El bonus por inflación de SMATA marca las negociaciones

El Sindicato de Mecánicos (SMATA) está cerrando las últimas negociaciones con las terminales automotrices bonaerenses para que los operarios reciban el pago de una suma de dinero extra que oscilarí­a entre $2.500 y $3.300, a liquidar entre fines de este mes y principios de enero.

Los gremios insisten en negociar el llamado "suplemento adicional" para compensar la pérdida del valor de los ingresos de sus trabajadores a causa de la inflación. El acuerdo del bonus por inflación tiene una trascendencia que va más allá del sector automotriz: los sindicalistas lo ven como un "caso testigo" que podrí­a generalizarse a otros rubros de la economí­a.

Con SMATA y la Unión Obrera Metalúrgica (OUM) como pioneros, prácticamente todas las organizaciones demandarán aumentos salariales con un piso de 22%.

Caso testigo
El titular del gremio de los mecánicos, José Rodrí­guez, ya concluyó las conversaciones con cuatro empresas del sector: Toyota, Mercedes Benz, General Motors y Volkswagen. Esta semana también terminarí­a de acordar con Ford, mientras que otra importante automotriz como Peugeot-Citrí¶en tiene su propio convenio con la Unión Obrera Metalúrgica (UOM).

En Córdoba, la filial local del SMATA, que encabeza Omar Dragún, efectuó un reclamo similar al de Rodrí­guez: el pago "voluntario" de una suma que equivaldrí­a al salario promedio de un operador joven. Sindicalistas y empresarios señalan que los operadores más veteranos (con 40 años de trabajo y sumando horas extra) hoy perciben salarios de bolsillo de unos $7.000 mensuales. En algunas automotrices hablan de topes salariales de hasta $9.000.

Dentro del sector, hoy las automotrices bonaerenses pesan más que las de Córdoba, donde están Renault, que aún opera a un solo turno, la productora de camiones Iveco y Fiat, que recién el mes que viene volverá a fabricar autos. La única que está trabajando a full es una autopartista: Volkswagen Córdoba, productora de cajas de cambio.

Negociación colectiva
La gratificación extra se otorgará antes de retomar la negociación de fondo por el convenio colectivo de trabajo 2008-2010. Una por una, ya que no negocian en forma colectiva, las automotrices se sentarán a discutir con SMATA entre enero y febrero.

Desde el lado empresario, reclamarán que cualquier incremento esté atado a mayor productividad pero los gremios ya adelantaron su rechazo. Sin embargo, el punto donde habrá más discusión será alrededor del í­ndice real de inflación.

Los números que manejan los sindicalistas superan la pauta de aumento salarial del futuro gobierno y están muy por encima de los del sector empresarial.

Para la CGT una suba de entre 12% y 14%, como quiere el Gobierno, apenas equipara lo que se considera la inflación real de este año. A ese número de base, en la cuenta de los gremios, hay que sumarle la inflación prevista para el 2008 en el proyecto oficial de ley de Presupuesto, de casi el 8%, con lo que ya se llega al 20% pedido por los sindicalistas.

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