"El ministro de Economía de Argentina dimitió abruptamente el sábado por la noche, una medida que amenaza con desestabilizar aún más una economía ya sacudida por una inflación desorbitada, el aumento de los costes de la energía y el creciente temor a posibles nuevos impagos de la deuda", señaló el diario The New York Times en un artículo en el que hizo referencia a la salida de Martín Guzmán de su cargo.

"Martín Guzmán había negociado un acuerdo para reestructurar u$s44 mil millones de la deuda del país. Su partida amenaza con desestabilizar una economía ya sacudida", advirtió.

Las "tensiones en el seno del gobierno han estallado en torno a la forma de gestionar la crisis económica. Guzmán, relativamente moderado, chocó con el ala más militante de la coalición peronista gobernante, liderada por la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. La vicepresidenta había criticado públicamente el acuerdo con el FMI y había pedido más gasto público y más medidas gubernamentales para combatir la inflación", agrega.

Y hace hincapié en que la salida de Guzmán "fue la dimisión de más alto perfil desde que el presidente Alberto Fernández asumió el cargo a finales de 2019", y amplió que gran parte del equipo de Economía también tuvo la misma actitud.

"La renuncia del ministro Guzmán realmente descubre la ruptura interna en el gobierno", citó NYT al economista jefe de la Fundación Libertad y Progreso, Eugenio Marí.

Guzmán había sido un "ancla" para la política económica a pesar de sus luchas. "Desde el punto de vista económico", dijo Marí al NYT, "amplifica la dinámica de incertidumbre en la que ya se encontraba Argentina".

Martín Guzmán tomó la decisión con sus más allegados.

Sorpresa por la renuncia de Guzmán

La renuncia del ministro de Economía, Martín Guzmán, llegó de forma sorpresiva para todos los argentinos y, evidentemente, también para el Gobierno Nacional, que tuvo que convocar a una reunión urgente apenas conocida la noticia. 

La noticia también causó sorpresa en el seno del BCRA, en un contexto en el que todo el equipo económico estaba abocado a la tarea de incrementar reservas y tratar de controlar al mercado cambiario, luego de una semana de fuerte tensión para el dólar.

Además, dejó en off side al presidente, Alberto Fernández, quien un día atrás había defendido la gestión económica públicamente en un canal de televisión y a gran parte de su equipo económico.

Scioli y Pesce no esperaban la noticia

Todo indica, asimismo, que el resto del equipo económico tampoco esperaba la noticia, ya que hasta este viernes por la tarde, Guzmán había estado conversando con funcionarios del Banco Central de la República Argentina (BCRA) y del Ministerio de Producción sobre la gestión.

"Me sorprendió la noticia", dijo una fuente cercana al BCRA. Pero, claro que es una decisión que se toma con los más íntimos y los colaboradores más cercanos. Y el equipo de Guzmán no tiene nada que ver con el del recién llegado ministro de Producción Daniel Scioli y el presidente del BCRA Miguel Ángel Pesce.

Hubo muchos rumores de enemistad entre Miguel Pesce y Martín Guzmán durante estos años.

De hecho, más allá de que han venido trabajando en equipo y lo han hecho de manera pacífica y coordinada, muchas veces ha habido rumores en la City sobre las diferencias entre Pesce y Guzmán en la visión sobre varias cuestiones del manejo económico.

Lo que sí es verdad es que en la City "hay muchas críticas sobre el manejo de la deuda que venía haciendo Martín Guzmán", dice un analista.

El ministro de la deuda, atrapado por la deuda

Así, quien paradójicamente era llamado "el ministro de la deuda" quedó muy golpeado tras el desarme masivo de bonos iniciado por parte de los Fondos Comunes de Inversión (FCI), "que se llevó puesto ese mercado".

Eso obligó al Banco Central tener que salir a contener la caída y luego tuvo que acordar con los FCIs una medida que diera garantías de que se sostendría la curva de deuda en pesos ante otra eventual corrida.  

Y es que lo que le achacan muchos a Guzmán es, por un lado, que incrementó la deuda en pesos de manera exorbitante durante su gestión y, por el otro, que la gestión que hizo de la deuda en el mercado local no fue buena porque no ofrecía pagos de intereses parciales. "Eso es lo que habría hecho que muchos de los capitales decidieran retirarse en junio y habría afectado la sostenibilidad de la deuda en pesos", señala un analista de mercado.

Sin embargo, el golpe final lo habría dado la interna política entre Alberto Fernández y Cristina Kirchner. Ahora, Guzmán, seguramente, se proponga hacer carrera en alguno de los organismos internacionales de crédito, ya que, más allá de todos los problemas que deja su gestión en la economía argentina, se va habiendo acordado con el Fondo Monetario Internacional FMI y con las metas del primer trimestre cumplidas. Esas credenciales, sin dudas, le servirán para su proyección profesional, anticipan en la City.