Cinco estrategias para invertir en los EE.UU.

En un contexto en el que Europa está sufriendo por los abultados déficits de varios paí­ses, quizás no sea tan mala idea invertir en Estados Unidos después de todo.

Al menos, así­ opinó un artí­culo de Wall Street Journal (WSJ) que recordó que Grecia está sufriendo las consecuencias de su agobiante crisis de deuda soberana. España planea rescatar a sus bancos azotados por el colapso del mercado inmobiliario. Portugal, Italia e Irlanda también evidencian sí­ntomas de debilidad.

En tanto, China ha restringido la concesión de préstamos en medio de la especulación de una burbuja en el mercado de bienes raí­ces.

Por estos motivos, algunos inversionistas profesionales aseguran que colocar algo de dinero en acciones y fondos mutuos de bonos principalmente centrados en EE.UU. es una forma de limitar su exposición a los problemas que amenazan a otros paí­ses.

Aun así­, es cierto que los mercados norteamericanos están lejos de ser estables. El Promedio Industrial Dow Jones cerró el segundo trimestre 10% a la baja, tras una seguidilla de cuatro trimestres de ganancias. También se aproximan otros vientos en contra, especialmente en el corto plazo. En junio, se eliminaron 125.000 puestos de trabajo, la primera pérdida en lo que va del año, y la tasa de desempleo sigue siendo alta.

Con todo, a la hora de armar un portafolio diversificado es recomendable y prudente incluir inversiones en ese paí­s. Pero para ello, cabe tener en cuenta algunas estrategias citadas por WSJ:

1. Concéntrese en el consumidor de EE.UU.
Los inversionistas que deseen elegir compañí­as estadounidenses concentradas únicamente en el consumidor de ese paí­s deberí­an fijarse en bancos regionales y firmas de servicios públicos y telecomunicaciones.

A diferencia de gigantes como General Electric y Coca-Cola, que recaudan "40% o más de sus ingresos del extranjero", los clientes de empresas en estos sectores "viven en el barrio", señala Todd Rosenbluth, analista de fondos mutuos de S&P.

Las compañí­as de servicios públicos y de telecomunicaciones no son vulnerables a los riesgos en otros paí­ses y sus dividendos tienen un rendimiento más alto, señala Rosenbluth.

También proveen servicios básicos, los cuales no se ven afectados por la disminución del gasto discrecional del consumidor.

Los bancos regionales, con modelos de negocios menos afectados por reformas regulatorias y un mayor capital, podrí­an estar en una mejor posición que los pequeños bancos comunitarios y sus pares mayores, apunta Eric Oja, analista de S&P Equity Research.

2. Juegue a la defensiva
No hay un ejemplo tan claro de la fortaleza de EE.UU. como un caza F-22 Raptor, así­ que, ¿por qué no invertir en defensa?

Con este tipo de apuestas, los inversionistas intentan determinar hasta qué punto el Gobierno se predispone a librar guerras e impulsar el gasto en las fuerzas armadas, sostiene Jeff Tjornehoj, analista de investigación de Lipper, firma que provee información y calificación de fondos mutuos.

Es un sector que ofrece pocas sorpresas, opina.

Una forma de ingresar en esta industria es a través del fondo Fidelity Select Defense & Aerospace, que invierte en contratistas militares incluyendo United Technologies, Boeing, Honeywell International y Lockheed Martin. El fondo registró un alza de 0,4% en el primer semestre del año, según Lipper.

3. Invierta en el Tí­o Sam
En el rango de las rentas fijas, está la deuda del gobierno, a través de bonos del gobierno y el Tesoro.

"El riesgo sobre estos (bonos) es extremadamente bajo", recalca Tjornehoj.

"Sabemos que gobiernos en todo el mundo están pasando apuros para lidiar con sus responsabilidades (de deuda), pero ninguno ha caí­do en cesación de pagos. Y están en peores condiciones que nosotros", opina.

Ambas categorí­as mostraron un buen desempeño en los primeros seis meses del año: los fondos soberanos acumulaban un alza de 6,3% y los bonos del Tesoro, una de 9,9%, según Lipper.

Una opción más conservadora es el Fidelity Intermediate Government Income Fund, que suma un alza de 4,4 por ciento.

"El riesgo es menor ya que compra bonos soberanos que están más cerca de vencer", explica Tjornehoj. Cuanto más lejos esté la fecha de vencimiento, más caerá el precio del bono por cada incremento en las tasas de interés.

4. Mentalidad "estatal"
Los fondos de bonos municipales exentos de impuestos en uno o varios estados son otra forma de invertir en EE.UU.

A diferencia de los bonos del Tesoro, los intereses de los bonos municipales no están gravados a nivel federal para los residentes.

Muchas ciudades y estados, como Georgia, tampoco cobran impuestos por esos ingresos si un residente compra un bono estatal.

5. Apueste a la moneda verde
El dólar estadounidense ha logrado conservar su valor últimamente, especialmente frente al euro.

La moneda verde registra un avance de 14% versus la moneda europea en la primera mitad del año.

Para los inversionistas que creen que esta recuperación es sólo pasajera y que "el dólar puede volver a caer contra otras monedas, una estrategia válida serí­an los fondos de divisas", concluye Tjornehoj en declaraciones a WSJ.