El Gobierno estudia incluir equipos de GNC al plan del "auto barato"
La Argentina actualmente es uno de los "paraísos" mundiales del Gas Natural Comprimido (GNC).
En efecto, con el 18% del market share, se erige como el segundo mercado -detrás de Pakistán-, con la mayor cantidad de autos funcionando mediante este combustible.
Sin embargo, de la época de oro, alcanzada en el 2003, el sector pasó a un período de "vacas flacas".
Sucede que la falta de financiamiento para los potenciales clientes se convirtió en el talón de Aquiles que no permite que la actividad continúe creciendo al mismo nivel en que lo hacía en las mejores épocas.
En este contexto, el presidente de la Cámara Argentina del Gas Natural Comprimido, Carlo Evi, adelantó a iProfesional.com que la semana próxima un nutrido grupo de representantes de las principales empresas del sector analizarán junto al Gobierno la posibilidad de sumar a la industria del GNC al plan de estímulo para la compra de vehículos 0 Km que impulsa el secretario de Comercio, Guillermo Moreno.
De este modo, parte de las 100.000 unidades que el Gobierno espera colocar en el mercado con financiación accesible podrían ser equipados, a pedido del cliente, con equipos de gas natural.
Evi, quien además es titular de Tomasetto Achille, principal fabricante y exportador de equipos de la Argentina, explicó que "la semana próxima tenemos en agenda varias reuniones, tanto con funcionarios como con representantes de bancos".
En concreto, el esquema que analizarán en la Secretaría de Comercio es que el Gobierno lance, a través de los bancos que se postulen, líneas de financiamiento a tasas bajas destinadas a aquellos adjudicatarios de las unidades 0 Km "morenistas" que deseen incorporar los clásicos tubos amarillos.
"Evidentemente el principal problema que tenemos en la actualidad es el del crédito. Hoy se están pagando tasas de hasta un 40% y esto se convierte en una barrera que nos perjudica a nosotros y a los usuarios", explicó Evi.
En este sentido, el empresario aseguró que "la iniciativa sería un éxito porque hay muchísimo interés por parte de los clientes. El flujo de gente que va a los talleres de conversión es muy grande, pero no pueden concretar la operación porque pagar esto con tarjeta de crédito se encareció muchísimo y la financiación convencional hoy directamente no existe".
De este modo, si bien prefirió no arriesgar números, sí adelantó que "aspiramos a que las nuevas tasas no superen el 15 por ciento."
Versión más económica
La totalidad de los modelos presentados por las terminales automotrices son versiones nafteras, ya que un vehículo diesel encarecería los costos entre $5.000 y 10.000 pesos.
Sin embargo, un tema cuestionado por los consumidores al momento de lanzar el plan fue que no sólo es difícil acceder a un auto, sino que el mantenimiento se hace muy costoso. Entre seguros e impuestos y cocheras fue casi un 18% mas caro sólo en noviembre.
Así, la industria automotriz y la del GNC podrían cerrar una suerte de círculo perfecto, según el propio Evi: "Este plan para la compra de vehículos nuevos con buen financiamiento es ideal para fomentar la adquisición de equipos de gas porque la filosofía del Gobierno es que el usuario ahorre comprando estos autos y la nuestra es que ahorre con el combustible".
Al respecto, explicó que "un equipo se amortiza en un año o menos también, algo que no sucede en ningún sector. No hay nada que te permita recuperar el dinero invertido en menos de un año. El ahorro, que depende de donde se cargue gas, puede ser del 65 al 70%".
Según Alberto Príncipe, presidente de la Cámara de Comercio Automotor (CCA), "cualquier iniciativa que sea para alentar a los sectores vinculados a la industria es positiva. "Lo mejor es mantener activos todos los segmentos", comentó a iProfesional.com.
Por otro lado, admitió que es una cuestión que también tendría que dirimirse con las terminales, para evaluar si el vehículo puede salir de fábrica con el equipo instalado o posteriormente lo harían los compradores.
La automotriz Fiat ya implementó en 2001 este modelo, entregando desde la terminal el auto con GNC, con garantía de fábrica. Lo hizo con el Duna y el Siena.
"El plan está funcionando de manera positiva aunque hay mucha ansiedad de las partes y muchas veces no se puede informar como corresponde. Sin embargo tanto la solicitud como contrato de venta está claro, solo falta tiempo de formación", comentó.
Fuertes generadores de divisas
La mayor parte de la torta del negocio del GNC está en manos de cinco empresas: Tomaseto Achille, Galileo, Inflex, Agira y Aspro, aunque está calculado que hay otras 70 empresas más chicas
"El sector necesita continuar trabajando. Tenemos 40.000 personas ocupadas en esta industria y nuestros productos se están vendiendo en todo el mundo, con software y hardware 100% nacional. Esto es algo que prácticamente no se ve en otros sectores", agregó.
El sector exporta anualmente unos u$s300 millones y los principales mercados son Brasil, Pakistán, Irán y Bangladesh.
Sin embargo, desde octubre padece una importante caída de las órdenes de compras por la crisis internacional.
Los sectores más perjudicadas fueron los fabricantes de los cilindros -con una caída de la facturación por ventas al exterior del orden del 40%- y los fabricantes de kits listos para el auto, -que experimentaron un desplome del 80%-.
De este modo, para Evi la iniciativa con el Gobierno sería fundamental porque "va a ayudar a sobrellevar los próximos meses que no van a ser nada fáciles", tanto en el mercado local como en los mercados externos.
Radiografía del negocio del GNC
A nivel global, desde que se lanzó el sistema, en la Argentina se convirtieron más de 1.740.000 vehículos. Sin embargo, con las bajas que hubo en los últimos años, poco más de 1,4 millones de autos efectivamente utilizan GNC.

Si bien la industria por ahora se mantiene firme, no atraviesa su mejor período por las restricciones crediticias y esto está a la vista: el promedio mensual de autos convertidos a gas en 2008 fue de 5.580 unidades, cifra que se encuentra muy por debajo de los 23.700 logrados logrados en 2003.
Así, los valores de 2008 se equiparan con los de los años más flojos de la convertibilidad.
Sin embargo, a pesar de este presente complejo, la Argentina es uno de los mercados líderes para este recurso energético: además de los 1,7 M de autos convertidos, ostenta 1.800 estaciones expendedoras repartidas en 322 ciudades. Sólo es superada por Pakistán, tal como se señaló anteriormente.
Brasil es el país que le pisa los talones, con 861 establecimientos en 273 ciudades y 1,5 millones de vehículos que funcionan a gas.

En el ranking internacional luego figuran Irán y la India, con una participación de casi 9% cada uno.
Por su parte, en algunas grandes economías como el caso de EE.UU., el GNC no es una alternativa muy difundida: apenas 100.000 autos cargan tubos en el baúl, lo que le da una participación magra del 1 por ciento.

Por último, a la hora de analizar la "guerra de los combustibles" en la Argentina, el líder indiscutido es el gasoil, con cerca de 1.200 millones de metros cúbicos comercializados por mes, lo que implica una participación del 63%; le sigue la nafta súper con el 22% y luego el GNC, con 238 M de metros cúbicos, lo que arroja un market share de casi 13%.
Juan Diego Wasilevsky
Guillermina Fossati
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