El Banco Nación Argentina (BNA) lanzó una atractiva propuesta para los consumidores argentinos: descuentos del 25% y la posibilidad de pagar en hasta 6 cuotas sin tope de reintegro en la compra de indumentaria. Esta promoción estará disponible hasta el 31 de mayo y se extenderá también a librerías y jugueterías.

De acuerdo a un comunicado de la entidad, "a través de alianzas estratégicas con diversas marcas", se busca "incentivar el consumo y brindar beneficios a sus clientes".

Estas ofertas serán aplicables en operaciones abonadas con tarjetas de crédito del banco a través de la plataforma "MODO BNA+".

La iniciativa contempla períodos especiales de descuentos durante los fines de semana (viernes, sábado y domingo), así como también promociones durante la semana (martes-miércoles y jueves-viernes), con el objetivo de ampliar la cobertura y alcanzar a un mayor número de usuarios.

Para acceder a más detalles sobre las promociones, los interesados podrán visitar el enlace https://semananacion.com.ar/semananacion.

Banco ofrece descuento en ropa sin tope de reintegro

"Con estas acciones, el BNA reafirma su compromiso de respaldar a los comercios locales, impulsar el consumo y facilitar el acceso a una variedad de productos para las familias argentinas", destaca el comunicado oficial del banco. Esta iniciativa no solo beneficia a los consumidores, sino que también contribuye a dinamizar la economía y fortalecer el tejido comercial del país, en línea con los esfuerzos por reactivar el mercado y fomentar el bienestar de la población.

Se podrá pagar en hasta 6 cuotas sin tope de reintegro en la compra de indumentaria

La ropa es uno de los principales bienes de consumo de la población argentina, sólo por detrás de alimentos y bebidas y transporte. En 2018, los hogares argentinos destinaron el 6,9% de sus gastos totales a la compra de indumentaria y calzado. Dicha proporción es mayor que en otros países de la región como México (4,8%) o Chile (3,5%).

A su vez, existe una considerable diferencia entre lo que gastan los hogares en función de su nivel de ingreso. Los más pobres destinan proporcionalmente más a la compra de ropa que los más ricos. Esta diferencia se explica si vemos el tamaño promedio de los hogares: los de menores ingresos están compuestos por 4,73 miembros (promedio), mientras que los de mayores ingresos, por 1,93. Por este motivo, los hogares de menores ingresos destinan un mayor porcentaje del gasto a comprar ropa para infancias, mientras que los hogares de mayores ingresos gastan una mayor proporción en ropa para mujeres y hombres.