidos, y reparto de abrazos en el momento de la despedida. Más allá de que la empresa anunció que pagará el 100% de las indemnizaciones, los salarios y premios adeudados, la preocupación se trasladó a la comunidad.

Es que en esta fábrica se desempeñaban alrededor de 100 personas, la mitad de ellos operarios, un número difícil de absorber por el mercado local. Y a ese número hay que sumarle otros 70 que se quedaron sin empleo cuando cerró la firma Súper Uno de Colonia Caroya.

"La impresión que me queda es la peor, pensábamos que íbamos a seguir aguantando y son 100 familias que se quedan en la calle. Trataremos de ver cómo continuamos, la vida sigue. La fábrica, más allá de que cierre, se ha portado bien con nosotros, pero me voy triste", relató entre lágrimas Mario Soria, uno de los delegados, y destacó la labor entre los compañeros de trabajo durante tantos años.

En la planta de Jesús María, MWM era "responsable del maquinado y montaje de diversos sistemas de motores", que eran exportados para Brasil y para las plantas en Estados Unidos, dice en su página MWM Brasil.